La mala comedia en la actualidad, para un regreso a la antigua comedia que realmente vale la pena admirar.

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Para seguir con el presente ensayo, comenzaré un poco a dar hincapié en lo que es la comedia, la comedia, como bien sabemos es un género dramático que tiene la característica de que los personajes se enfrentan a situaciones en las que se da mayor importancia a los defectos o situaciones en las que se encuentra el personaje, durante el desarrollo de la historia, pero tomando en cuenta que siempre debe terminar con un final feliz.

Más tarde, la comedia pasó a ser una representación más o menos estructurada, para entretener y hacer reír a los espectadores, mediante burlas, e historias en las que se hacían representar situaciones en las que los personajes por medio de los diálogos, o por gestos, hacían reír y divertirse al público.

Ahora bien, nos toca analizar acerca de la comedia que hoy en día se maneja en México, las obras teatrales que he tenido la oportunidad de ir a observar, que supuestamente son comedias, me he fijado claramente que han caído en el gran error, o al menos es lo que yo pienso que es un grave error, los propios directores en el vicio de hacer reír al espectador con un humor negro, un tono sarcástico y vulgar, y lo peor de todo es que veo que los chistes malos caen, porque es lo que la sociedad ha planteado tanto en estos días, burlarse de las vulgaridades habidas y por haber, en las redes sociales, en la convivencia familiar, en los eventos sociales, en el transporte público, entres muchos otros más lugares, ya no hay esa gran comedia que antes había, bien sabemos que en estos tiempos ya no hay mucha comedia, la mayoría de la gente de teatro prefiere irse a la tragedia, a la posmodernidad, a las farsas, entre muchos géneros que se han ido creando, las obras teatrales ya las manejan a modo que sean una mezcla de todo, pero debemos emprender nosotros mismos a que la comedia de antes vuelva, a ese humor blanco que no necesita de ninguna vulgaridad, sino que tiene, por decir una palabra, esa inocencia como Rafael Solana hace el planteamiento en debiera haber obispas, a mi me pareció una comedia muy buena aunque este un poco en el género de la pieza teatral, yo solo la veo como pieza teatral, por su desenlace que termina inconcluso, que es una de las características de la pieza, no tener un final y que el espectador se quede con las ganas de conocer más acerca de la obra, es rescatable que me hizo reír en muchos momentos, como cuando los propios integrantes de la comunidad donde se encontraban formularon la historia de que el sacerdote se había vuelto loco y había confesado los pecados de todos, cuando realmente eso no fue cierto, el hecho de como cada personaje va a entregarle a Matea regalitos para que guarde sus secretos, es muy chistoso también, Matea solo se burla de ellos, y como ya mencioné a la comedia después del periodo de la antigua Grecia, se manejaba en forma de burla, para que el espectador se riera de lo que estaba presenciando en escena.

Así pues, en este Septiembre del presente año, se celebra su centenario, con el cual este ensayo me ayudó a tomar conciencia, e investigar más sobre estas comedias que manejaba Solana, para que con estas herramientas, me tome a la tarea de montar algo de él para dar homenaje a este gran dramaturgo, dicen que no hay mejor homenaje que representar una de las obras de estos grandes maestros de teatro.

Bibliografía:

http://es.wikipedia.org/wiki/Rafael_Solana

Solana, Rafael. ¿Qué pasa con el teatro en México? México, Organización Editorial Novaro. 1967.

Solana, Rafael. Debiera haber obispas y otras piezas teatrales. México, Conaculta. 1999. (Lecturas Mexicanas, cuarta serie)