La mirada de Jafar

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Cayó la noche y desde mi habitación logré ver que el príncipe estaba en el balcón de la princesa y se la llevó en la alfombra a dar un paseo. Fui por unos guardias para deshacerme de Ali, solo necesitaba esperar a que volvieran para hacerlo. Tenía planeado mandarlo a la cárcel de nuevo y que nadie se enterara, pero cuando regresan ambos se besan y me enojé tanto que decidí mejor algo peor. Se despiden y mientras el príncipe se dirige a la puerta los guardianes lo agarran y lo encadenan a una bola de concreto y lo arrojan al mar. Por fin quité a todos los pretendientes que tenía. [pic 6]

Fui con el sultán y con el cetro le controlé la mente para que me otorgara el permiso de casarme con su hija. Fuimos al cuarto de Jasmín y ella dijo que no se iba a casar conmigo, que en cambio quería a Ali. Le di la triste noticia de que él se había largado, pero en eso aparece y le dijo a la princesa que lo quería ahogar. Entré en pánico y con el cetro hice que el sultán negara lo ocurrido, pero Ali agarró mi cetro y lo estrelló contra el piso. Había roto lo poco de magia que tenía, el sultán sale de su trance y se enoja de lo sucedido. Los 3 me acorralan y vi que algo brillaba en el sombrero de Ali, tenía la lámpara dentro de él.

Ahora todo tenía sentido. No era un príncipe que venía desde muy lejos sino era el pobre de Aladín. Decidí guardarme eso, ya que quizá más adelante me sería útil decir que Aladín estaba mintiendo. Logré escapar tirando una poción que era tan solo humo. Me escondí en un cuarto secreto del Palacio y le conté a Iago la verdad sobre Aladín. Ingeniamos un plan juntos, aprovecharíamos el momento en el que descuidara la lámpara para robársela.[pic 7]

Al día siguiente Iago y yo estábamos escondidos en el jardín y estábamos escuchando una conversación del genio y Aladín, más que una conversación era una pelea. Como estábamos muy lejos no escuchamos bien de que hablaron pero si escuchamos gritos. Cuando hubo un silencio Iago aprovecha para imitar la voz de Jasmín y le pide al príncipe que vaya con ella al jardín. Aladín va y fui corriendo para ir por la lámpara. Una vez que la obtuve me regresé al cuarto.

Momentos después escucho aclamaciones del pueblo, era la ceremonia para casarse. Froté la lámpara y mi primer deseo fue ser el sultán.

El cielo se tronó gris y la ropa del padre de Jasmín se desvaneció y mi atuendo cambió. De tener una larga vestimenta negra cambió a uno blanco. Aladín trató de revertir lo que estaba sucediendo pero cuando no encontró su lámpara, carcajee y le dije que ahora yo era el dueño del genio. El sultán me dio la orden de que volviera todo a la normalidad. Les dije que se arrodillara ante mí pero se negó, así que opté por pedir mi segundo deseo. Pedí ser el hechicero más poderoso de la tierra y de esa manera hacer que se arrodillaran todos. Mi cetro volvió y se arrodillaron gracias a mi magia. El tigre de Jasmín trató de atacarme por atrás pero lo convertí en un indefenso gatito. Ahora si decidí decir la verdad, le mostré a la princesa que Ali no era más que el pobre ladrón de Aladín. Lo metí dentro del palacio y cual pelotita de golf lo saqué volando fuera de Agrabah. Construí un nuevo y mejor palacio en donde tenía prisionero al sultán y a Jasmín. Iago se estaba vengando con el sultán y le estaba dando galletitas mientras que yo obligaba a la princesa a alimentarme. Jasmín era hermosa así que decidí ofrecerle que me acompañara siendo mi reina y ella agarró una copa con vino y me la tiró a la cara. Entonces se me ocurrió mi tercer y último deseo, hacer que la princesa se enamorara de mí. Desgraciadamente el genio me dijo que no podría hacer eso ya que según las reglas no puede interferir con el amor. Empecé a discutir con él y en eso Jasmín me habla como si se hubiera enamorado de mí. Me complació diciendo que era muy alto, moreno y guapo. [pic 8]

Escuché un sonido fuerte y en eso la princesa me voltea la cara para besarme. La princesa tenía puesta una tiara y gracias a ella logré ver que Aladín estaba detrás de mí. Era la tercera vez que volvía a molestarme pero juré que esa sería la última. Aladín corrió hacia mí para quitarme el cetro y Jasmín corrió hacia la lámpara. Forcejee el cetro y se lo quité a Aladín, lancé un hechizo lo más rápido que pude hacia Jasmín para impedir que tomara la lámpara y la metí dentro de un reloj de arena. Abu el chango de Aladín también quiso tomar la lámpara pero lo convertí en un mono de juguete inmóvil. Después de él fue la alfombra, así que la deshice con un hechizo. Agarré la lámpara, la victoria era mía. Aladín corrió para quitarme la lámpara pero lo encerré en un círculo de fuego. Me convertí en una serpiente y estaba dispuesto a comérmelo. Le atrape pero el empezó a decir que no era lo suficientemente poderoso, que el genio todavía me ganaba en poder. Como Jasmín había mentido y no se había enamorado de mí ese deseo no contó, y pedí ser el genio más poderoso de todo el universo. [pic 9]

Sentía todo el poder dentro de mí, el universo era mío, cuando de pronto aparecen cadenas en mis brazos. Podía ser el genio más poderos pero debía respetar las reglas, tenía que ser esclavo de una lámpara, por lo tanto mi poder estaba limitado a lo que un mortal pidiera como deseo. La lámpara me estaba absorbiendo pero antes de entra, agarré a Iago para que viniera conmigo. Escondieron mi lámpara en lo más profundo del desierto. Mis conclusiones fueron que Aladín y Jasmín se habían casado y que Aladín había liberado al genio. [pic 10]

Por mi parte quede en la oscuridad junto a mi loro, aunque no pasó mucho tiempo cuando me dejó. A pesar de mi actual miseria, debo de admitir que no me arrepiento de todo lo que hice. Lo único que buscaba era poder y dinero como cualquier persona de Agrabah, solo que yo si hice algo para lograrlo. Y no solo pensé en mí, también busqué el bienestar del pueblo, ya que no podía permitir que un pobre ladrón gobernara; necesitábamos a alguien capaz, pero quien sabe, puede que dentro de 100 años vuelva y ahora si obtenga lo que realmente me merezco, tomando que en cuenta que yo, Jafar, tengo ahora el poder de la inmortalidad. T e lo he advertido al principio, ahora Jafar ha sido liberado y esta deambulando por la tierra.