Programa de Educación de 30 a 50 años en el Municipio de Isidro Fabela

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Uno de los problemas que surge en esta época es que no sabían si enseñar en español o que cada etnia conservara su propia lengua es por eso que en esta época había muchos analfabetos.

Es en 1981, cuando Benito Juárez, como Presidente de la Suprema Corte de Justicia expidió un decreto sobre el arreglo de la Instrucción Pública con el cual se inicia la enseñanza laica en México.

Justo Sierra logró importantes avances, pero dada la magnitud delas carencias no fue posible el acceso a la educación de la gran mayoría de la población.

A comienzos del siglo XX, pese de los logros obtenidos en el desarrollo económico del país, el analfabetismo constituía un problema ampliamente reconocido, por lo que se intentó darle respuesta con la creación de las “escuelas rudimentarias”, en las que en dos años se podría aprender lo indispensable.

Sin embargo, el proceso de alfabetización no dio inicio sino hasta el gobierno de Álvaro Obregón, con la creación de la Secretaría de Educación Pública y la designación de José Vasconcelos como su primer secretario. En estas fechas se crearon también las escuelas rurales y las misiones culturales, cuyo objetivo era dar educación a una ampliamasa de trabajadores indígenas ycampesinos excluidos de los servicios educativos, pues estos se concentraban en las ciudades; se realizó una gran movilización social para llevar a cabo esta primera campañade alfabetización, y se imprimieron cartillas y todo tipo de publicaciones para hacer frente al analfabetismo funcional y difundir las nuevas ideas de nación y de pueblo que se quería promover.

Es en los años cuarenta cuando se forman las leyes referentes a la educación para combatir el analfabetismo y también se crea la Dirección General de Alfabetización.

En 1981 se crea el Instituto Nacional para la Educación de los Adultos (INEA), con el fin de hacerfrente al reto de dar educación amás de seis millones de adultos analfabetas, a quince millones de adultos que no habían concluido la primaria y otros siete millones que no terminaron la secundaria. Así, el principal objetivo del INEA ha sido, hasta ahora, el de promover y proporcionar servicios de alfabetización y de educación primaria y secundaria a la población mexicana mayor de15 años.

Según la educación de adultos mayores se inició en Europa, sin embargo Alexander Kapp afirma que tal educación se inicia en Estados Unidos de Norte América, aunque ambas propuestas llegan a la conclusión que es apenas a finales de los años cincuenta cuando se inician los esfuerzos de sistematización, articulación y difusión de teorías específicas acerca del aprendizaje del adulto mayor, así como de estrategias y métodos capaces de expresarse en términos de una didáctica para un aprendizaje más eficiente en el adulto mayor.

Alexander Kapp propone que a la educación de adultos mayores se le dé el nombre de “Andragogía” en 1833. El ve a la Andragogía como una disciplina definida, como ciencia y arte a la vez; una ciencia que trata los aspectos históricos, filosóficos y psicológicos y organizacionales de la educación de adultos; un arte ejercido en una práctica social que se evidencia gracias a todas las actividades educativas organizadas especialmente para el adulto, desde todos los componentes humanos, como un ente psicológico, biológico y social.

La educación del adulto mayor tiene sus antecedentes en la formación de adultos, a la que múltiples autores han intentado conceptualizar como una ciencia para ayudar a los adultos mayores a aprender, con una historia y desarrollo propio.

A nivel nacional, de acuerdo con los datos del Censo General de Población y Vivienda (INEGI) 2010, 6,256,809 personas de 15 años y más no sabían leer ni escribir, número que representa el 12.42% de ese grupo de edad . El 15.2% de las mujeres y el 9.8% de los hombres comprendidos en ese grupo son analfabetos.

Aunque son menos numerosas, las generaciones de mayor edad tienen más analfabetos que las generaciones menores. Mientras que sólo el 3.9% de los jóvenes de 15 a 19 años de edad es analfabeto, en el caso de las personas de 60 a 64 años la población analfabeta se eleva al 30.3%.

Esto muestra que las generaciones más jóvenes han tenido mayores oportunidades de alfabetización.

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De acuerdo con la Encuesta realizada en el Municipio de Isidro Fabela, el día 8 de Noviembre del 2014, de 100 personas encuestadas el 30% son analfabetas, de los cuales el 18% son mujeres y el 12% son hombres, la cifra arrojada a través de esta encuesta nos genera una situación realmente alarmante, ya que nos podemos percatar del enorme rezago educativo que se sigue presentando en pleno siglo XXI.

Retomando los datos que nos arroja el INEGI y las encuestas realizadas en el Municipio de Isidro Fabela llegamos a la conclusión que en México existen más mujeres analfabetas que hombres y que esto se debe a que en algunas comunidades o estados no es bien visto que las mujeres estén preparadas y sobresalgan ante la sociedad es por ello que no les permiten que ellas asistan a tener una educación.

Analizando la situación a partir de estas aportaciones cabe destacar que en la actualidad a pesar del avance social y crecimiento educativo que se presenta seguimos teniendo este tipo de situaciones a la vuelta de la esquina quizá no en la misma proporción como se venía generando anteriormente, sin embargo no debemos dar por hecho que este problema del machismo y falta de confiabilidad en la mujeres se ha erradicado en su totalidad ya que este mismo se sigue presentando, generando con este un tipo de discriminación que acarrea consigo un mayor índice de rezago educativo esencialmente presente en mujeres.

De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, el analfabeta es aquella persona incapacitada para leer y escribir una breve frase sobre su vida cotidiana al igual que el conocimiento Básico de cálculo; pero para muchos autores es considerada una persona analfabeta aquella que ha cursado la educación básica y aun así no sabe leer ni escribir, mucho menos razona lo que está leyendo y por lo tanto no puede dar una interpretación de lo leído.

Tomando en cuenta estos puntos de vista considero que ambos tienen razón, ya que al final si la persona que curso la educación básica no egreso con la capacidad para digerir, expresar o analizar algún tipo de información que se le presente en algún momento de su vida cotidiana sigue siendo un ser analfabeta, ya que al igual que la persona que no tuvo oportunidad