Una escuela para cada estudiante.

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A parte de que los alumnos puedan ser partícipes de las actividades en el aula nosotros como docentes también debemos de ser participen en la vida de nuestros alumnos para así poder crear un vínculo con ellos ya que los momentos informales también son importantes, como el escuchar sus anécdotas, aconsejarlos, jugar con ellos en las horas de recesos o tiempos libres y así ellos también pueden crear una confianza con el docente e interactuar significativamente.

También podemos organizar actividades extracurriculares que ofrecen muchas oportunidades para elevar la participación y el compromiso a nuevos conocimientos, tanto de profesores como de los estudiantes, ya que como docentes sabemos la importancia de buscar recursos e impulsar diversas oportunidades más allá de las clases y poder salir de lo cotidiano para que así el alumno quiera indagar en lo nuevo y mantener la curiosidad. La principal razón para prestar atención a estos acontecimientos y oportunidades especiales para los estudiantes, sea el reconocimiento de que tienen la capacidad mágica de asegurar vínculos de compromiso, interés y participación en la escuela y en su vida, fuera de los muros de ella.

Capítulo 5. Doce principios para ser un profesor excelente.

El tener una capacidad resolutiva es muy importante ya que uno como docente debe de actuar con decisión y firmeza ante los retos cotidianos a los que nos enfrentamos, tanto en los problemas que tienen los alumnos en casa, con los padres de familia, con los alumnos que no quieren trabajar o las distintas necesidades educativas especiales con los que se pueden encontrar en el aula y poder darle una posibilidad positiva. Igualmente hay que llegar a ser reflexivos sobre nuestro propio trabajo, saber en qué o cómo puede mejorar nuestra práctica educativa para seguir brindando una educación de calidad a cada uno de nuestros alumnos, nuestro instrumento que es el diario nos facilita esta reflexión ya que podemos registrar las reacciones de los alumnos en las distintas actividades y maneras de trabajar.

Como docentes no nos podemos limitar a ciertos aprendizajes, siempre hay que seguir avanzando y viendo más arriba por nuestros alumnos, y ofrecerles todo lo que podamos darles de conocimientos, práctica y teoría es para los docentes un reto hacer que los alumnos avancen hacia la excelencia. Hay que respetarlos para poder ser respetados, hay que saber comprender y aceptar a los estudiantes para acercarnos a ellos, y lograr en ellos avances y puedan llegar a ser personas competentes. Igualmente, como en el aula tenemos que ser flexibles tanto con nuestros alumnos como con los padres de familia, así como nos deben de apoyar también podemos apoyarlos brindándoles la información necesaria para que sus hijos puedan seguir desarrollando sus destrezas tanto en la escuela como en casa.

Debemos de saber crear un buen ambiente de aprendizaje y para esto hay que establecer rutinas dentro del aula como el compromiso con cada uno de los acuerdos en donde los alumnos deben de ser partícipes para que se respeten por ellos mismos, y pueda existir una buena organización dentro del aula. Los estudiantes tienen que entender las expectativas, acostumbrarse a la estructura y vivir la coherencia en sus clases. Tenemos que actuar con responsabilidades para que pueda ser una buena influencia a los alumnos y actúen de la misma manera y esto tendría como consecuencia el trabajo y el ambiente más agradable.

Siempre debemos de tener grandes expectativas y centrarnos en los pensamientos de nuestros alumnos por ejemplo cuando se ve el tema del día del trabajo, al organizar una actividad de teatro o un proyecto debemos de tomar en cuenta los sueños de nuestros alumnos y dejarlos que se desenvuelvan en el tipo de ambiente en el que ellos quieren desenvolverse en un futuro. Debemos de cultivar los sueños de los estudiantes y afrontar las necesidades de cada apersona sin perder de vista las necesidades de la clase.

Conclusión

Para concluir quisiera mencionar una experiencia propia con un entrenador enfatizando la parte de la lectura en donde nos menciona el cómo los maestros influyen en nuestra vida. Mi entrenador del equipo de animación siempre se molestaba mucho cuando yo mencionaba que yo no podía realizar uno de los ejercicios y él siempre me decía “Nunca digas no puedo” y nos decía que todos podemos llegar a ser tan capaces como los demás, pero todo está en que nosotros queramos intentarlo y llegar a lograrlo.

Estas experiencias me han ayudado mucho en nuevas etapas de mi vida, al tener miedo de tomar una decisión o de intentar algo nuevo y después pensar, no pasa nada en intentar. Debemos de ser conscientes que nosotros influenciamos a nuestros alumnos y depende de nosotros si va a ser de manera positiva o de manera negativa, debemos de creer capaces a todos y cada uno de nuestros alumnos sin importar la diversidad tal vez unos lo logren más rápido que otros, pero el camino y el trayecto del aprendizaje es lo más importante aún más que el logro, ya que ese lapso y esos intentos se convierten en experiencias para toda su etapa educativa.

Hay que guiar a todos los alumnos a que en su propio ritmo quieran seguir indagando y reconstruyendo sus conocimientos para que un día gracias a todos sus maestros pueda alcanzar sus metas y sueños.

Referencia bibliográfica

Beaudoin, N. (2013) Una escuela para cada estudiante. Narcea. Madrid, España.