Análisis de HYSTERIA

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Charlotte trata de convencer al señor de la despensa en que la espere un poco más pues se ha quedado sin dinero, además de prometer una fuerte cantidad de dinero por parte de su padre. Así pues aquel día se encuentra con el doctor Granville y su amigo, para ellos choca con su casi enemigo, tras marcharse Lord Edmund St. John-Smythe le halaga. Es ahí cuando ella va a pedir un préstamo a los señores Huddleston. Granville decide ir a encontrarse con Charlotte para buscar a Fannie por lo de su pierna al hogar de la caridad. Charlotte le ofrece un té, en un principio le admira la forma en que enseña modales y limpieza a los niños, así que mientras están bebiendo, discuten acerca de los derechos de la mujer, siendo el hombre quien se niega a aceptarlo, termina por marcharse.

El problema con Granville se agrava cuando la sesión con la señora Castellari no es un éxito por lo que ésta le acusa con Darlympe, así que es despedido, vuelve a casa de su mejor amigo. Donde mientras se queja de lo que pasa, comienza a jugar con el plumero eléctrico que inventó St. John, descubre que éste brinda un placer incomparable, es así como corre a decirle a su exjefe, argumentando que será capaz de todo con el aparato aquel. Vuelven a probarlo con la señora Castellari y se dan cuenta de que efectivamente funciona, aumenta incluso la sensaciones, dándole la posibilidad de volver a cantar tan hermoso como lo hacía antes de llegar a Inglaterra. Todo vuelve relativamente a la normalidad, se envían las invitaciones para festejar el compromiso de Emily y Mortimer. Una despampanante Charlotte entra al lugar, con un vestido negro sorprendiendo a Mortimer, charlan unos minutos haciendo ver que Mortimer empieza a entender, los tutores de éste último asisten a la fiesta, llegan a confundir a Charlotte con su futura esposo, ellos lo niegan para que después aparecen (tarde) el doctor Darlympe y Emily, la tutora de Granville no parece muy convencida. Desafortunadamente se llevan a Fannie por deber la renta del lugar, el policía llega a interrumpir la fiesta revelando que el papá de Charlotte mandó a cerrar el lugar, la mujer furiosa comienza a discutir a tratar de ir a ver a Fannie pero se lo impiden, así que ella le golpea. La transfieren a la cárcel, Granville es el único que puede dar el testimonio de que sufre histeria para dejarla fuera lo más pronto posible, eso, hace que el joven entre en un letargo que le deja bastante anonado, sin saber qué hacer o decir. Finalmente, ante el largo discurso de Charlotte todos aplauden y llega Granville para atestiguar con cosas positivas acerca de ésta, todos quedan asombrados porque su argumento es cierto, las mujeres estaban frustradas sexualmente hablando y los hombres no podía satisfacerlas tanto como lo hacían en su consultorio y el aparato creado por su mejor amigo, Charlotte no era histérica, ella sólo exigía sus derechos.

Al final, sólo le condenan a treinta días en la cárcel. El mejor amigo de Granville le entrega la parte que le toca de la venta del producto, Emily termina con el joven doctor. Así que cuando sale de la cárcel decide pedirle matrimonio además de regalarle dinero para engrandecer su hogar de caridad.