El bosque de Manos y Dientes Capítulos 1-3

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que quedarse hasta que regresara su hermano, quien posiblemente no podría escuchar la decisión de su madre. Antes de echarla al alambrado la llevan a prisión, si la envían de inmediato al alambrado no sería más que comida para los NoConsagrados, esperan a que se infecte por completo. Mary tiene la posibilidad de estar junto a ella, pero si se acerca demasiado tendrán que matarla. Cassandra se acerca a llevarle la cena y le pregunta a Mary si recuerda lo que su madre le decía sobre el mar, -nada más que agua- contestó Mary. –Simplemente no veo cómo alguna vez pudo haber existido es cantidad de agua en el mundo, Mary- le dice Cassandra a Mary. –No puedo imaginarme un ligar sin los NoConsagrados- una lagrima se acumula en la esquina de su ojo, la imagen de la madre de Mary partiendo es demasiado para ella. Cassandra se retira y Mary se siente obligada a quedarse después de lo que pasó en la mañana. La mamá de Mary comienza a gritar –el océano Mary!-, -no me olvide mi niña- le repite a Mary.

El guardián detrás de Mary grita, muere la madre, el guardián la lanza al otro lado del alambrado, está completamente en territorio de NoConsagrados, el silencio rodea todo, el guardián pone su mano sobre el hombre de Mary, como si intentara consolarla. Jed la llevó de vuelta a la catedral, en donde le cambiaron la ropa y la medio ahogaron en el pozo sagrado. Le dijeron que tenía prohibido acercarse al alambrado, Mary se molestó porque pensó que creían que era estúpida. Ella ya no existe. La llevaron a una habitación con paredes de piedra, desde donde podía ver el lugar donde retornó su madre. Preguntó porque no podía ir a casa, -es mejor que te quedes aquí- contestó la hermana más antigua. Preguntó por su hermano y no hubo respuesta, se cerró la puerta.

No pudo dormir es anoche, al día siguiente llega la hermana Tabitha, para hablar con ella y juzgar su estado mental, después llega comida y agua, ella ignora todo, y así fue el resto del día. Después de una semana llega Tabitha con una túnica negra y la deja libre, regresa a casa, ahora de su hermano quien la heredó, y no puede evitar tocas las paredes y recordar todo lo que vivió ahí. Justo antes de llegar, su hermano le abre la puerta, como si supiera que ella iría ese día. Le pregunta por qué la dejó ir, -fue su elección- respondió Mary, -estaba enferma, estaba loca- dijo Jed, -no podía matarla- contestó Mary. Jed le dice que tendrá que matarla ahora.

Jed estaba molesto con ella, no la quería en su casa, la empujo lejos de la entrada y ella le preguntaba por Beth, con la intención de estar cerca de él por más tiempo. Él contestó que perdió el bebé mientras cerraba la puerta. Mary quería llorar con él pero se dio cuenta que él ya tiene una familia con la cual llorar, era ya no era suficiente. Se da cuenta de lo sola que en verdad estaba. Ella sabía que sólo podía regresar a la catedral con las hermanas, pero no quería hacerlo, sin embargo no tenía más opciones, decidió caminar entre las parcelas, subió a una colina, el lugar más alto que conocía, desde ahí podía observar el infinito bosque, contemplaba que más allá de su aldea sólo conocía el bosque, y más allá del bosque no conocían nada. A un lado de la colina se encontraban dos caminos, uno hacia el lugar donde salía el sol y el otro hacia donde se ponía, no se sabía nada de ellos, no se recordaba nada, eran prohibidos por los guardianes y las