Obra: La escuela del mundo al revés

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y la conquista el racismo descalifica y margina. El sentimiento de superioridad de los blancos arrastró a muchos indios y negros a la comprobación experimental (y estúpida) de inferioridad, basándose en estudios del tamaño de sus cerebros y coeficientes intelectuales. Los colonizadores modificaron de una manera destructiva las culturas de muchos de estos indios, dándole significados negativos a sus rituales, palabras, etc. Los negros no podían entrar a las escuelas, incluso tenían establecimientos reservados para su raza. Siempre se ha visto la denominación negro como denigrante, negativo, insultante. Se considera a los indios y pobres un peso muerto para la economía de los países que en gran medida viven de sus trabajos. En la inquisición, se trataba el mismo conflicto pero se enfocaba a probar la inferioridad de las mujeres, haciéndolas menos, menos capaces, menos importantes, menos inteligentes. Era deshonroso para un hombre tener una hija, y el mundo era, y sigue siendo, peligroso para esa hija. La mujeres son utilizadas como objetos, mercancía. Como sucede con los negros, la mujer es inferior pero representa un peligro, por algo fueron las mujeres blancos en la cacería de brujas. Se les acusa de pecadoras, lujuriosas, todas con mala conducta, pero todo conlleva un castigo y este es impuesto por más ni menos que el hombre, este, sigue sintiéndose dueño de la mujer y de todo.

El crimen; organizado o desorganizado, carece de importancia es crimen al fin y al cabo, florece la delincuencia, los niños vagan por las calles, muchas personas temen salir de sus casas debido al pánico que se va generando y en otras se genera un valor inconmensurable y se forman grupos sociales que buscan proteger a la sociedad y no son precisamente militares, oficiales o policías, ya que gracias a estos, hay muchas personas inocentes, inculpadas de un crimen que no cometieron, llenando las cárceles. Y no importa cuánto capital se destine al tratamiento del crimen, cárceles son dinero, dinero es poder y eso es lo que el gobierno anhela.

La industrialización; en la cual las industrias más productivas y las que más ganancia tienen son las que más están acabando con nuestro planeta, y estas mismas industrias son las que han tomado a Latinoamérica como botadero de los venenos que ellas producen, contradictoriamente estas mismas empresas producen grandes cantidades de productos nocivos y maquinas, que son vendidos a precios exorbitantes a los países contaminados por ellos mismos, así la industrialización se ha convertido en una bomba de tiempo, no solo para Latinoamérica sino para el mundo.

Pero todo este tema de la protección del medio ambiente y la ecología se ha convertido en un millonario negocio para estas empresas, venden a otros lo que a ellos no les sirve y con ello financian “ayuda” al planeta.