Ser maestro es un trabajo que depende de las condiciones dentro de las que se desarrolla

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El maestro como sujeto: dentro del sistema educativo, el maestro enfrenta y maneja la complejidad de la situación de clase como trabajador, y a la vez como sujeto. Es percibir al maestro como sujeto es considerarlo como persona con razones, intereses y reflexiones propias, éste decide y actúa, dentro de las posibilidades de la situación específica en que se trabaja. La mirada dl maestro como sujeto nos distancia de la noción de su rol de docente que conforme a la actuación del maestro utiliza para responder a las exigencias de la situación de clase. Las actividades que llevan la intención de ense4ñar algo son sólo una parte de la práctica del maestro; el trabajo de organizar al grupo, transmitir el contenido escolar y de integrar las necesidades propias y el quehacer cotidiano, se debe comprender como un proceso único, complejo. Uno de los conceptos que ha permitido ampliar la visión de lo que se hace el maestro frente al grupo es de estrategia ( técnica o método) de enseñanza, que suponen que el maestro repite idénticos procedimientos, como si trabajara con algún material inerte y homogéneo, y no con un grupo de niños. La idea de estrategia remite a las exigencias reales y cambiantes de un grupo, que requieren seleccionar, usar y adaptar los recursos personales y profesionales de todo tipo para poder lograr resultados.

Las estrategias representan mediaciones entre presiones y restricciones institucionales y el quehacer diario en el aula. En este sentido las estrategias muestran ese margen de autonomía que el docente puede tener frente al control institucional, en unos casos tan amplio como para darle sentido alternativo a su práctica y en tan restringido como para permitir solamente el retraimiento individual.

Una segunda vía de acercamiento al maestro como sujeto se ha dado al tomar en cuenta el conocimiento específico que requiere su trabajo. Este hecho ha sido ocultado de varias formas, primero, por la creciente tendencia de encargar la elaboración de programas y materiales didácticos a equipos de especialistas alejados de la práctica misma, que toman poco en cuenta los que debe aplicar tal cual los procedimientos que otros han diseñado, lo cual reproduce la división estructural del trabajo intelectual y manual. El aspecto más evidente de este conocimiento tal vez sea el manejo tan amplio de contenidos académicos que se exige al maestro del nivel básico, especialmente en primaria. Además del manejo del contenido escolar, en otro nivel, el conocimiento que fundamenta y se integra de hecho al trabajo cotidiano.