Ventajas de la muerte

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Por lo general, un organismo muere después de reproducirse, pues en su interior deja de preocuparse por el progenitor y se enfoca en la gestación del hijo.

Se han formulado algunas hipótesis que son un poco válidas. Estás son:

Agotamiento de sustancia vital: esta hipótesis suponía la existencia de alguna sustancia que se iba diluyendo con el continuo multiplicarse de las células, jamás se encontró dicha sustancia pero se comprobó que si existe una hormona que mantiene joven al organismo

Uso y ruptura: atribuía el envejecimiento y la muerte al desgaste y acumulación de averías en arterias, intestinos, articulaciones, cerebro, piel, corazón.

Velocidad metabólica: el metabolismo es la suma de las reacciones químicas del organismo. Este lleva a pensar que no venimos al mundo a durar cierto tiempo, sino a cumplir cierto número de procesos, la duración de la vida de diversos animales es una función inversa de la velocidad de su metabolismo: cuanto más rápido viven, antes mueren.

Errores metabólicos: aquí podríamos traer a colación el hecho de que las fibras colágenas de los viejos muestran entrecruzamientos más frecuentes que las de los jóvenes, y son por lo tanto menos elásticas y más duras.

Radicales libres: las reacciones químicas del metabolismo consisten en un continuo ensamblar, romper y recombinar moléculas. Algunos fragmentos moleculares (radicales libres) son particularmente reactivos y, de no poderse combinar como deben, se pegan inespecíficamente por todos lados y perturban el metabolismo.

Acumulación de desechos: la autopsia de un anciano muestra arterias tapizadas de ateromas, órganos mutilados por fibras colágenas. Hay productos metabólicos que, en lugar de ser eliminados, se acumulan en los tejidos en proporción a la edad.

No siempre es muy confiable la manera en que falleció una persona, no se sabe si realmente lo que una declaración médica sea cien por ciento correcta, como nos lo dice el libro: si un anciano que murió, a pesar de ser cardiaco, no murió en realidad de una sobredosis de barbitúricos o de un íleo paralítico, o si un parapléjico falleció de neumonía o de intoxicación con monóxido de carbono, etc. Nos pone como otro ejemplo la invasión de napoleón a Rusia, realmente no todos sus soldados murieron a causa de una contingencia bélica, sino por otros factores, enfermedades como el tifus, el invierno durísimo que trajo consigo un frío terrible, y una fracción que en verdad murió en batalla, más sin embargo se cuentan como si hubiesen muerto en alguna lucha.

La salud y la medicina son sólo una parte del esfuerzo del humano por sobrevivir:

Esfuerzos mitológicos y ancestrales. Hubo momentos en los que se suponía que los jóvenes exhalaban al respirar un aire rejuvenecedor y había ancianos que trataban de inhalarlo

Esfuerzos con cierta base racional: En 1889 el famoso fisiólogo Charles Edouard Brown-Séquard, se inyectó extractos de testículos y se casó con una mujer joven, con el fin de poder obtener un poco de juventud comunicando formalmente sus experiencias.

La ciencia. La ciencia y los estudios abren la puerta para desarrollar avances tecnológicos, estos son una forma de buscar mayor facilidades para la realización de los trabajos que debe desempeñar un humano, esto trae consigo alimento, salud, seguridad y protección contra factores externos.

Todos en algún momento vamos a morir, es algo de lo que en algunas ocasiones pensamos, nos atraviesa por la mente, pero que en realidad nos causa pavor, miedo, inquietud de pensar que en el algún momento el tiempo se nos va a terminar, que puede pasar en el momento menos esperado, y que probablemente muchas actividades, deseos, metas, promesas no se podrán llevar a cabo, que talvez pronto perderemos a seres queridos.

Vivir implica reconocer que las cosas de la vida son transitorias, que no van a durar para siempre, que se tiene que asistir a la escuela y dejar el hogar, soportar que la madre atienda a un nuevo hermano, mudanzas, divorcios, abandono de la escuela por graduación, la pérdida de un ser querido… todo aquello repercute en nuestra forma de ser y nos ayuda a crecer y madurar y sobretodo comprender cada vez más un pedazo de lo que es la vida, aceptar que hay cosas que terminan.

El punto de una perdida no es estancarse y tirarse al vacío mental, y comenzar a despreciar lo demás que hay a nuestro alrededor, que hay que salir adelante y no darle importancia de más a una perdida. Como las células de las que hablamos al momento de que tienen la orden de suicidarse, "No te amargues por esta solitaria existencia in vitro, carente de sentido; no te suicides, continúa reproduciéndote." Es cierto que es doloroso y es difícil superarlo, pero es ahí donde se tiene que buscar lo que realmente importa y es tener siempre buenos recuerdos, y buscar la felicidad hasta lo que nos alcance el tiempo. Como el ejemplo que nos da el libro: una mujer que ha quedado viuda, y que solo alaba al marido fallecido, viviendo una vida de tristeza y soledad cuando a su alrededor hubo varios candidatos que pudieron volver a hacerla feliz. Hay que percibir una pérdida, y lo perdido darlo por perdido. Epicuro opinaba: "Cuando nosotros estamos, la muerte no está; y cuando la muerte está nosotros no estamos. Luego es irracional temerle a la muerte." No es bueno temerle a la muerte, pues es una propiedad de los seres vivos, algo irremediable, que hasta los mismo dioses mueren cuando nadie los alaba, y que se debe esperar con mucho ánimo, terminar lo que comenzamos para que no nos sorprenda, y sobre todo, tener en cuenta que por el bien de los demás, de la especie y de nuestra trascendencia es necesario morir, pues la muerte tiene sus ventajas.