TEMA- EL ARTE DE LA GUERRA APLICADA EN LA MERCADOTECNIA

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Después de esto es necesario conocerte a ti mismo y aplicar las mismas técnicas que con tu oponente para saber por donde podrían atacarte los demás y que tan vulnerable te pudiesen ver.

No todo es estrategias. También se necesita sabiduría y esta no se requiere si los problemas son solucionados antes de que aparezcan si no de la forma en la que se resolvieron y la inteligencia que se presentó para saber que decisión fue buena tomar.

Cuando las cosas se hacen bien aún puedes prevalecer por sobre los corruptos, todo esto se logra cuando el ejército; en este caso miembros de la empresa, están bien disciplinados y siguen las ordenes de un líder y no solo eso. El líder también con un papel muy relevante debe saber manejar a su personal como si fueran pocos y no descuidar ningún sector o grupo, ya que para tener un mayor control lo más recomendable es agruparlos. No es lo mismo atacar a alguien con solo pocas fuerzas y arruinar todos los planes; A tener todo tu equipo de trabajo contigo y que cada quien se encargue de desmantelar una estratégica como estudiar su segmentación de mercado, sus costos, sus plazas, su publicidad y estudios de mercado.

Para esto, el arte de la guerra habla sobre dos tipos de ataques de batalla: el extraordinario por sorpresa y el directo ordinario, de los cuales se deriva el ortodoxo y el heterodoxo. La fuerza directa es lenta y poco a poco a comparación de la precisión que actúa con velocidad y agilidad. Lo mismo con la manera en que un producto se posiciona en un buen lugar, detrás de su éxito se encuentra la rapidez con la que lo hicieron, la precisión de haber derrotado a los demás contrincantes y la fuerza con la que sus acciones causaron su victoria.

Hay que saber cómo es tu ejército y para ello se requiere escoger a los mejores candidatos que hagan más fácil el alcanzar objetivos y ayudarlos a desarrollarse para que sean interprendedores y aporten buenas cosas para hacer a la empresa líder en el mercado y mantenerse en ese puesto aportando cada vez cosas nuevas para que con el tiempo sea más difícil para los demás derrotarla.

A todo esto se le suma el hacer que la competencia venga a ti y no tú a ellos. Para que gasten sus opciones y la empresa solo responda a los ataques de la mercadotecnia sin mostrar todas las cartas sobre la mesa. Muchos mercadólogos prefieren lanzar estrategias para ganar o no acercarse para no sufrir daños sin embargo la manera correcta de hacerlo es cuando las personas están en un buen momento para poder enfrentar a los demás con más fuerza y cuidar puntos que aunque no están siendo atacados necesitan vigilancia para mantener una defensa infaliblemente segura eso podría ejemplificarse a que aunque la competencia no esté tan reñida en cuanto a un producto no debes de bajar la calidad y confiar en que las personas lo seguirán escogiendo por encima de los demás.

Por consiguiente cuando llegan los adversarios a atacarte y tú no respondes igual se van a confundir y se llenaran de incertidumbre. En mercadotecnia hay que engañar a los demás para que no sepan lo que sacaras público y no puedan contratacarte en ese momento. Que cuando vean lo que haces les parezca algo extraordinario y tú como mercadólogo lo veas ordinario ya que al hacer las cosas bien cada día querrás hacerlo mejor y los resultados cada vez serán más favorables.

En cuanto a lo que sería la plaza, el libro habla sobre conocer el lugar de la batalla y si se carece de este conocimiento lo más probable es perder ya que no podrás defenderte de ningún lado. Hay que conocerla a fondo ya que no podrás sacar las desventajas del lugar y por lo tanto no podrás hacer estrategias que vayan acorde con el sitio aunque sea un lugar pequeño. Un buen ejemplo sería cuando debes poner una tienda de acuerdo a la sociedad que vive ahí o que pasa cerca de ese punto. Tomar en cuenta su nivel socioeconómico y sus necesidades para que las ventas sean mayores y no quede como un punto de venta ignorado.

A todo esto el genio es indispensable porque significa la capacidad de obtener la victoria cambiando y adaptándose según el enemigo y cuando un producto de la competencia tiene un mejor costo-beneficio debemos ir cambiando las estrategias de forma rápida y efectiva sin dejar a un lado lo que está en tendencia y la gente está prefiriendo.

No importa si sigues al pie de la letra cada consejo que aprendes al terminar de leer el libro ya que si no tienes pasión por lo que haces, no darás tu máximo esfuerzo y las personas que trabajan contigo también se verán afectadas al no tener un buen líder que este enfocado completamente a la victoria y a que el producto por el que todos están trabajando llegue a la cima y no solo porque sí. Si no porque detrás de todo eso existió unión entre los que trabajaron para sacar buenas estrategias, en hacerle un buen comercial y que la gente supiera los beneficios del producto, de los que se encargaron de buscar una buena plaza que se complementara con el producto, y de los que observaron las necesidades de la gente y crearon una manera de satisfacer sus pedidos.

CONCLUSIÓN

Cada capítulo del arte de la guerra es una enseñanza de como manejar una empresa y saber vender emociones para que los clientes se enamoren de tu producto y no de otro que le de los mismos beneficios. Enseña a envolver a los clientes de tal forma que sean fieles a tu producto pero que tú también les brindes servicios o productos de calidad y con un precio no tan elevado que lo quieran y puedan comprar, ni tan bajo que lo asocien con algo que no sirve y al mismo tiempo tener utilidades de lo que estas vendiendo.

El libro da muchas enseñanzas de cosas que probablemente damos por entendido pero que realmente no analizamos bien y nos puede servir en el ámbito laboral como lo son los negocios o en la vida personal en cuestión de que el simple hecho de conocer tus fortalezas, oportunidades, debilidades y amenazas te ayudan a encontrar una solución a los problemas.