ESTÉTICA DE LA FORTALEZA
Enviado por Jillian • 3 de Enero de 2019 • 3.481 Palabras (14 Páginas) • 334 Visitas
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Laboriosidad: Muy aplicado al trabajo /Trabajoso, penoso.
Castidad: Que se abstiene de todo goce sexual, o se atiene alo que se considera como lícito./Que no posee en sí sensualidad.
Piedad: Benigno, blando, misericordioso, que se inclina a la piedad y conmiseración. /Dicho de una cosa: Que mueve a compasión o se origina de ella.
Justicia: Que obra según justicia y razón. /
Arreglado a justicia y razón. / Que vive según la ley de Dios. / Exacto, que no tiene en número, peso o medida ni más ni menos que lo que debe tener).
“Cuando tienes una virtud, una virtud real, plena (¡entonces eres tú su víctima!) ¡Pero si justamente por eso el vecino elogia tu virtud! Se llega a elogiar al hombre laborioso aun cuando con esta laboriosidad se perjudique la capacidad visual de sus ojos o la originalidad y frecura de su espíritu; se honra y se compadece al joven que “ha trabajado hasta la extenuación”, ya que se juzga que: “¡para el conjunto total de la sociedad, la pérdida del mejor indivduo no es más que un pequeño sacrificio! ¡Malo que se necesite una víctima! ¡Pero mucho peor, en efecto, si el individuo pensara de otra manera y considerara más importante su conservación y desarrollo que su trabajo al servicio de la sociedad!”” Nietzsche, Ciencia jovial. Pág. 601.
Se considera a la persona meramente un instrumento: “Entregado a ella [sociedad] y desconsiderado para consigo mismo, -lo que se llama a un “buen hombre”” Nietzsche, Ciencia jovial. Pág. 602.
“Lo que propiamente se elogia, pues, en el virtuoso, -cuando se lo elogia- es, de entrada, su carácter instrumental. [La sociedad no permite “la imposición de límites” personales]. La irracionalidad en la virtud, en razón de la cual el ser individual se deja transformar en una mera función de la totalidad. El elogio del virtuoso no es sino el elogio de lo que perjudica a lo privado –el elogio de impulsos que privan al hombre de su más noble egoísmo y de la fuerza para la más suprema autonomía” Nietzsche, Ciencia jovial. Pág. 602.
“El trabajo ciego y desenfrenado, es típica virtud instrumental, se presenta como el mejor camino hacia la riqueza y el honor y como el fármaco más sano contra el aburrimiento y las pasiones: pero no se habla del peligro, de la gran peligrosidad” Nietzsche, Ciencia jovial. Pág. 603.
“Así es como siempre procede la educación: busca fijar en el individuo una manera de pensar y de actuar mediante una serie de estímulos y ventajas, que, cuando llegan a ser hábito, instinto y pasión, dominan sobre y en él en contra de su último provecho, aunque “a favor del bien general”” Nietzsche, Ciencia jovial. Pág. 603.
“Ese ciego y desenfrenado trabajo efectivamente produce riquezas y honor, pero a la vez priva a los órganos de la sutileza con la cual pudiera darse goce de la riqueza y de los honores; así como veo en qué medida ese medio fundamental contra el aburrimiento y las pasiones, embota también los sentidos e impide al espíritu recibir nuevos estímulos. (La más trabajadora de todas las época –nuestra época- no sabe qué hacer con su excesivo trabajo y su dinero más que ganar dinero y trabajar más: ¡pero si se necesita más genio para gastar que para ganar! ¡No importa!, ¡tendremos nuestros descendientes!)” Nietzsche, Ciencia jovial. Pág. 603. (Explicación: En esta reflexión de Nietzsche se comprende una decidida rivalidad entre utilidad pública y desventaja privada. De este modo, la sutileza brinda la conciencia de que el dinero en sí mismo no hace algunas cosas, como saciar el hambre, abrazar y expresarle cariño a quien lo posee. Así, la sutileza hace superar el ciego y desenfrenado gasto de fuerzas en virtud de obtener dinero, y, por ende, siente elevación, fomento y ampliación de su poder para entregarse a cada una de sus tareas sin abusar de sí mismo. Es más, tiene tanta claridad en tanto la torpeza de este abuso, que repudia la disminución de su fuerza a causa de exceso sin sentido de su entrega, pues sabe, como lo expresa el autor, que se necesita más genio para gastar sus riquezas que para ganarlas).
“Si el “prójimo” alaba el desinterés, es porque él obtiene un provecho a través suyo. Si el mismo prójimo pensara realmente de un modo “desinteresado”, tendría que repudiar esa disminución de fuerza, ese daño a su favor, trabajaría en contra de la raíz de tal inclinación, pero sobre todo, ¡manifestaría especialmente su desinterés no denominando buena a esa inclinación!” Nietzsche, Ciencia jovial. Pág. 603.
“Los motivos de esta moral se oponen a su principio. Lo que esta moral quiere demostrar queda refutado por su propio criterio de lo moral. Para no ir en contra de su propia moral, el aserto “debes renunciar a ti mismo y sacrificarte. […] !Se predica a la vez un “té debes” y un “tú no debes!”” Nietzsche, Ciencia jovial. Págs. 603, 604.
“Y es que los críticos no ven este desprendimiento porque ellos mismos no están desprendidos” Chesterton, El hombre eterno. Pág. 1453. (Explicación: Las críticas que provienen de los no-sutiles, esto es, quienes no comprenden nuestros tres lados que nos configuran forzosamente como un triángulo, no tienen fundamento ni sentido, pues ellos están juzgando nuestra figura desde su propia percepción, la cual solamente es capaz de ver cuadrados a pesar de que en frente tenga triángulos. En este sentido la sutileza se relaciona con la capacidad de la ligereza).
“Cosas demasiado grandes para ser vistas y demasiado simples para ser comprendidas” Chesterton, El hombre eterno. Pág. 1473. (Explicación: Los hombres sin sutileza ven a lo grande muy pequeño, y por ello, aunque lo que tienen ante sus ojos es una grandeza repleta de simplicidad y no de presunción, es decir que puede ser vista por cualesquiera personas, ellos no la pueden reconocer ya que no son aptos para ver la grandeza de nadie debido a que no han sido lo suficientemente sutiles para ser ellos mismos grandes alguna vez).
“La expresión “tiempos prehistóricos no designa necesariamente tiempos bárbaros e incultos, sino tiempos, sencillamente, que no han escrito nada que nosotros podamos descifrar. […] Cosas demasiado grandes para ser vistas y demasiado simples para ser comprendidas” Chesterton, El hombre eterno. Pág. 1482. (Explicación: La falta de sutileza lleva al hombre a que sus deseos se propasen).
““El hombre no es nada; solo su obra es lo que vale” […] Expresó la siniestra divisa del régimen servil” Chesterton, El hombre
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