El concepto de apeirón en Anaximandro: una estética del origen

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Si bien el apeirón no puede definirse se dan una serie de características que lo hace ser indeterminado e indefinido, o bien, se define como lo que no es, pero como origen de todo lo que es. El autor plantea que dado a lingüística podemos nombrar y dar forma a las cosas por lo que sabemos que son, de manera que se busca dar forma en el lenguaje a aquello que es in-forme. Además el apeirón aporta e impone la necesidad, de manera que las cosas ocurren debido a que existe una necesidad, y perecen por la misma necesidad con el fin de diferenciarse de lo indefinido e infinito, ya que lo que es consecuencia del apeirón está atado a tener un inicio y un fin, contrario al apeirón. Aunado a esto se explica el concepto de orden/cosmos como algo geométrico, ordenado y subyacente a todo lo que hay. Dicho orden, infinito es representado simbólica y geométricamente por un círculo perfecto, donde el centro equivale lo mismo en relación con sus extremos.

Para ilustrar el principio de lo existente el autor cita a Anaximandro cuando explica que “el principio material de las cosas existentes era la naturaleza del apeirón, la cual es eterna, no envejece y rodea todos los mundos”, de manera que el apeirón por ser arché y principio es al mismo tiempo causa, abarcando y gobernando todo, explicando lo particular pero sin ser particular, dando el ser a todas las cosas existentes, ya que todo nace en el apeirón y en él perece.

*Infinito: No tiene principio, y por ende tampoco un final, además es un ser divino en relación con su importancia ya que todo lo que deviene del apeirón vuelve a este mismo. Por este mismo motivo es también inmortal, puesto que como explicamos no perece y al mismo tiempo es indestructible. Además posee una infinitud no sólo temporal, sino también espacial, puesto que todo lo abarca.

*In-forme/ indefinido: No es un ser o una sustancia material, sino más bien un principio conceptual, genético y como lo define el autor autopoiético, en sentido de que es capaz de reproducirse y mantenerse por sí mismo. De manera que el apeirón “es la condición de posibilidad de todo ente, sin ser él mismo un ente”. No tiene forma alguna, ya que es meramente un principio explicativo, resultado de la racionalización, siendo una explicación estrictamente racional, en este sentido se convierte en una estética del orígen.

Estética del origen

El autor propone[b] el apeirón en Anaximandro como una estética del origen en sentido que la esencia de la percepción racional genera la necesidad de plantear por medio del sentido de la experiencia una terminología para explicar el arché.

Bibliografía

Puig-Peñalosa, X. (2009). El concepto de ápeiron en Anaximandro: una estética del origen.Universidad del País Vasco.