Estructura ensayística: El proceso de subjetivación
Enviado por Sandra75 • 4 de Diciembre de 2017 • 2.114 Palabras (9 Páginas) • 438 Visitas
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y la que rige los medios de información y producción.
Las masas tienen miedo a pensar por sí mismos, es más fácil dejarse guiar por los tópicos que demanda la sociedad en general, es más sencillo culpar a los otros por los problemas sociales que repercuten en los individuos, es más factible conformarse con lo que nos dan los mercados y llevar una vida sumisa y obsoleta, en la que unos cuantos deciden el futuro de la mayoría. Porque luchar contra la convencionalidad, pensar y actuar con libertad, observar, analizar, reflexionar y comprender la realidad implica procesos mentales complejos, que no cualquier sujeto está dispuesto a ejercer.
“[…el despliegue, de devenires animales, de devenires vegetales, cósmicos, pero también devenires maquínicos, correlativos de la aceleración de las revoluciones tecnológicas e informáticas (así es como vemos desarrollarse ante nuestros ojos la expansión prodigiosa de una subjetividad asistida”.
Por ello, como medio para despertar el razonamiento lógico de las personas se propone la reinvención individual, por medio del proceso de subjetivación, el cual tiene como propósito formarse como individuo, dando forma y sentido a las estructuras mentales, haciendo uso del análisis, reflexión y comprensión de los estímulos sociales y naturales que impactan su cotidianidad, para que de esta forma seamos capaces de discriminar las acciones sociales que se desarrollan cotidianamente, formando un criterio sobre las consecuencias que se desencadenan de estas prácticas, y proponiendo alternativas de cambio ante los conflictos que hay entre individuo, sociedad y naturaleza, aumentando la reciprocidad con el medio ambiente y el bienestar personal, al ejercer una forma de vida libre, encaminada a satisfacer las necesidades colectivas y no solo las personales.
Teniendo en cuenta que el proceso de subjetivación es de suma importancia para la reinvención del hombre, y una alternativa muy interesante para mejorar la relación entre los individuos y el medio ambiente. Debemos tomar en cuenta que este proceso se ve entorpecido y atrasado por los grupos de poder que controlan al mundo principalmente, ya que de fomentarse y ejercerse algunos pocos perderían mucho, mientras que la mayoría se beneficiaría, por eso:
“[…una argumentación todavía es difícil de aceptar; sobre todo en contextos en los que continua reinando una sospecha, es decir, un rechazo de principio, respecto a cualquier referencia específica a la subjetividad. Ya sea en nombre de la primacia de las estructuras o de los sistemas”.
Es por ello, que estos procesos mentales que son capaces de hacer pensar a los individuos se ven reducidos y ocultados comúnmente por la convencionalidad, ya que la subjetividad no es propiciada por el medio, solo se entorpece, y en gran medida los que tratan de llevar a cabo este proceso se ven irrumpidos por los estímulos predominantes a los que están expuestos, los cuales impiden su buen desarrollo, ya que lo relacionan con conocimientos, métodos y teorías convencionalistas que han formado parte de su cotidianidad durante toda su vida, además de vincularlo con postulados expuestos por los medios de información.
[… la subjetividad no tiene buena prensa, y los que se interesan por ella, en la práctica o en la teoría, en general solo la abordan con pinzas, con infinitas precauciones, cuidando mucho de no alejarla nunca demasiado de paradigmas pseudocientíficos, tomados, preferentemente, de las ciencias duras: la termodinámica, la topología, la teoría de la información, la teoría de los sistemas, la lingüística, etc.”.
Así, podemos estipular que por muchos percances a los que estemos sometidos comúnmente, que el proceso de subjetivación debe ser constante, porque es necesario reinventarse continuamente, con la intención de buscar fines comunes, humanitarios y una buena relación entre las tres esferas de Guattari (individual, social y ambiental). Esto primordialmente por los cambios sociales en los que nos vemos inmersos, debido a que la subjetivación no es algo que se pueda ejercer una vez y ya, sino que requiere de un proceso continuo.
“De la misma manera, cada institución de tratamiento, de asistencia, de educación, cada cura individual deberá tener como preocupación permanente hacer evolucionar tanto su práctica como sus andamiajes teóricos”.
Por otra parte, para ejercer un proceso de subjetivación adecuado, podemos recurrir al pensamiento abstracto, ya que este nos permite ir más allá de lo general, por medio de procesos de discriminación, que permiten discernir, planear, asumir, pensar y actuar simbólicamente de acuerdo a algo; cambiando a voluntad, de una situación a otra, descomponiendo un todo en partes, para analizar desde diversos aspectos una realidad. Ya que el proceso de subjetivación está totalmente relacionado con el pensamiento abstracto, por coincidir en el análisis, reflexión y comprensión de las cosas, teniendo como fin la reinvención de estructuras mentales.
“[…La proliferación conceptual corresponde a una atención más sostenida sobre las propiedades de lo real, aun interés más despierto a las distinciones que se pueden hacer. Este gusto por el conocimiento objetivo constituye uno de los aspectos más olvidados del pensamiento”.
Entonces, se manifiesta que el pensamiento abstracto puede reorientar las prácticas sociales de mejor manera, si lleva acabo de buena manera, relacionándolo con la subjetivación, porque ejercer un pensamiento abstracto nos permitirá desmenuzar las circunstancias reales a las que nos enfrentemos, con la intención de visualizarlas desde todos los puntos posibles y de esa manera poder discriminar las diversas circunstancias y escenarios posibles, para elegir la mejor opción, la cual repercuta de manera más favorable ante la sociedad y ante el medio natural.
Así, se puede concluir que el proceso de subjetivación a través del pensamiento abstracto se puede emplear como medida de solución ante el deterioro ambiental propiciado por el consumismo, con la finalidad de ejercer prácticas sustentables y propiciar una relación más amena entre los individuos, la sociedad y el medio natural, ya que este tipo de procesos mentales pueden ayudar en gran medida a reflexionar sobre las acciones y hábitos cotidianos que provocan conflictos sociales que recaen en el deterioro del medio ambiente, y de esta manera aceptar la realidad en la que estamos inmersos, dándonos cuenta de las nulas actividades sociales que llevamos a cabo día con día.
Para en base a ello, proponer alternativas que propicien prácticas sustentables, las cuales tengan como objetivo el beneficio de la mayoría y la reciprocidad con la naturaleza. Para poder emplear soluciones
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