Amistad en Crisis: Nunca se sabe lo que se tiene hasta que se pierde.

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basándose en objetos materiales, en cambio la amistad perfecta es de carácter inmaterial, va más allá de las propias personas involucrando sentimientos, alma y mente. El hombre siendo el ser social que es necesita de los amigos y amistades en su vida, y estos necesitan de él, por tanto se dice que el hombre puede vivir efectivamente sin diamantes pero ¿Puede vivir sin amistad? No es menor poder estar en presencia de una y efectivamente se debe dar gracias y cuidar cada momento de ella.

A lo largo de la historia se pueden encontrar importantes amistades representadas en los grandes Clásicos, como Aquiles y Patroclo, en los cantos homéricos, u Octavio con Marco Antonio, grandes amigos finalmente separados por la ambición. Todas historias que, a pesar de sus desenlaces, nos reafirman el gran vínculo que se puede llegar a formar entre 2 personas, quienes matarían uno por el otro. Como dice Horacio, antiguo poeta romano, ‘’Mi amigo es la mitad de mi alma, porque yo sentí también que su alma y la mía no eran más que una en dos cuerpos’’, frase que demuestra que amigos de esta clase son mucho más que amistades, y llegan a formar parte de la otra persona. Complementando con un dicho muy conocido ‘’los amigos son la familia que uno escoge’’. Todo esto, otra clara razón para no bajar la cabeza si una amistad está pasando por un periodo de distanciamiento, la única comparación posible siendo: ¿Le daríamos la espalda a un familiar bajo alguna circunstancia? O más aún, y siguiendo la sabiduría de Horacio ¿Nos abandonaríamos a nosotros mismos? Una relación de cercanía de esta índole sencillamente no se abandona, después de años de aventuras, de historias, de altibajos y de hermandad, habría que tener el pecho muy frio para querer despedirse sin presentar una ardua batalla previa. Y se debe siempre tener en cuenta, que tan estrecha relación implica un alto nivel de compromiso, si uno sufre el otro también y las peleas o palabras que se digan duelen el triple, pero así como todo lo malo está amplificado, lo mismo ocurre con las cosas buenas, y al final del día, a pesar de todo lo que se puedan llegar a decir o lo que puede llegar a ocurrir, nunca se le dará la espalda a la familia, sea ésta de sangre o los amigos que se eligen al pasar los años.

¿Tanta cercanía puede provocar daños? Una relación de carácter tan inmanente, a pesar de todo lo positivo que entrega, puede actuar como un arma de doble filo, por eso es que involucra tanta confianza. Se le confía y se le da acceso al amigo a que descubra todo de la otra persona, se permite tal acceso al saber que ese amigo lo usará de buena manera y porque generará un acercamiento entre ambos, pero la verdad es que esto mismo, de permitir que se conozca hasta lo más profundo del alma, puede usarse para provocar tanto bien como mal. En el caso de una pelea o un distanciamiento una de las partes puede terminar muy afectada, alguno puede cometer un error que en el momento el otro tacha de ‘’imperdonable’’, al ocurrir esto, en el caso de una amistad tan cercana, se tiene acceso a todo y en el calor del momento se pueden llegar a decir cosas que, sin exagerar, podrían culminar en que no se vuelvan a dirigir la palabra, como sostiene Rhode (2004) ‘’Mientras más cercano es un amigo, más lo conocemos y sabemos lo mucho que lo podemos lastimar con nuestras palabras, acciones o revelaciones’’ (p. 122), es decir, quien tenga por objetivo hacer daño lo hará y una amistad que tanto trabajo tomó construir se verá desvanecida en un par de minutos ¿Se debe seguir luchando por un amigo que tomó lo más profundo del otro y lo usó para hacerle daño? Cabe recordar que es propio de la humanidad cometer errores y que ningún ser humano, por virtuoso que sea, es perfecto, por ende, si se trata de una amistad que estando en su máximo esplendor brindo tanta alegría lo mínimo que se puede hacer, luego de un momento así, es recurrir a la empatía, comprender que en el calor del momento se dijeron cosas sin previa meditación, que ambos sienten, y poder superarlas en conjunto. Si bien las palabras tienen un poder muy grande cuando se trata de hacer daño, perder a un ser tan querido por una pelea definitivamente duele mucho más.

No es fácil mantener la ‘’llama viva’’ en cada momento, pero sí se puede asegurar que cuando lo está, queda más que pagado todo el esfuerzo previo, ya que el amigo incondicional es invaluable.

Concluyendo, no cabe ninguna duda de que, a pesar de la adversidad, no hay nada que valga más la pena, que luchar por las amistades verdaderas, las llamadas: amistades perfectas. La rareza con la que se presentan sumado a la gran implicancia emocional que poseen y la estrecha relación que se crea entre estas dos personas, valen todo el esfuerzo detrás, y nunca será aceptable permitir que un tipo de relación, con tanta historia y buenos momentos, desaparezca como si nada.

Lista de Referencias

Adam Smith (1794) investigación de la naturaleza y causas de la riqueza de las naciones. Valladolid: Oficina de Viuda e Hijos de Santander

Naomi Rhode. (2004) El valor de la amistad. México D.F: Selector

José Ramón Ayllón. (2000) La buena vida: una propuesta ética. Madrid: Martínez Roca

José Ramón Ayllón. (2015) Tres consejeros: Aristóteles, Confucio y Chesterton. Madrid: Palabra

Marco Tulio Cicerón. (2002) La Amistad. Arpino: Celesa

Ignacio Valente. (30/11/2012) Las penas del logos: la pasión del lenguaje [extracto de El Mercurio] recuperado de http://www.mer.cl/Pages/NewsDetail.aspx?dt=2012-10-28&PaginaId=17&BodyId=6