Countdown: Our Last Best Hope

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El crecimiento poblacional puede ser controlado, en la actualidad existen países donde es una ley el que solo se pueda concebir un hijo por cada familia. Aunque esta ley no es muy popular ante el ser humano, hay países como China, donde tienen que tomar acción en cuanto al crecimiento poblacional ya que este es uno de los países más poblados del Planeta. Entre los países más poblados del mundo en la actualidad se encuentran: China, India, Estados Unidos, Indonesia, Brasil, Pakistan, Nigeria, Blanglades, Rusia y Japón. La educación y condiciones socio-económicas de cada país tienen un efecto en los niveles poblacionales de cada país. Los países más pobres o en las peores condiciones siempre tienen un aumento poblacional exponencial, esto debido a que no se educa al ciudadano sobre las consecuencias o sobre métodos anticonceptivos que podrían estabilizar el crecimiento. Una de las comunidades mencionadas en el libro decidió crear un programa con el fin de preservar medioambientales en su caso el medio ambiente acuático de las Filipinas que se veía afectado con el aumento de la comunidad ya que mientras más persona mayor el consumo de la vida marina en este país. Estos fueron por diferentes zonas educando a la comunidad sobre los efectos, daños y futuras consecuencias del aumento poblacional. Este programa conocido como IPOPCORM, visita provincias pobres educando a los cuidadanos e instruyéndoles sobre la planificación familiar y formas anticonceptivas. No solo instruyen a la comunidad sobre el problema del aumento poblacional si no que cada pueblo posee individuos que se encargan de proteger y velar por la seguridad de la reserva marina para que esta se pueda reestablecer. Se me hace muy interesante y genuino como personas de países o islas tan pequeñas, que no todo el mundo conoce, toman acción sobre temas ecológicos que nos afectan a todos. Mientras que potencias mundiales de mayor tamaño no lo hacen y solo empeoran la situación del planeta.

Alan Weisman no sugiere que dejemos de reproducirnos por completo, pero si que tengamos al menos un solo descendiente por familia, ya que esto reduciría exponencialmente el tamaño de la población. “Liberando un gran espacio y dándole acceso a otras especies de cuya especie dependen el funcionamiento del ecosistema, incluido nuestros lugares en él.”. Según dice Weisman, el ser humano se encuentra tan adelantado tecnológicamente que ha duplicado la esperanza de vida del ser humano. Si esto no hubiese ocurrido la naturaleza hubiese seguido su curso habitual, devastando poblaciones para llegar a un balance y que todos se beneficien. Si no se pueden controlar las tasas de mortalidad, la población se tendría que reducir llevando las tasas de natalidad a un control disminuyéndolas. Debemos educarnos y observar lo que las decisiones le ocasionan al Planeta y tomar decisiones que preserven su futuro y el nuestro. El planeta Tierra no puede sostener los niveles poblacionales actuales.