LA GRAN IMPORTANCIA DE LA INVESTIGACIÓN EDUCATIVA

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Ejecución de la acción para comprobar la hipótesis, una vez que se detectó la problemática, y que se tiene la hipótesis, se puede dar paso a la implementación de la actividad que se va a cambiar, todo se deberá planear de un modo singular no hay fórmulas, especificas por lo que el docente puede implementar la investigación- acción misma que se vincula con la investigación educativa.

Evaluación de los efectos de la acción, después de poner en práctica lo que se planeó, (inicio, desarrollo y cierre) se calificara con base en algún instrumento de evaluación la actividad, esto con la finalidad de saber si lo que se implementó, cubrió la problemática que se planteó y si esta fue exitosa, de no serlo, se debe de tomar en cuenta la filosofía china: donde los mexicanos ven un problema en China lo toman como una oportunidad, y eso es siempre la intención del docente comprometido ver en una falla de los alumnos o de él mismo una oportunidad de mejora. Se tiene que evaluar por que se le da un seguimiento, y también si el alumno ve que puede mejorar se va a sentir motivado, ¿cuántos de los alumnos en la escuela no cuentan con el apoyo fuera de esta para que sus dudas sean despejadas? Y eso se debe en gran parte a que la gran parte de los padres de familia de los alumnos sus padres tienen trabajos con jornadas extenuantes lo cual implica que no tienen tiempo para estar al pendiente de las tareas escolares de sus hijos, o al menos no con el rigor que se necesita.

Por lo cual el docente, se convierte en la persona que puede motivar al educando.

Replanteamiento de la investigación acción, este es el paso en cual se puede realizar una retroalimentación de las actividades previas, los alumnos pueden dar sus puntos de vista y de igual manera pueden evaluar si las actividades que se implementaron les fueron de utilidad, el docente deberá realizar los ajustes correspondientes, para continuar mejorando la calidad de la educación dentro de su espacio áulico.

“Lewin (1946) definió a la investigación-acción como “una forma de cuestionamiento autoreflexivo, llevada a cabo por los propios participantes en determinadas ocasiones con la finalidad de mejorar la racionalidad y la justicia de situaciones, de la propia práctica social educativa, con el objetivo también de mejorar el conocimiento de dicha práctica y sobre las situaciones en las que la acción se lleva a cabo”. (Gómez, 2010)

Teniendo en cuenta todo lo menciona anteriormente más la definición de Lewis se puede desprender que la investigación educativa trata las cuestiones y problemas relativos a la naturaleza epistemológica, metodología, fines y objetivos en el marco de la búsqueda progresiva de conocimiento en el ámbito educativo

“Los orígenes de la investigación educativa se sitúan a fines del siglo XIX, cuando en pedagogía se adopta la metodología científica. Esta investigación, como disciplina de base empírica, se llamó primeramente pedagogía experimental, designación similar a la de psicología experimental, utilizada por Wundt en 1880. La pedagogía experimental nace en un contexto histórico-social en el cual se resalta el interés por afianzar la educación sobre fundamentos empíricos e incorporar el método experimental en las ciencias humanas”. (Vítale, 2011)

Esto se viene dando en el viejo continente desde finales del siglo XIX, sin embargo, es increíble que en pleno siglo XXI en México aún no se lleve a la práctica en todos los niveles de la docencia. Esto mismo debido a que muchos profesores se encuentran “casados” a estas fechas con el método tradicionalista.

Es un hecho que se importa modelos de diferentes países, y esto se sabe que es consecuencia de que en cada sexenio los presidentes, delegan la función a Secretarios de Educación que poco o nada saben del tema, éstos a su vez delegan la misión a sus subordinados hasta que dan con un modelo de estudio de otro país que se consideran capaces de copiar, pero que al final de cuentas nada tiene que ver con lo que vive el pueblo de este país.

Freinet, plasma claramente la reflexión que muchos docentes realizan en el día a día, y esto puede darse desde los profesores comprometido hasta los que no les interesa en realidad. Después de impartir clases por varios años es posible sucumbir al pensamiento de que nada puede cambiar, de que los alumnos no tienen interés o el clásico argumento de que los padres de familia poco o nada contribuyen a la educación de sus hijos y que a los docentes frente a grupo les dejan toda la carga.

En la mayoría de los casos queda en cada docente la semilla, de compartir conocimientos, de que al estar él o la docente frente al grupo estos pongan interés, y en determinado momento nace la autocrítica ¿Qué estaré haciendo mal? ¿Por qué esta técnica que tanto funcionaba ahora ya no es del interés de mis alumnos? ¿Tendré que cambiar algo? O quizá ¿Debo de cambiar todo? Y cuando surgen están inquietudes el docente se da a la tarea de investigar, ver que es lo que ahora puede y debe de hacer para que sus clases sean más dinámicas, lúdicas, interesantes, proactivas, y cuando esto sucede la maquinaria de la investigación educativa da inicio.

El profesor que investiga autores, métodos de enseñanza, teorías educativas, será un curioso que nunca podrá satisfacer su ansia por mejorar, ya sea que su nuevo aprendizaje sea un éxito o un rotundo fracaso, si es un éxito se dará a la tarea de ver que parte de la que innovo dio resultado y si es un fracaso iniciara una nueva investigación, Una vez que se adopta este hábito es casi imposible de parar.

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El docente que no es comprometido, pero se ve rodeado de un ambiente donde al menos un compañero de la institución o de la zona ha realizado logros que sobresalen de la media, se dará a la tarea de investigar el por qué el otro docente si tiene éxito y él o ella no, esto quizá puede parecer absurdo, pero hay que recordar que el ser humano tiene la necesidad de reconocimiento y un instinto natural por la competencia y esto cuando es bien aplicado puede ser un beneficio de ganar-ganar.

“En la didáctica, como en cualquier ámbito de las disciplinas contemporáneas, la investigación que se realiza responde a un "interés" cognitivo específico, con el cual se requiere una consistencia fundamental, pero que repercute en un enriquecimiento de los debates que actualmente se realizan en este campo de conocimiento. Nos encontramos frente a una diversidad conceptual y metodológica que también produce efectos de tensión y es un escenario de luchas y conflictos.” (Díaz, 1998)

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