Análisis sobre el Sabbat o Aquelarre
Enviado por Eric • 9 de Abril de 2018 • 2.453 Palabras (10 Páginas) • 329 Visitas
...
Sin duda la imagen del sabbat no sería posible sin la fusión de estos elementos, pero es necesario otorgarle mayor importancia a los tres elementos resaltados (el maleficio campesino, la nigromancia y el pacto con el demonio) ya que son los elementos sobre los cuales se sustenta y se justifica la caza de brujas.
Sin embargo esta no es la única explicación al problema de cómo se conformo la imagen del sabbat, un grupo de especialistas ha resaltado la importancia de una serie de mitos campesinos pre-cristianos de origen chamánico, se trata de la creencia en las cabalgatas nocturnas, en espíritus y en los combates en estado de éxtasis. La similitud que poseen estas creencias con la imagen del sabbat ah determinado que muchos estudiosos considerasen que la demonización de dichas creencias fue la causa principal que explica la aparición del estereotipo de la bruja. Muchos investigadores del tema sostienen que el proceso de demonización que sufrieron los mitos chamánicos resulta suficiente como causa para explicar el surgimiento de la imagen del sabbat.
Posturas adoptadas por diferentes autores
Los historiadores que han encarado el estudio de la brujería se enfrentaron a un largo debate, son dos las posturas en torno a las cuales giran los estudios, el historiador Robert Muchembled las ha denominado “interpretación racionalista” e “interpretación romántica”; la primera de ellas postula que el sabbat es una invención de la alta cultura teologal; la segunda postula que existían, en el campo, creencias pre-cristianas que fueron objeto de represión mediante la denominada caza de brujas. Dentro de las interpretaciones racionalistas se destacan las siguientes:
El Iluminismo del siglo XVIII considero que el aquelarre era una invención absurda; W. Scott sostiene que la brujería fue un delito imaginario creado por las elites.
A partir de 1830 se comienza a cuestionar esta visión racionalista por profesionales que adoptan una visión romántica; Karl Jarcke sostiene que aquello denominado brujería constituía los resabios de la vieja religión de los germanos paganos; para el historiador F. Mone el origen de la brujería no se hallaba en la religión germana sino en los viejos cultos de Dionisos. El historiador francés Jules Michelet contribuye de notable forma al fortalecimiento de la postura romántica, este afirma que los siervos de la tardía Edad Media se volvieron hacia una religión diabólica, entre ellas el sabbat, como mecanismo para oponerse a la dominación de la que eran objeto por parte de la nobleza feudal, la bruja no era sino la sacerdotisa de los oprimidos.
Las interpretaciones racionalistas y románticas continúan hasta el presente, viéndose como incompatibles entre ellas; la oposición entre ambos modelos de interpretación resulta excesivamente reduccionista, ya que por separado ninguna de las dos puede dar cuenta del complejo fenómeno de la caza de brujas. La caza de bruja no puede explicarse únicamente como un proceso de demonización sufrido por el complejo de creencias chamánicas; por otra parte, la participación de la alta cultura teologal mediante la combinación de una multitud de elementos continua siendo una hipótesis estimable. La interpretación racionalista no puede negar la importancia de la cantidad de testimonios que ponen de manifiesto el importante papel que jugaron los mitos agrarios pre-cristianos.
¿Cuáles fueron las causas de la caza de brujas?
Pocos fenómenos son tan difíciles de explicar como lo es esta peculiar forma de represión. El antropólogo M. Harris sugiere que el significado práctico de la caza de brujas consistió en deslizar la responsabilidad de la crisis de la sociedad medieval desde la Iglesia y el Estado hacia demonios imaginarios, la Iglesia y el Estado no solo se liberaron de toda culpa, sino que se convirtieron en elementos indispensables, el clero y la nobleza se presentaron como grandes protectores de la humanidad. Para R. Muchembled dos procesos paralelos dan lugar a la explicación del fenómeno: en primer lugar, la necesidad del Estado y de la Iglesia de aculturizar a las masas campesinas e incrementar el control sobre las regiones marginales de los nuevos estados; en segundo lugar, las tensiones internas de la aldea campesina en la etapa posterior a la crisis del feudalismo. Respecto del primero, el autor sostiene que el origen de la caza de brujas es político-religioso, se trataba del problema de asimilación por el Estado y por la Iglesia de las provincias excéntricas e independientes, estas instituciones vieron en la bruja la imagen de la rebelión total. Respecto del segundo proceso, el autor plantea que la caza de brujas no podía tener lugar si no se introducía en el imaginario de los campesinos; durante esta etapa los pobres aumentaron su marginalidad, y los ricos sus riquezas, estos campesinos ricos (por el peligro de contestación social que generan dichas transformaciones socioeconómicas) utilizaron las caza de brujas como forma de imponer la sumisión de los más marginados.
El historiador Keith Thomas sostiene que el origen de la caza de brujas era producto de las tensiones de una sociedad que ya no sabía cómo y bajo la responsabilidad de quien debían ser mantenidos los miembros marginales de la comunidad (recuérdese que los miembro marginales de las aldeas, mediante las leyes cristianas de caridad, eran ayudados por los miembros más pudientes); era un conflicto entre el egoísmo individual y las obligaciones comunales.
Una explicación muy diferente a las anteriores es la del antropólogo M. Harner, quien postulo una hipótesis que relaciona la caza de brujas con la ingestión y consumo de alucinógenos; esta teoría sienta sus bases en la innumerable cantidad de menciones que se hacen sobre el célebre ungüento de las brujas, dicha sustancia les daba la capacidad de volar. Harner identificó a la planta con la cual se preparaba dicho ungüento y descubrió que una de las características más asombrosas es que resulta fácilmente absorbible por la piel, concluyo en que esta planta posee grandes cantidades de sustancias alucinógenas que provocan un desorden mental; la alucinación causada por esta es transmitida del subconsciente al estado consciente, de manera que las personas pueden creer que los hechos que imaginaron se produjeron en la realidad. Los ingredientes del ungüento inducían al consumidor en un sueño profundo en el que lo soñado, al despertar, se confundía con la realidad.
A grandes rasgos estas fueron las hipótesis más relevantes acerca del origen y causa de la conformación del sabbat. Dichos fenómenos siguen siendo una extrañeza para los investigadores, el problema central
...