¿De dónde salieron las escuelas? El origen de la educación y la creación de las escuelas se remonta a la época de la prehistoria y poco a poco se ha ido transformando y evolucionando de acuerdo a las necesidades de los pueblos.

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y aunque también enseñaban escritura, lectura y aritmética a estas últimas se les daba menor importancia. En un principio, la escuela era tutelar pero debido a la democratización de Atenas y a que cada vez más había más alumnos se empezó a llevar a cabo una instrucción grupal dejando de lado las relaciones tutelares, asimismo, y con el paso del tiempo aparecieron escuelas especializadas de medicina y filosofía y escuelas dirigidas a filósofos sofistas, escuelas que eran de tipo privado puesto que los maestros eran contratados por los padres con la finalidad de instruir a sus hijos por cierto periodo de tiempo enfocándose más que nada en lo práctico tratando de formar hombres públicos y comerciantes que requería la época.

Gracias a las conquistas de Alejandro, en Grecia florecieron las colonias helénicas y con ellos empezaron a aparecer sistemas escolares muy similares a los de nuestros tiempos en cuanto a organización, curriculum y agrupamiento de alumnos por edades, en este tiempo la enseñanza que se impartía estaba organizada de la siguiente manera; primero se aprendía a leer, escribir y contar, luego se enseñaba gimnasia, música, literatura clásica, geometría y ciencia, de igual manera, había escuelas especializadas que principalmente estaban diseñadas para la enseñanza de la medicina, la retórica y la filosofía, estas escuelas eran patrocinadas por las familias griegas de recursos y solo algunos cuantos supieron aprovecharlas.

En Roma se adoptó la escuela helénica aunque con algunas modificaciones de acuerdo a las necesidades de su cultura y su época. Tras la caída del imperio romano, la educación tomó un giro trascendental pues en ella se combinaron educación y religión dando lugar a las catedrales y monasterios como centros de

enseñanza. En los monasterios benedictinos el espacio y el tiempo eran aprovechados de manera peculiar para el aprendizaje, en ellos se preparaba a los hombres para la vida, sin embargo, tras la aparición de las ordenes dominica y franciscana los lazos de tiempo y espacio quedaron de lado para darle realce a la caridad y a la identificación con los pobres como un modo de vida. Por otro lado, los jesuitas, se encargaron de retomar el principio de educación y dieron una gran importancia a la preparación, en sus escuelas, se elaboró un curriculum un método elaborado deliberadamente para preparar a los hombres a una vida de riesgos y perspectivas y aunque en un primer momento su educación estuvo al alcance de solo algunos miembros de la orden religiosa poco a poco se extendió a las élites laicas del mundo.