HISTORIA SOCIAL MODERNA Y CONTEMPORÁNEA - SEGUNDO PARCIAL

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En 1927 Chiang reprime a los sindicatos de Shangai y comienza una campaña de persecución al comunismo conocida como el Terror blanco (accionar que fue condenado por el gobierno izquierdista de Wuhan). A su vez Stalin ordenó al PCC aliarse con el gobierno de Wuhan pero también reemplazar y minarlo desde adentro, lo que generó desconfianza por parte de Wuhan, que volvería a aliarse con el ala derecha del Guomindang (esto revocaría una serie de derechos de igualdad entre el hombre y la mujer emitidos por el gobierno del ala izquierda). El PCC intentó alzarse en algunas ciudades pero sin éxito, lo que destruyó su rango de acción citadina y lo expulsó al campo, donde habría de recomponerse.

El gobierno nacional de Nankin tenía el objetivo de ser un gobierno provisorio (luego se establecería una constitución), con un limitado margen de acción y amenazas por donde se mire (Japón al norte, comunistas al sur, revueltas de caudillos en el interior). La forma de expandir el acotado territorio de operaciones del gobierno fue la lucha contra los comunistas, que probó ser altamente efectiva: triplicaron su territorio en una década.

Dentro del partido se dieron incontables casos de corrupción y conflictos internos que impidieron una reforma social y económica efectiva.

Múltiples iniciativas del gobierno de Nankín cayeron debido a la inefectividad de sus funcionarios: obras sanitarias, aumentos de impuestos sin inversión pública, reformas sociales que fueron degenerando en absurdas, etc. El Guomindang no tuvo en consideración clases poderosas en la economía, desoyendo los intereses de las burguesias industriales y mercantiles y menospreciando a la elite terrateniente; se dieron varias disputas al interior del partido en relación con la burguesía, pero Chiang en búsqueda de una unidad social buscó la asimilación de la elite mercantil.

En el campo se encontraba Mao, desplazado del comité central del partido y actuando de forma independiente de la directriz partidaria (utilizando tácticas guerrilleras con el apoyo de lumpenproletariado rural). Luego de otro fallido intento de tomar ciudades debido a la falta de apoyo popular, Mao se retira a Jiangxi donde en 1931, juntando todos los soviets rurales de esa provincia en un congreso en Ruijin se fundará la República Soviética de Jiangxi (en donde Mao será electo presidente). Cuando los 28 Bolcheviques (líderes del PCC y seguidores de la línea de la Komintern) se trasladan a Jiangxi el poder de Mao comienza a diluirse: el poder residía en el Politburó, dominado por los 28 (que no veían con buenos ojos la distribución de tierras o las tácticas de guerrilla); aquí comienza a diferenciarse la política maoísta con la del partido, ya que su estrategia era que el partido trabaje con las ideas de las masas para garantizar el apoyo de las mismas (de las masas para las masas).

El cambio en la estrategia militar por una guerra de posición (impulsada por los 28) fue desastrosa y en 1933 fue atacado por Chiang, derrotando al PCC y obligándolo a retirarse de Jiangxi en lo que se conocerá luego como la Larga Marcha. Esta marcha duró un año entero y de ella solo sobrevivieron 4.000 personas de las 86.000 que arrancaron, culminando en Shaanxi y tuvo luego una simbología mística durante la hegemonía del PCC. Durante ésta Mao llama a un consejo en el que criticará a los líderes del partido, afirmando su posición en el mismo y comenzando a transitar su ascenso hacia el dominio del partido, fue responsabilizado con una serie de cargos importantes (principalmente el de director de los asuntos militares). En 1936 se establece el cuartel general en el norte de Shaanxi, un lugar resguardado de posibles ataques donde Mao consolidaría su poderío político e ideológico en el partido.

En 1937 comienza una enorme guerra entre China y Japón, causada por una tendencia imperialista de Japón que buscaba crear un nuevo orden en Asia oriental en contra de los sovieticos y los liberales de occidente, transformandose en una nueva potencia imperial para compensar sus años de colonia y competir contra los occidentales. Esta guerra se prolongó mucho más de lo que Japón hubiese deseado y le costaría muy caro el desgaste de recursos que le llevó la guerra. También deben notarse distintas posturas respecto a la guerra dentro del gobierno japonés, puesto que muchos pensaban que el legado cultural que le debían a los chinos debía recompensarse ayudando a la modernización de su estado pero desde la cooperación (claramente esta postura fue eclipsada por la búsqueda de ampliar los privilegios japoneses).

Estados Unidos intentó promover un tratado entre Japon, Francia, Gran Bretaña y EEUU en caso de que surgiera un conflicto, estipulando consulta mutua antes de proceder. Este tratado fue ignorado por todas las potencias firmantes, que realizaron acuerdos unilaterales con China.

La ocupación de Manchuria por parte del Ejército de Kwantung y la creación del estado títere de Manchukuo dió como resultado una creciente tensión entre los países, provocando la posterior salida de Japón de la Sociedad de Naciones que luego de la Gran Depresión provocó que Asia (y particularmente China) fuesen el foco de la actividad japonesa.

Ante esta ofensiva japonesa, Chiang se mantuvo de forma ajena, más preocupado por los comunistas chinos que por los invasores japoneses con quienes practicó una política de apaciguamiento (actitud fuertemente criticada). Un caudillo de Manchuria lo tomó prisionero para exigir la unión del pueblo chino contra las fuerzas invasoras, su intención era ejecutarlo pero fue convencido de ponerlo en libertad por el PCC bajo la condición de la formación de un nuevo frente unido.

Este nuevo frente unido presenta características muy distintas al anterior, ambos partidos ahora poseían fuerzas militares y territorios concretos de dominación (antes sólo el Guomindang tenía esto); de todas formas aceptó el mando de Chiang y modificó su política de extracción de tierras en pos de la unidad nacional.

La guerra en un principio se perfilaba como un conflicto de corta duración, Japón dominaba ciudades muy importantes al régimen de Nankín, pero la toma del campo les resultó imposible debido a lo vasto del territorio a ocupar. Mientras, las fuerzas comunistas se encontraban tras las líneas japonesas y atacaban al invasor (siempre siguiendo la táctica guerrillera). La guerra llegó eventualmente a una situación de tablas.

La fragilidad del segundo frente unido era evidente, ningún bando confiaba en el otro, pero el régimen comunista en Yanan fue mucho más importante que el establecido en Chongqing (luego de la toma de Nankín por parte