La influencia externa en chile asunto el cual consiste en la preponderancia británica

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Por falta de desarrollo tecnológico habían desplazado paulatinamente al producto chileno del mercado internacional. Sin embargo, con la apertura de El Teniente, en 1912, y Chuquicamata, en 1915, Chile volvió a ser uno de los principales productores del “metal rojo”. De esta forma, en la víspera de la Primera Guerra Mundial los niveles alcanzados por Chile en su comercio de exportación eran particularmente elevados y, paradojalmente, sus perspectivas futuras eran muy promisorias pero no contaban con que esta afectaría a la economía chilena en forma muy peculiar, pues al mismo tiempo que permitió mantener relativamente el nivel de exportaciones, imponía una brusca reducción en el volumen de las importaciones, elevándose así los precios del salitre sin embargo a su término dejó en evidencia la dependencia económica de nuestro país, paralelamente Estados Unidos se posicionó como potencia mundial desplazando a Gran Bretaña, como consecuencia revitalizaron la economía chilena gracias a las nuevas tecnologías y a la inversión en el cobre, en su primera etapa esta intervención fue dirigida por capitales estadounidenses.

Se reformó la administración pública por Carlos Ibáñez del Campo, donde el Estado se hizo cargo de la economía, se inició un vasto programa de obras públicas y se aplicaron por primera vez políticas económicas de fomento a la producción industrial. Fruto de ellas fueron el arancel aduanero de 1928 que gravó fuertemente el ingreso de manufacturas importadas, poniendo fin a la influencia extranjera en la economía chilena.

De esa manera, los fundamentos de la política de sustitución de importaciones e intervencionismo estatal que caracterizó a la economía chilena desde 1930 y fueron en gran medida una respuesta frente a la dependencia de la economía, la que se hizo tras el término de la Primera Guerra Mundial.

Ahora bien, el país estaba libre de la intervención de externos, pero para su avance económico “libre” necesitó un sustento, y estas fueron nuevamente las relaciones comerciales con EE.UU, es ahí donde nace la Corporación de Fomento de la Producción con el objetivo de planificar el desarrollo industrial y productivo de áreas estratégicas y generar un país totalmente industrializado libre de la interdependencia, pero que se inicia a través de un préstamo proveniente del banco estatal estadounidense. Entre 1940 y 1943 la Corfo obtuvo la suma de US$ 63.008.000 en préstamos, de esta manera la economía chilena no nunca se desligó total y plenamente de Estados Unidos.

En cuanto al determinar la hegemonía ejercida por el empresariado y el volumen de sus fortunas gracias a la explotación cae en una disyuntiva de si es o no favorecedor la influencia de dichos personajes en nuestra economía ya que como es mencionado anteriormente también se proporcionan diversas obras públicas con los ingresos de esta industria que estaba por consolidarse, también así como es mencionado en las fuentes, la misma estructura del país lo dirigió al predominio del capitalismo yankee, es ahí donde nuestra soberanía económica desaparece, terminando todo en una dependencia que se cubre por el manejo del Estado en la economía, sin embargo la influencia externa sigue ahí a través de préstamos bajo un discurso de desarrollo.