Literatura en Latinoamérica
Enviado por Ninoka • 29 de Abril de 2018 • 6.308 Palabras (26 Páginas) • 268 Visitas
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En definitiva, frente a la oposición “Ficción/Realidad” la literatura toma partido por la “ficción”, ya que plantea por propia voluntad, la “re-presentación de una realidad” en la que alguno o todos sus elementos, (personajes, hechos, tiempo, lugar, etc.) son inventados o imaginados.
Sin embargo, aunque la literatura, por ser invención, no hable directamente de hechos o situaciones realmente sucedidos, siempre tiene como referencia al orden real porque de otra manera las historias que cuenta o las descripciones que realiza, serían imposibles de pensar o de representar para el lector.
Ahora bien, a pesar de referirse indirectamente a la realidad, la literatura puede plantear problemas o situaciones humanas, descripciones o explicaciones, con más profundidad y precisión de la que emplean los textos no ficcionales, es decir, aquellos que se refieren directamente a la realidad. Por ejemplo, en la novela “El tambor de hojalata”, Gunter Grass, describe y relata hechos de la época del nazismo, en Alemania, inventando un niño–narrador, que ve y cuenta toda la tragedia de aquel momento histórico, con tanto rigor y expresividad, que consigue dar cuenta de lo vivido en aquel momento, de manera más intensa y precisa que muchos testimonios directos o documentos de la época.
- La Literatura y el Uso Estético de la Lengua:
La literatura es entendida como un hecho de comunicación que tiene en cuenta los contextos de producción y recepción; es un acto de hablar con un uso particular: el estético.
Cuando se habla de un texto literario se da por sentada su función estética o poética. ¿Pero qué significa este concepto? ¿De dónde sale?
Para ello hay que remontarse a la noción de funciones del lenguaje propuestas por Jacobson, que tienen que ven con la finalidad que persigue el discurso, según los elementos del circuito de la comunicación que se ponen en relevancia.
- Podríamos sintetizar esas funciones en el siguiente cuadro:
Ejemplo de un uso de la lengua
Finalidad de este discurso
Elemento destacado
Función del lenguaje
¡Qué calor hace hoy!
Expresar un estado (del yo)
Emisor
Función expresiva
Cerrá la puerta por favor
Dirigirse al destinatario para que lleve a cabo una acción
Receptor
Función apelativa
Anuncian lluvias
Informar. Referirse a algo (ni un yo ni un tú)
Referente
Función referencial o informativa
El verbo es núcleo del predicado
Explicar un elemento de la lengua
Código
Función metalingüística
Hola, ¿me escuchás?
Asegurarse de que el medio está apto para la comunicación
Canal
Función
fáctica
¿Qué sucede con la “función poética?”
Como se infiere del cuadro anterior, la función poética estará centrada en el mensaje.
Cuando se dice que se centra en el mensaje, significa que el lenguaje no tiene una finalidad práctica (como en los casos del cuadro) sino una finalidad en sí misma: realzar los elementos del lenguaje (los signos) para crear un plus de significación, donde queda en el oyente/lector / espectador el trabajo de hurgar en ellos.
Para usar el lenguaje con intención estética hay que dejar intervenir la imaginación, la sugerencia y la originalidad y lo que hay que aclarar que cualquier recurso que se utilice para tal fin siempre tiene que ser intencionado. Y así sucede en la literatura.
La literatura trabaja con el lenguaje, no solo se sirve de él, sino que lo que importa en la literatura no es solo que se dice sino como ha sido dicho y porque. Un buen lector debe revelar los Cómos y Porqués del texto. Cuando el uso de la lengua persigue una intención como esta se dice que se hizo de ella un uso estético.
Se hace un uso estético de la lengua cuando este persigue una función estética, cuando el texto busca generar un determinado placer para el lector. Ésta la “Función Poética” es la principal característica de los textos literarios.
- El Lenguaje (es decir, la capacidad humana de comunicarse mediante un sistema de signos sonoros articulados) tiene las siguientes funciones:
- Función representativa o referencial:
Se usa cuando pretendemos meramente transmitir una información, sin hacer valoraciones sobre ella ni pretender reacciones en nuestro interlocutor, por ejemplo cuando decimos “está lloviendo”, o “la capital de Marruecos es Rabat”. Esta función se centra, dentro de los elementos de la comunicación, en el mensaje, aunque también hay quien dice que se centra en la realidad exterior o referente (los elementos de la comunicación están explicados al final de este artículo).
- Función expresiva o emotiva:
Es utilizada cuando el emisor (elemento en el que se centra esta función) pretende dar cuenta de su estado físico o anímico, como cuando soltamos un “¡ay!” al pillarnos la lengua con la tapa del piano, cuando decimos a nuestra novia que la echamos de menos o cuando decimos que odiamos las espinacas.
- Función apelativa o conativa:
Mediante el uso de esta función normalmente pretendemos provocar una reacción en el receptor, que es el elemento fundamental aquí. Es decir, queremos que haga algo, o que deje de hacerlo. Es la función principal cuando, por ejemplo, decimos “vete a tomar el aire”, “abre la ventana, por favor” o “cállate”.
- Función
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