Prácticas culturales, sacrificio religioso o de amistad en la Ilíada

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El amor que Aquiles siente hacia su amigo Patroclo es tan profundo que cede a ir a la tienda de Agamenón y allí jura que no se lavará la sangre hasta no dejar en la Pira a Patroclo, alzado una tumba y cortarse el cabello. La amistad entre Aquiles y Agamenón es una viva muestra de una relación entrañable, debido a que Peleo recibió a Patroclo desde que era un niño en su castillo, éste había sido desterrado por un homicidio involuntario. Para las costumbres de la época en la que se sitúa la Ilíada, no era para menos, el tipo de funeral que se merecía Patroclo, planeado y liderado por su mejor amigo. Todo lo relacionado con los funerales se describe aquí de manera detallada, se hace gala del heroísmo de Patroclo y se le rinden homenajes a su valor y a su persona. A los ojos del lector desde los cuidadosos preparativos hasta el final del ritual se percibe un gran espectáculo fúnebre. Todas las acciones que hacen parte de las honras fúnebres y su esmerada descripción, llegan al punto de generar aflicción: la organización y distribución de las tareas de los ejércitos para preparar la pira donde todos estaban a la altura con sus vestidos y armaduras completas, la hecatombe de cincuenta carneros en su altar levantado en el bosque, el momento del corte y la entrega de la cabellera de Aquiles, la magnificencia de los juegos programados y premiados con las riquezas de Aquiles y sus hombres, y el hecho de reunir a los amigos más cercanos a él al lado de la pira para ubicar los presentes.

Se resalta el momento en el que emprenden el sacrificio animal para su amigo porque no sólo es de carneros sino de muchos otros animales: “Cebadas reses y vacas, de torcidos cuernos y tornátiles patas, desollaron en cantidad y prepararon ante la pira. A todas quitó el magnánimo Aquiles la grasa, con la que cubrió el cadáver de pies a cabeza[8], y hacinó alrededor los cuerpos desollados. Añadió ánforas de miel y de aceite[9], que colocó apoyadas en el lecho funerario; cuatro caballos, de erguido cuello, puso, uno tras otro, en la pira entre grandes sollozos. Nueve perros tenía el soberano, que comían de su mesa; de ellos degolló a dos y los echó a la pira…”. Se cita también la forma de sacrificio humano como parte fundamental del ritual: “… a doce valerosos hijos de los magnánimos troyanos, a quienes aniquiló con el bronce… Prendió la férrea furia del fuego para hacerlos pasto de él. Lanzó entonces un gemido y llamó por su nombre a su compañero: «¡Te saludo, Patroclo, incluso en las mansiones de Hades! Ya estoy cumpliendo en tu honor todo lo que antes te prometí. A doce valerosos hijos de los magnánimos troyanos está devorando el fuego ahora junto a ti. Mas a Héctor Priámida no lo entregaré a las garras del fuego, sino a las de los perros.»” (En Crespo 1996, p. 560). Adicionalmente Aquiles rezó a varios dioses a los que les prometió muchos más sacrificios.

Mientras se está dando el juego del arco se indica en el verso 323 que uno de los jugadores había ofrecido hecatombes a los dioses, esperando salir victorioso; mientras su contrincante no las había ofrecido. Este es un ejemplo más para confirmar que los sacrificios se hacían con el fin de obtener de los dioses, favores que los hombres consideraban vitales: “Entonces Meriones quitó a Teucro a toda prisa el arco del brazo, pues la flecha ya la tenía hacía rato, mientras aquél apuntaba; y al instante se comprometió con el flechador Apolo a sacrificar una ínclita hecatombe de primogénitos corderos.” (En Crespo 1996, p. 582)

Para finalizar, vale señalar que los sacrificios que son muestra de devoción religiosa, no sólo están presentes en los capítulos que se ejemplifican en este texto, sino que son recurrentes a lo largo de la obra. En el rastreo realizado se pudo identificar que en cada uno de los siguientes cantos se aluden o describen este tipo de rituales: I, II, III, IV, V, VI, VII, VIII, X, XI, XVIII, XIX, XXII, XXIV.

BIBLIOGRAFÍA

Carlier, P. (2005). Homero. Madrid: AKAL.

Crespo Güemes, E. (1996). La Ilíada. Madrid: GREDOS.

Gutiérrez, F. (2015). La Ilíada. Bogotá: PENGUIN.

Montes, M (2008). El control del otro. Sacrificios en la sociedad heroica griega. Revista de ciencias de las religiones. Vol 13, 119-147.

Reyes, A. (2010) Grecia clásica. Cuernavaca. http://www.greciaclasica.org.mx/index.html

Universidad de Almería. Filología griega. Civilización del mundo griego. Almeria. http://www.ual.es/personal/fjgarcia/Civilizacion.htm

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