Desarrollo psicosocial de la infancia media El yo en desarrollo

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La[a] vida en familia monoparental.

Las familias monoparentales son resultado del divorcio y separación. El niño puede mostrar un rechazo social y educativo en relación con sus pares que viven con ambos padres, en cambio el niño de padres casados suelen tener más interacción diaria, muestran un avance significativo en la escuela y demuestran más interés en participar de tareas extracurriculares.

La vida en una familia que cohabita.

Estas familias son similares en varios puntos a las familias casadas, pero los padres suelen tener más carencias. Por lo general su ingreso y educación son menores, suelen tener problemas mentales y malas relaciones.

Vivir en familia reconstituida.

Este tipo de familia se caracteriza por estar formada por padres divorciados que vuelven a casarse, muchas de estas madres solteras se casan con hombres que no son padres biológicos de sus hijos y pueden formar familias mezcladas. Algunos estudios aportan que la presencia de un padrastro es beneficiosa para los niños, pero si uno de los hijos fuese de sexo femenino esta pudiese sentir que el nuevo hombre de la casa es una amenaza para su independencia y relación con su madre. Por consiguiente familias reconstituidas reportaban menos bienestar que los que fueron criados en familias sin rupturas, por lo tanto puede ser una de las razones por la cual las personas de familias reconstituidas no les va bien en ámbitos emocionales, social y psicológico.

La vida con padres homosexuales.

En estados unidos nueve millones de niños y adolescentes tienen por lo menos un padre homosexual, gay o lesbiana, variadas estadísticas estudiaron el desarrollo de los hijos de gay o lesbianas (Pawelski et al, 2006). Las estadísticas arrojaron que no han tenido motivos especiales de preocupación en torno al desarrollo en especial, en la salud física y emocional, inteligencia y ajuste, sentido del yo, juicio moral, funcionamiento social y sexual sin encontrar motivos especiales de preocupación. Niños y adolescentes establecen buenas relaciones con sus padres homosexuales y en relación con esto no se observaron problemas en su crianza en comparación con los que son criados por padres heterosexuales que presentan problemas en el entorno al desarrollo emocional, social, psicológico y también en su identidad sexual. Por estas investigaciones han sancionado legislaciones que autorizan la adopción por parte de parejas del mismo sexo.

Familias adoptivas.

La adopción se encuentra en todas las culturas a lo largo de la historia. No es una práctica solo de las personas estériles, sino que también han permitido que personas solteras, viejas, parejas homosexuales y gente que ya tiene hijos biológicos se conviertan en padres adoptivos, la adopción se puede realizar por medios públicos y privados. En estos últimos años ha aumentado de manera notable las adopciones independientes que se realizan de manera directa entre los padres adoptivos y los padres biológicos, adoptar a un niño implica desafíos especiales como: integrar al niño a la familia, explicarle sobre la adopción, ayudarlo a desarrollar un sentido sano del yo y tal vez ayudarlo a encontrar y entrar en contacto con sus padres biológicos (kreider y Fields, 2005)

Relaciones entre hermanos

En áreas remotas del mundo como Asia, África, Oceanía y centro de Sudamérica los hermanos mayores tiene un rol definido que viene de la cultura hasta la crianza, los hermanos mayores o hermanas tiene la obligación de cuidar a sus hermanos menores, los padres entrenan a sus hijos mayores para que estos después enseñen a sus hermanos menores (cicirelli, 1994)

En cambio en otras sociedades industrializadas como Estados Unidos, América del sur y algunos lugares de Europa , los padres no tratan de cargar al hermano mayor con el hermano menor ,lo hacen de forma informal y no como una parte establecida del sistema social , el número de hermanos , su espaciamiento , orden de nacimiento y genero suelen determinar los roles y relaciones , la relaciones entre hermanos puede ser un laboratorio para la solución de conflictos , los hermanos están destinados a reconciliarse después de cada pelea porque saben que tendrán que verse a diario y con eso aprenden a que la expresión de irritación no termina una relación(weisner,1994 )

El niño en el grupo de pares.

En la niñez media se forman los grupos de pares, que se establecen de manera natural entre los niños que viven cerca o que van juntos a la escuela, a menudo están formados por niños del mismo origen racial o étnico y de posición socioeconómica similar (Hartup, 1992).

Efectos positivos y negativos de las relaciones con los pares.

Los niños se benefician cuando hacen cosas con sus compañeros. Desarrollan las habilidades necesarias para practicar la sociabilidad y la intimidad, lo que les permite obtener un sentido de pertenencia. Tiene motivación de logro y adquieren un sentido de identidad (Bandura, 1994).

El grupo de pares ayuda a los niños a desempeñarse en sociedad, también ofrece estabilidad emocional, promover tendencias antisociales, así como también el grupo de pares del mismo sexo los ayuda a aprender conductas de género apropiadas y a incorporar los roles correspondientes en su auto concepto.

Con relación al lado negativo el grupo de compañeros puede reforzar el prejuicio: actitudes desfavorables hacia los extraños, en especial hacia miembros de ciertos grupos raciales o étnicos. Los niños suelen inclinarse hacia los que son como ellos pero a excepción de la preferencia de los niños del mismo sexo estos sesgos disminuyen con la edad ya que el prejuicio y la discriminación pueden ser muy dañinos para el niño.

Popularidad

Durante la niñez media la popularidad adquiere más importancia en general a los niños sicométricamente populares, que poseen buenas capacidades cognitivas y grandes logros, son buenos para resolver problemas sociales, puesto que ayudan a otros niños y son asertivos sin ser problemáticos o agresivos. Son amables dignos de confianza, cooperativos, leales, hacen revelaciones personales y brindan apoyo emocional.

También los niños pueden ser impopulares por muchas razones, en algunas ocasiones son llamados agresivos a los impopulares, otros son hiperactivos, poco atentos o retraídos, otros actúan de manera tonta e inmadura, o ansiosa e insegura;