PROCESO DE MUERTE EN EL ADULTO MAYOR ENFERMERÍA GERONTOGERIATRÍA
Enviado por poland6525 • 13 de Enero de 2019 • 3.021 Palabras (13 Páginas) • 466 Visitas
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La familia es un elemento importante en la vida, la comunicación es esencial, básicamente con la familia encuentras el apoyo que a veces con terceras personas no lo encuentras. Cuando en nuestro hogar tenemos un adulto mayor, lo vemos como una persona sabia, con experiencia de la vida, alguien al que todos admiran, un aspecto importante es que los familiares cercanos acepten que esto es un proceso de vida, algo que debe de pasar, no somos eternos, cuando sabemos que nuestro familiar se acerca cada vez a la muerte ya sea por una enfermedad terminal o por edad, debemos de manejarlo de forma tranquila, ya que si nosotros no estamos tranquilos, nuestra actitud puede inquietar al familiar, saber manejarlo de forma madura, darle tranquilidad a nuestro ser querido, tal vez no sea fácil dejar ir a alguien con el que hemos convivido la mayor parte de nuestro tiempo, un ser que ha marcado nuestra vida, el doloroso, pero debemos de estar tranquilos, mostrarnos fuertes ante la situación, demasiado apoyo a la persona, cumplir últimos deseos como la mayoría lo hace, reuniones familiares, etc.
Muchas personas se sienten aterradas cuando descubren por primera vez que son consideradas viejas. “Si, sí, todos quieren llegar a viejo, pero nadie quiere ser viejo” dice un anciano. El envejecimiento, por sí mismo, estipula y fija un pronóstico de vida limitado ya que se asocia con el declive, la decadencia, la pérdida… Algunas actitudes ante la muerte están asociadas a la edad, aunque lo que prevalece es la percepción individual, y es ahí, a nivel individual, donde debemos actuar, proporcionando una atención individualizada, personalizada y de calidad.
Actitudes del adulto mayor y su entorno ante la Muerte:
La conciencia de la finitud de las cosas y de sí mismo podría facilitarle al anciano adoptar posturas más o menos estoicas. Frecuentemente esto ocurre así, pero en algunas circunstancias, por ejemplo de marginación social y familiar, la hace sentir cada muerte de otro como una nueva experiencia sobre el fin de la vida y le pone de manifiesto su empobrecimiento progresivo y sus menores conexiones con los hechos afectivos y biológicos de la vida. Por lo tanto, lo más angustiante para el viejo es la pérdida y la muerte. Esa pérdida supone un grado y características determinadas por el monto de pertenencias afectivas, tanto sociales como familiares, relacionadas con la repercusión que ella puede tener en la satisfacción de necesidades objetivas y subjetivas del anciano, que se pueden clasificar en cinco grandes grupos
- Fisiológicas (son vitalmente prioritarias)
- De seguridad y confianza en los demás
- De pertenencia o integración (ante vivencia de aislamiento y soledad)
- De reconocimiento y estima (ante la progresiva auto-desvalorización y pérdida de autoestima)
- De superación y confianza en sí mismo (para recuperar lo que tiene).Cómo se puede observar esta jerarquía de necesidades es la planteada por Abraham Maslow en su pirámide la autorrealización pero empleada específicamente para ancianos. Estas necesidades, planteadas por el gerente, motivan en los que lo rodea un monto de angustia tendiente a aliviar más la propia ansiedad que la del que lo plantea.
El hombre debe hacerse amigo de la muerte; debe hacerse a la idea, hacerse amigo de la idea de tener que acabar. Serenamente, sabiamente, humilde debe aceptar acabarse: soltar las adherencias que, como gruesas maromas, lo amarraban a la orilla, y… dejarse llevar mar adentro.
Otras acciones que puede realizar el familiar, si es que el adulto, manifiesta una actitud negativa a lo que es el proceso de muerte, o le resulta sensible, es muy recomendado, realizar las siguientes acciones:
- Cambiar el tema de conversación
- Callar o alejarse de él como si no se le hubiera oído
- Restar importancia a aquello que a él le angustia o preocupa, pero sin afrontarlo
- Adoptar más o menos cínicamente posturas fatalistas
- Trasladar la respuesta a otros
- Negar la situación que el interesado tiene objetivamente clara
- Contestar con evasivas, más o menos negativas, a la cuestión, pero sin comprometerse
- Adoptar actitudes moralizadoras, ejemplarizantes y/o paternalistas. Estas actitudes, como el " pacto de silencio, no solucionarán las angustias del anciano ni satisfarán a quien las ejecuta. Esto se puede revertir en parte, intentando darle seguridad sobre:
- Que no le faltará en ningún momento la clase y cantidad de medicación que necesite.
- En el momento final no experimentará sufrimiento
- Tendrá la compañía que desee a cada momento- Seguirá contando con apoyo y comprensión aunque dé muestras de enfado y hostilidad- En todo momento será tratado con todo el respeto que merece una persona.
Una persona que decide morir en casa les está pidiendo a los seres queridos que asuman la responsabilidad de dejarles morir. Esta situación suele suponer una responsabilidad emocional tan importante que la familia se ve obligada a ingresar a la persona en el hospital cuando se encuentra ya en la fase agonizante. Es una petición devastadora solicitar de un ser querido que asuma la responsabilidad de dejarte morir.
Como finalidad de este espacio, es darle paz y tranquilidad al adulto, no dejarlo solo, ya que pueden sufrir depresión, hasta en unos casos provocarse la muerte y es ahí donde viene la culpa o arrepentimiento del familiar, de no haber realizado o cumplir lo último que el abuelito pedía. La gente adulta mayor, vuelve a ser niño, necesitan de muchos cuidados y atenciones, aunque algunos resulten muy testarudos y digan que ellos no necesitan la ayuda de nadie, pero al final ellos si lo necesitan, quieren ese apoyo pero sin pedirlo, que llegue solo, así como todo lo demás, sentir ese calor familiar que siempre ha tenido, o al menos en ese momento de su vida sentirlo.
-Morir no es algo que haya que temer: puede ser la experiencia más maravillosa de la vida.
HOSPITAL (ENFERMEDAD TERMINAL):
Si se pudiera elegir el lugar donde vamos a morir, la mayoría elegiríamos probablemente nuestro propio hogar.
Sin embargo, muchos pacientes no tienen elección. Pueden encontrarse
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