TERAPIA NARRATIVA Conceptos centrales

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Específicamente, creo que esta terapia resultaría muy útil para pacientes con un problema ya identificado como es el caso de Olga, una paciente con la cual tuve sesiones de práctica el cuatrimestre pasadoy quien padece cáncer.

Desde un principio y con la asesoría de la maestra, traté de trabajar con ella de modo que separáramos el cáncer de quien es, le repetía “tú no eres el cáncer, el cáncer es algo que te dio pero eso no significa que ahora tú eres cáncer”. Sin embargo, esto resulta difícil si no se hace desde un enfoque narrativo ya que, como observé, cuesta trabajo separarse de algo que afecta tu vida y que vino a cambiar y a desestructurar toda tu persona. Además, ella lo percibe como algo suyo, algo propio, lo que le da vergüenza y le cuesta trabajo aceptar. Creo que esto es muy común y por lo que resulta realmente efectiva la terapia narrativa, ya que como dije, al externalizar el problema y separarse de él, la persona recupera su identidad de modo que Olga podría ya no sentir vergüenza ni sentirse culpable, sino reconocer que esa creatura que vino a afectar su vida es algo externo y que incluso está luchando contra ella. Intenté hacer un acercamiento a este tipo de terapia planteándole la idea de que el cáncer era una persona que estaba sentada frente a ella, que qué le diría, que le dijera cómo y de qué manera había afectado su vida. Se mostró un poco confundida y dijo que nunca lo había pensado de esta manera. Aunque intentó hacer el ejercicio, observé que aunque trató de imaginarlo, el cáncer es algo que ya adoptó como propio, creo que sería muy provechoso que lo describiera como una creatura y no tanto como una persona a la que le tenga que hablar para poder explorar más los pensamientos y sentimientos que le provocan, acercándonos a una mayor aceptación de la enfermedad y a reconocer las herramientas que ella posee para seguir con su lucha.

En esta práctica narrativa particular o conversación, se invita a testigos externos (oyentes) a una consulta. A menudo son amigos de la persona o clientes anteriores del terapeuta que tienen su propio conocimiento y experiencia sobre el problema en cuestión. Durante la primera entrevista, entre el terapeuta y la persona, ellos solo escuchan sin hacer comentarios. Después el terapeuta da instrucciones a los oyentes de no criticar o evaluar, reclamar o difundir acerca de lo que acaban de escuchar, y si decir simplemente lo que de la conversación escuchada, sea una frase o una imagen que se destacó en el oyente o algo muy importante para ellos, seguido por cualquier resonancia en sus propias luchas de la vida y de lo que son los testigos como personas. Por último, los invitados se preguntan de qué manera se pueden sentir o como hacer un cambio de la forma en que se experimentan a sí mismos a diferencia de la primera vez que entraron en la sala. A continuación, en forma similar, el terapeuta se convierte en la persona de la consultoría, que ha estado escuchando al mismo tiempo, y entrevista acerca de qué imágenes o frases se destacaron en la conversación que el cliente acaba de oír y las resonancias que han tocado las fibras sensibles dentro de ellos. Al final, para la persona los resultados son notables: puede aprender que no es el único con este problema, y adquiere nuevas imágenes y conocimientos al respecto y direcciones alternativas que puede elegir para continuar su vida. El objetivo principal de la terapia narrativa es participar en los problemas de las personas ofreciendo la mejor solución alternativa.

Hace dos cuatrimestres, en la clase de terapia familiar, la maestra nos invitó a formar parte de un proceso terapéutico en donde se llevó a cabo un tratamiento basado en terapia sistémica breve, utilizando herramientas de corrientes relacionadas como la terapia narrativa. Fui parte de un equipo terapéutico, el cual se encontraba detrás de una cámara de gesell.

Fue muy interesante ver como nosotros podíamos participar directamente con los pacientes aún sin ser los terapeutas principales. En una ocasión, la maestra nos pidió a cuatro voluntarios entrar al consultorio, nuestra participación era hablar entre nosotras a cerca de los avances y los cambios positivos que habíamos percibido a lo largo de las sesiones y que los pacientes nos escucharan. No fue una conversación con ellos, ya que ni siquiera hubo contacto visual, solo fue una herramienta para elogiar y reforzar los logros de la familia y de informarles de manera indirecta nuestros pensamientos e ideas a cerca de ellos. Esto es una herramienta de la terapia narrativa, así como las siguientes que mencionaré y que aplicamos durante las prácticas en las sesiones de la familia hace dos cuatrimestres:

- El supuesto de que las narrativas o historias dan forma a la identidad de una persona, como cuando una persona evalúa un problema en su vida por sus efectos e influencias, como una "historia dominante".

- Es común el reconocimiento por medio de la creación y uso de documentos terapéuticos.

- El énfasis en la "externalización", nombrando un problema, es decir, sacarlo y darle forma y personalidad, para que la persona pueda evaluar sus efectos en su vida, llegar a conocer cómo funciona o como funciona en su vida, cómo se relaciona con su historia temprana, evaluarlo para tomar un posición definitiva sobre su presencia, y al final elegir qué relación se tendrá con "el problema".

Un enfoque sobre las excepciones al problema, las cuales no se tomaron en cuenta por la narrativa del sujeto.

Una fuerte conciencia sobre el impacto de las relaciones de poder en las conversaciones terapéuticas, con el compromiso de que se compruebe con el cliente los efectos con el fin de mitigar el posible efecto negativo de supuestos invisibles o creencias mantenidas.

Puedo concluir que ésta corriente terapéutica se basa en la descripción saturada del problema, donde la persona va exponiendo sus problemas, creencias, habilidades, angustias, etc, y le da un nombre específico a dicho problema. Este reconocimiento al final le ayuda a recuperar su vida a partir de un problema.

En la práctica, un terapeuta narrativo ayuda a los clientes a examinar, evaluar y cambiar su relación con un problema, al actuar como un "periodista de investigación" que no está en el centro de la investigación, pero no deja de influenciar; es decir, este terapeuta plantea preguntas que ayudan a las personas a exteriorizar un problema (externalización) y luego investigan a fondo.

Entrelazado con esta investigación del problema, se van descubriendo resultados únicos o excepciones y sus influencias, estas excepciones