Texto Clave: "Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón; Porque de él mana la vida."

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- La urgencia de guardar el Corazón – “guarda tu corazón”.

Normalmente guardamos el dinero, por ejemplo en el banco en cajas de seguridad, cuentas de ahorros, las carteras; Las casas las pintamos, remodelamos, añadimos cosas para que tengan más valor; Los carros los lavamos, muchos los pulen, les colocamos accesorios, cauchos, estéreos, hasta televisiones, les hacemos su cambio de aceite, su chequeo y muchos hasta los cuidan de que no les pegue mucho sol. Pero, ¿y nuestro corazón?, porque por lo que ya hemos visto hay un inminente peligro si lo descuidamos, y lo dejamos abierto a las influencias del mundo.

"Sed sobrios, y velad; porque vuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar;" 1 Pedro 5:8. El verbo guardar que se utiliza en este verso, da la idea de vigilar, custodiar, poner a salvo. Porque hay un inminente peligro al asecho. ¿Estamos cuidando nuestro corazón? ¿Añadimos a él cosas que aumenten su valor?

Somos administradores de nuestro corazón, y tenemos el deber de resguardarlo, pulirlo, alimentarlo con la palabra de Dios para fortalecerlo, colocarlo en manos de Dios cada día para perfeccionarlo.

- Del corazón mana la vida – “Porque de él mana la vida.”.

La intensa atención nuestra hacia nuestro corazón, se traduce en una vida recta. Debemos guardar nuestra persona total. Eso inicia en el corazón. Todos los asuntos de nuestra vida se ven afectados positiva o negativamente por lo que hay en nuestro corazón.

"El hombre bueno, del buen tesoro de su corazón saca lo bueno; y el hombre malo, del mal tesoro de su corazón saca lo malo; porque de la abundancia del corazón habla la boca." Lucas 6:45.

El hombre necesita más que rehabilitación, necesita regeneración. No necesita una simple rehabilitación de su conducta "externa", el hombre necesita una transformación "interna" total que cambien sus acciones externas. El hombre está en necesidad de una regeneración total y completa por medio de la obra del Espíritu Santo y a menos que esto ocurra, nunca podrá agradar a Dios y obedecerle.

Dios nos ha dejado una lista de cosas que nos ayudaran a ver y mantener clara la condición de nuestro corazón. Esta lista está diseñada para que podamos ser guiados "constantemente", "día a día" toda nuestra vida. Si prestamos atención a nuestra vida, sabremos que nuestro corazón se mantiene limpio y que de allí sale la Palabra de Dios que es VIDA y MEDICINA para TODO el cuerpo.

"Aparta de ti la perversidad de la boca, Y aleja de ti la iniquidad de los labios. Tus ojos miren lo recto, Y diríjanse tus párpados hacia lo que tienes delante. Examina la senda de tus pies, Y todos tus caminos sean rectos. No te desvíes a la derecha ni a la izquierda; Aparta tu pie del mal." Proverbios 4:24-27

- Aparta de ti la perversidad de la boca, Y aleja de ti la iniquidad de los labios.

- Tus ojos miren lo recto, Y diríjanse tus párpados hacia lo que tienes delante.

- Examina la senda de tus pies, Y todos tus caminos sean rectos.

- No te desvíes a la derecha ni a la izquierda; Aparta tu pie del mal.

(Explicación del Dueño y el mayordomo con esta lista de tareas).

Conclusión:

No permitamos que nuestro orgullo, conocimiento, experiencia, o cualquier otra cosa, se interponga para humillarnos a Dios, reconociendo que le necesitamos cada día más, cuidemos (guardemos) nuestro corazón cada día, teniendo un encuentro diario con nuestro Padre y sacando las impurezas que tengamos en nuestros corazones.

¿Cuál es el estado de tu corazón?

¿Se ajusta a los criterios dados por la Palabra de Dios?

Informe realizado por:

Eliezer Fernández