“Yo comía cuando había comida. Cuando salí de Costa de Marfil y comencé a ganar dinero, me di cuenta que la gente comía 3 veces por día”

...

MI EXPERIENCIA CON SENOSAYUDA.

Gracias a Dios, en mi familia no hemos tenido ningún tipo de casos de cáncer. SenosAyuda, así como su nombre lo indica, se dedica especialmente a brindarle ayuda a las mujeres con cáncer de seno, mastólogos, psicólogos, banco de pelucas, entre otras cosas. Mi labor allí fue netamente de atención al cliente, ya sea por contacto telefónico o contacto visual. Fue una experiencia bastante extraña, con sentimientos encontrados, ya que desde un primer momento el clima que se vive en la oficina es bastante pesado, tenso, por todas las personas que van allí, que ven sus vidas pasar por delante de ellos, además tuve una experiencia en el banco de pelucas con una señora que estaba empezando su tratamiento de quimioterapia y su única preocupación era de como se le iba a caer el cabello, yo solo le decía que lo único bueno en su situación era que no tenía que gastar más dinero en tintes ni en peluqueros, ella se rio, pero yo solo quería llorar. Qué bueno que otros tengan el valor de ayudar a estas personas en esta difícil situación, porque yo simplemente no podría.

MI EXPERIENCIA CON FUNDACIÓN TECHO.

A la par con SenosAyuda estuve trabajando indirectamente con la Fundacion Techo, esta fundación se dedica a ayudar a personas en situación de indigencia, algo parecido como la Fundación UMA. Mi labor en esta fundación se basó específicamente a la recolección de dinero y ropa para la gente necesitada. En mi recolección de dinero fui a la oficina de mi mamá, y a pesar de la situación tan crítica que tenemos como país la gente estuvo dispuesta a dar algo por el otro, aunque fuese solo dos bolívares, es bastante gratificante saber que todavía nos preocupamos por el prójimo, en cuanto a la recolección de ropa, aunque no pude dar mucho sé que estas personas se alegraran bastante porque no hay nada mejor que recibir ropa nueva, te sientes poderoso y sé que ellos no serán la excepción.

MI EXPERIENCIA CON LOS NIÑOS DEL JENARO AGUIRRE Y CON LA AMIGAS DEL JENARO.

Durante toda mi vida de bachiller, fui a casi todos los sábados dedicados a los del Jenaro Aguirre, en primer año, la primera vez que fui, éramos como unas 10 personas con 40 niñitos, y me recuerdo que cuando le entregamos la actividad, ellos me dijeron, “Maestra esta actividad la hicimos la vez pasada”, pero con el pasar del tiempo y con la ayuda de Cristina, hicimos que estos niños soñaran con venir al Cristo Rey. Fue una experiencia inolvidable, ellos me hicieron ver la vida de una manera mucho más sencilla, dejando de lado muchas banalidades, me hicieron aprender a soñar en grande y me hicieron reflexionar con sus vidas tan difíciles a una edad tan temprana, con situaciones que viven y lo más probable es que nunca viviré algo parecido, son unos niños excepcionales y ayudarlos con la operación kilo es lo de menos que puedo hacer. Entre mis días favoritos, con los niños del Jenaro esta, el día de la fiesta de despedida que le hicimos en 3er año, le hicimos un rally y le llevamos tortas, helado y mucha comida, ellos estaban súper emocionados, sus caritas eran para tomarles una foto, ponerlas en un álbum y llamarlo “La Felicidad”. También entre mis días favoritos esta cuando hicimos el árbol de los deseos de Navidad en el patio, leer muchos de sus deseos me hicieron reír y desearlo con ellos, pero otros me partieron el corazón, pues muchos pedían cambiar sus estilos de vida y en realidad lo único que podía decir era que buena suerte tuvieron ellos, pues María Luisa llego al barrio 24 de marzo, para ayudarlos a hacer cumplir esos deseo, y darle gracias a Dios por haberme dado la vida me dio.