AMÉRICA LATINA: LA MAS POBRE Y OLVIDADA, LA MAS RICA Y CODICIADA

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Por otra parte, el sociólogo Gino Germani citado por Fernández Moreno, sostiene que América latina es vista como una unidad, no solo en términos culturales y sociales, si no también – y, sobre todo- en términos políticos. (pág. 8). Esto, debido a que América Latina es un a tierra de gran potencial económico que puede satisfacer las necesidades de los más interesados acumuladores de poder.

Por su parte, Gabriel García Márquez en su discurso ‘‘La Soledad de América Latina’’ destaca ese particular término, en el que se encuentra envuelto este continente aun después de su descubrimiento y colonización. En el mismo, se expresa el sufrimiento y abandono que ha sufrido el nuevo mundo, a pesar de la supuesta unión que existe entre aquellos que llegaron para cambiar su forma de permanecer. En este sentido, García Márquez expone ‘‘como si no fuera posible otro destino que vivir a merced de los dos grandes dueños del mundo’’ (pag.3). Por esto estamos solos, luchando día a día contra quienes, llegaron a expropiar hasta nuestras vidas y apoderarse de todo lo que nos pertenece por naturaleza, dejándonos en el más inmenso desierto, solos entre la multitud. En este sentido, apunta el autor que, ante tanta ignorancia y abandono hacia nuestro continente, la poesía es una salida imaginaria, en donde se ponen de manifiesto los sentimientos más profundos, que buscan de quienes algún día les invadieron el corazón, dejándolo vacío y roto; el apoyo para el renacimiento de un continente olvidado.

Cabe destacar, que hay autores que se contraponen a esto, tal es el caso de Armando José Sequera (2009) quien expone su desacuerdo en llamarse Latinoamericano; ya que, según él, “Latinoamérica no incluye a los millones de hablantes de las múltiples culturas indígenas que ya existían en el continente, antes de la llegada de los europeos, pues ninguna de sus lenguas tiene su origen en el latín’’. Para éste autor, todos los ciudadanos que habitan de polo a polo en este continente deberían usar un solo gentilicio el de ‘‘americanos’’, más, sin embargo, ese gentilicio es solo para designar a todo aquel nacido en Estados Unidos, y se ha vuelto costumbre, pues ya nadie, hace mención a dicha circunstancia.

En conclusión, sostengo, que si bien hemos sido desplazados por la gran ciudad anglosajona que llaman, a pesar de estar en el mismo continente dividido, si poseemos una identidad propia, que se puede poner delante de otras y triunfar como si fuese un concurso de belleza universal, porque así como se han impuesto sobre los latinoamericanos, algún día seremos nosotros quienes estaremos al mando, hablando no solo en cuestiones de poder, sino más bien por medio de grandes escritos, donde se den a relucir los más pequeños sueños y aspiraciones de quienes aman su tierra.