CINCUENTA AÑOS DEL PENSAMIENTO DE LA CEPAL

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En el análisis económico cepalino el estructuralismo es en esencia un enfoque orientado por la búsqueda de relaciones históricas que se presta al método inductivo para el análisis histórico comparativo de la CEPAL, es decir que implica un método de producción del conocimiento atento al comportamiento de los agentes sociales y la trayectoria de las instituciones ( proceso inductivo ). Así el pensamiento cepalino tiene la capacidad de adaptarse a la evolución de los acontecimientos sin perder coherencia ni consistencia analítica.

La relación entre periferia y centro que tuvo un doble papel analítico refleja la fértil integración ente el método inductivo y la abstracción teórica de Prebisch. Esta relación afirmó que la estructura determinaba un patrón de inserción en la economía mundial como “periferia” con demanda internacional poco dinámica en producción de bienes y servicios y con una demanda interna en expansión de importación de bienes y servicios cuyos patrones de consumo y tecnologías adecuadas para el centro serían inadecuadas para la disponibilidad de recursos y nivel de ingresos de la periferia. En segundo lugar dicha relación entre periferia y centro derivó en la idea de el proceso de crecimiento, empleo y distribución del ingreso en la periferia sería distinto del ocurrido en los países centrales ya que las economías periféricas tienen una estructura poco diversificada y tecnológicamente heterogénea en contraste con los países centrales.

Para Prebisch una de las fallas más grandes de la teoría económica en general era el falso sentido de universalidad donde se confundía el conocimiento reflexivo de lo ajeno con una sujeción mental a las ideas ajenas (CEPAL, 1951ª, p. 4). Furtado describe en su libro “Desarrollo y subdesarrollo” que el subdesarrollo requiere teorización autónoma y sin esta muchos economistas han explicado la situación de las economías subdesarrolladas a partir de la analogía con la experiencia de las economías desarrolladas.

Inauguración y los años cincuenta: legitimando y orientando la industrialización.

Luego de la segunda guerra mundial las economías latinoamericanas se encontraban en proceso de industrialización y urbanización donde se evidenciaba crecimiento económico y expansión de las importaciones lo que fortalecía la ideología industrializante y liberal con la creencia de que las exportaciones tradicionales volverían a la normalidad en la posguerra bajo la división del trabajo con las ventajas comparativas ricardinas y las relativas de factores.

E n cuanto a la ideología liberal existía un vacío teórico y escepticismo respecto a la teoría económica, por lo cual se generó una incoherencia entre la historia económica y social y la construcción de su contrapartida en el plano ideológico y analítico. La teoría cepalina sería la versión regional latinoamericana de una nueva disciplina ideológicamente hegemónica, y heterodoxa Keynesiana, es decir la versión regional de la teoría del desarrollo. La ideología cepalina se equiparaba perfectamente con los proyectos políticos de diversos gobiernos, su mensaje se fundamentaba en la teoría del desarrollo (teorización independiente para los países subdesarrollados) .

La cosecha inaugural y sus extensiones.

La CEPAL surge por las quejas latinoamericanas por habérseles excluido del Plan Marshall y por la falta de acceso a los “dólares escasos” en 1948 bajo una decisión aprobada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 1947. Posteriormente Prebisch publica el “Manifiesto latinoamericano” donde trabajaba el desarrollo económico de América latina y sus principales problemas., más adelante en 1950 redactó los 5 primeros capítulos del estudio económico de América latina que luego llevaría el nombre de “Problemas teóricos y prácticos del crecimiento económico”.

Estos documentos contendrían las bases y referencias para los desarrollistas latinoamericanos, ya que en primer lugar sostiene que la industrialización espontánea en curso representaba la posibilidad de que la región subdesarrollada latinoamericana tomara parte de los frutos del progreso técnico mundial, en segundo lugar presenta elementos de la matriz analítica de los que se fundamenta el pensamiento cepalino como lo son la inserción internacional de las economías periféricas y vulnerabilidad externa consiguiente o las condiciones problemáticas y de tendencias perversas con que se procesa el crecimiento en la periferia latinoamericana . Por último realiza una primera incursión en el tema de la intervención estatal.

- La inserción internacional: Dentro del análisis cepalino usa el contraste entre el modo en que el crecimiento, el progreso técnico y el comercio internacional se dan en las estructuras económicas y sociales de los países periféricos y el modo en que se dan en los países céntricos.

Cuando los argumentos se acompañaron de la tesis de la tendencia al deterioro de los términos de intercambio que se oponía al postulado liberal de las virtudes del libre comercio internacional fue que tomaron fuerza para la CEPAL; la tesis tenía dos versiones estructuralistas y centradas en la idea de las ventajas comparativas dinámicas de la producción industrial o de las desventajas comparativas dinámicas de la especialización en bienes primarios. En el manifiesto latinoamericano se le vinculaba a los ciclos y la forma en que la estructura subdesarrollada de producción y empleo impedía que la periferia tuviera parte en los frutos de su progreso técnico en contraposición a lo que ocurría en el centro donde los sindicatos organizados y una estructura productiva concentrada impedían la caída nominal de precios de bienes industriales durante la “baja cíclica”.

La segunda versión contemplaba la tendencia al deterioro por el exceso de mano de obra en la agricultura subdesarrollada de las periferias la cual no era transferible a los países céntricos y cuyo eventual empleo en actividades exportadoras llevaría a la expansión de la oferta que bajaría los precios internacionales conduciendo a menores valores pese a los mayores volúmenes. Posteriormente se sostenía que mientras el proceso de industrialización no concluyera tendría siempre una tendencia al desequilibrio de la balanza de pagos ya que el proceso sustitutivo imponía exigencias de la nueva estructura y del crecimiento del ingreso generado, por lo que se renovaría continuamente el problema de insuficiencia de divisas.

La tendencia al desequilibrio genera varios planteamientos cepalinos de la época como lo son:

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