Psicología Social "Solomon Asch" LA CONFORMIDAD
Enviado por Stella • 15 de Marzo de 2018 • 2.188 Palabras (9 Páginas) • 455 Visitas
...
Ante las primeras presentaciones de los pares de tarjetas, las respuestas de los cómplices son correctas. Pero, hacia la tercera presentación aproximadamente, el sujeto que responde primero (cómplice del experimentador) emite una respuesta errónea. También lo hace el segundo sujeto, el tercero y así sucesivamente.
Resultados
El experimento se repitió con 123 distintos participantes. Se encontró que aunque en circunstancias normales los participantes daban una respuesta errónea el (1%) de las veces, la presencia de la presión de grupo causaba que los participantes se dejaran llevar por la opción incorrecta el (36.8%) de las veces. Aunque la mayoría de los sujetos contestaron acertadamente, muchos demostraron un mal estar extremo y una proporción elevada de ellos (32%) se conformó con el punto de vista mayoritario de los otros cuando había al menos tres cómplices presentes, incluso aunque la mayoría dijera que dos líneas con varios centímetros de longitud de diferencia eran iguales.
El estudio de Asch mostró un alto porcentaje de conformidad en las respuestas de los participantes:
Uno de cada tres participantes se conformaron, es decir, modificaron su respuesta como consecuencia de la presión que ejercieron las respuestas del grupo sobre su propia convicción.
Para estar en sintonía con el resto del grupo, el sujeto modifica su respuesta aunque la considere correcta. Como puede observarse, la tarea es tan sencilla y la respuesta tan obvia que deja en evidencia la conformidad de los sujetos. Si se tratara de un problema más ambiguo, posiblemente el acuerdo en las respuestas incorrectas podría atribuirse a otros factores. Por ejemplo, a que el sujeto dude o se confunda debido a la dificultad de la respuesta. Ahora bien, si esto ocurre en situaciones cuya respuesta es tan clara, qué ocurre cuando los problemas son: menos claros, y menos obvios. ¿Más difíciles? Los problemas que las personas enfrentan en la vida cotidiana son mucho más complejos que el planteado en el experimento original de Asch. Diferentes trabajos continuaron en esa dirección introduciendo variaciones.
Esos primeros trabajos fueron realizados en el contexto de la posguerra, una vez finalizada la Segunda Guerra Mundial (1939-1945).
La preocupación de muchos científicos, consecuentes con ese momento histórico, se dirigía al estudio de los fenómenos sociales y a las formas que adopta la presión social sobre el comportamiento, los valores y las creencias de los individuos.
La finalidad de Asch era, en su momento, mostrar cómo los sujetos actúan de manera autónoma y sean capaces de defender sus puntos de vista, sus valores y sus convicciones, pero su investigación reveló que no siempre es así. Y muchos estudios posteriores confirmaron estos resultados.
La conformidad en la vida real: Cuestiones Importantes
De los estudios se puede inferir que, si bien la cantidad de participantes incrementa la influencia ejercida, existe otro factor importante: La unanimidad.
Es decir que si los participantes están de acuerdo, el consenso ente ellos, más que la cantidad, es lo que determina la conformidad. Por ejemplo, si la persona percibe que otro sujeto se opone a la mayoría, es más probable que esta persona no actúe conforme a la mayoría que si encuentra una opinión adoptada por todo el grupo en forma unánime.
La conformidad se incrementa de acuerdo con la dificultad de la tarea, y también cuando los participantes consideran que existe una respuesta objetivamente correcta. Al contrario, cuando lo que se pide es una opinión o una preferencia, la conformidad disminuye. El psicólogo estadounidense Richard Crutchfield se apoyó en el experimento de Asch para estudiar la conformidad. Sin utilizar cómplices, analizó situaciones en las que los participantes no tenían contacto cara a cara. Pudo observar que la conformidad disminuye en las comunicaciones indirectas y anónimas, porque en ellas la presión sobre los sujetos es menor.
¿LO QUE DICEN HACEN?
“En 1969, los investigadores Milgram, Bickman y Berkowitz colocaron diez o quince cómplices ante un edificio de una calle muy concurrida de Nueva York. Cuando el experimentador daba una señal, ellos se paraban a mirar durante un minuto hacia una ventana de un sexto piso de un edificio. Se filmó el comportamiento de imitación de 1.424 transeúntes. Se observó que sólo el 4% de esos transeúntes se detenía y miraba, aunque el 40% miraba hacia lo alto sin detenerse. Esta tasa de imitación aumentaba siempre al aumentar el número de cómplices.”
Influencia pública e influencia privada
Algunas justificaciones que dieron los sujetos después de participar de la experiencia de Asch, fueron las siguientes:
- No querían “arruinar” el experimento dando una respuesta diferente de la de los demás.
- Querían agradar al experimentador, dando una buena imagen y cumpliendo con sus expectativas.
- Algunos dudaban de su percepción adecuada, creyendo que, tal vez, desde su posición se veía distinto o su vista podía estar cansada.
- Querían ser iguales a los demás, no querían parecerles “distintos”, “inferiores” o “que los tomaran por tontos”.
En algunos casos, los sujetos dudaron realmente de la respuesta; en otros admitían que había una diferencia entre las respuestas que dieron en público y lo que realmente creían en privado. En general, en los trabajos sobre conformidad se pueden observar cuatro grandes patrones de influencia:
- - Interiorización. El sujeto realiza un cambio tanto en el plano público como en el privado.
- Complacencia. El cambio se produce en el plano público pero no en el privado.
- Conversión. El sujeto realiza un cambio en el plano privado y no se manifiesta en el plano público.
- Independencia. No se produce un cambio en ninguno de los dos planos.
¿Por qué nos conformamos?
En algunas circunstancias, las personas tienden a adoptar una posición conformista. Existen determinadas condiciones que facilitan la conformidad, y que se agrupan en dos grandes tipos:
Conformidad
...