Critica a ley de Acoso Laboral

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Como él, nueve personas más han sido, según ellas, víctimas de hostigamiento durante 9 años. La víctima se encuentra en tratamiento psiquiátrico e interpuso una demanda por matoneo en la gerencia (acoso laboral) amparándose en la Ley 1010 de 2006. No ha renunciado a la empresa.

Este gerente de producción se ha referido a la empresa como una Fábrica de víctimas bien logradas. Ante la pregunta del abogado sobre la razón por la cual soportó un posible acoso por 10 años el Gerente responde que por resguardar su reputación, por miedo a renunciar y no conseguir un empleo al mismo nivel del actual, porque ello significaba que ganaba la empresa, porque como se ganaba 40 millones de pesos, su esposa lo amenazó con abandonarlo si renunciaba y sus hijos también dejaban entrever su desaprobación ante la sola idea de la renuncia.

¿Puede constituirse este en un caso de acoso? Respondan la pregunta y analicen el caso teniendo en cuenta las fases del acoso y las modalidades planteadas por la ley 1010 de 2006.

Si puede constituirse como un caso de acoso.

Análisis teniendo en cuenta las fases:

- Seducción:

“El nuevo presidente de la Compañía le plantea el reto al Gerente de Producción de realizar un evento al que asistirían el Gobernador y el Alcalde, y en el que todo debía parecer impecable, desde la organización del espacio, hasta la exposición. Una vez iniciado el evento, el Presidente no solo no presta atención a la presentación del gerente, sino que una vez finalizado, “pasa revista” según sus propios términos.”

En esta fase el acosador aún no ha manifestado su gran potencial violento. Como estrategia para conocer las grietas (debilidades) de la futura víctima, el acosador presta atención a cada detalle de su víctima “pasa revista” según sus propios términos aprovechando que ocupa un cargo superior. Se prepara para atacar y arrebatarle la excelente reputación de la que goza el Gerente entre todos los trabajadores y demás gerentes por su conocimiento y capacidad.

- Conflicto:

“Le llama la atención públicamente porque, según él, la organización del evento era un desastre…recibió este llamado de atención como un acto injusto e inexplicable”.

Se evidencia fricciones personales de parte del presidente hacia el gerente de producción. Inicia una estrategia del presidente para oprimir al gerente de producción, produciendo de esta manera hostigamiento. El conflicto puntual no se resuelve, se convierte en crónico y se pasa al acoso.

- Acoso:

“Pasado un mes, el gerente comenzó a ser invitado a las reuniones en las que un equipo de “Gestión Humana” (las comillas son una ironía) recién conformado por el Presidente, y en cabeza de una psicóloga de la empresa, sometían a juicio a la persona de turno, es decir, a cualquier trabajador o trabajadora a la que consideraban debían llamarle la atención. El gerente describe este espacio como un dispositivo interno para el avergonzamiento, la humillación y la destrucción humana. Su temor era que en cualquier momento podía ser él mismo llevado al banquillo.”.

El victimario expone actitudes molestas para la víctima. Se aprovecha del conocimiento de sus debilidades para atacar el punto más débil del gerente y “castigarlo” debido a que este no está de acuerdo con las medidas aplicadas por el presidente. Además de aprovecha la importancia de su cargo y utiliza técnicas de manipulación sobre el entorno y la víctima para conseguir apoyo “aliados directos” y pone algunos miembros de la empresa de su parte.

El acoso laboral puede darse bajo diferentes tipos de modalidades, algunas de ellas son evidentes en el anterior caso, las cuales son:

-Maltrato laboral: Se manifiesta violencia contra la integridad moral del trabajador con la atención pública que le realiza el Presidente de la organización, cuando se realiza el evento acompañado por el Gobernador y el Alcalde de la región; al expresarle verbalmente que dicho evento era un desastre. Se le menoscaba la autoestima por completo, ya que su desempeño en la organización había sido implacable y esta vez los demás trabajadores no lo reconocerían por su buen rendimiento. Además, el equipo de “Gestión Humana”, también incurrió en el maltrato laboral, ya que el trabajador es sometido a un rígido juicio donde también se le expresa su mal desempeño con un cliente y esto provoca una disminución de confianza en sí mismo.

-Persecución laboral: Al realizar reiterativos llamados de atención al trabajador, por el desastroso evento y el cliente insatisfecho se presenta persecución laboral. Además, el Presidente actúa con arbitrariedad, ya que lo reprende por el simple hecho de que a su voluntad o a su parecer, el evento fue desastroso. Es decir, que a pesar de que el trabajador tuviese una buena presentación y se haya esmerado por un buen evento, si el Presidente opinaba algo, debía ser de tal modo.

-Inequidad laboral: Las funciones que el Presidente le asignó al trabajador para que llevara a cabo un buen evento dentro de la empresa; incluyendo la organización del espacio y la exposición, no son propias del Gerente de Producción. Por el contrario, esta asignación de funciones menosprecia al trabajador.

- Respuesta del entorno

“A los pocos meses de estar asistiendo a este espacio llega el reclamo de un cliente insatisfecho del cual es culpado el gerente lo cual da pie a que sea invitado al grupo en cuestión y sometido a juicio. El procedimiento es calculado, arriba el presidente, abajo el procesado y 30 observadores. Estas reuniones parecían tener un libreto premeditado, escrito por la psicóloga y con el que entrenaba al Presidente”

No es posible determinar cuál es la respuesta del entorno con la información disponible, sin embargo, en el “juicio” existe una participación de los demás miembros de la empresa, quizás como testigos mudos, sea porque tiene miedo, por que disfrutan el “espectáculo” o por la fuerte relación de dependencia que tiene del presidente.

- Intervención de la empresa

“Durante una de sus hospitalizaciones, la cual tardó 25 días (más que una cirugía de corazón abierto), ninguna persona de la organización preguntó por él. La indiferencia absoluta fue la orden de la Presidencia y hacía parte del proceso de destrucción del yo institucional”