Desarrollo cognoscitivo en la edad adulta tardía.
Enviado por Mikki • 6 de Abril de 2018 • 3.479 Palabras (14 Páginas) • 593 Visitas
...
Papalia (2005) cita a Baltes y sus colegas quienes propusieron un modelo de procesamiento dual, el cual busca medir los aspectos de la inteligencia que siguen avanzando y aquellos que siguen un curso decadente. En este modelo se mencionan dos modelos: La mecánica de la inteligencia que consta de las funciones de procesamiento de la información y solución de problemas que son independientes de cualquier situación particular, este modelo tiene una base fisiológica lo que lleva al deterioro que aumenta con la edad. Y por otro lado se encuentra la pragmática de la inteligencia la cual incluye áreas del conocimiento práctico, la aplicación de habilidades y el conocimiento acumulado, experiencia especializada, productividad profesional y sabiduría.
Según Papalia (2005), se cree que el motivo principal de los cambios en las capacidades cognoscitivas y la eficiencia del proceso de información es una consecuencia de los procesos funcionales cada vez más lentos que se presentan en el sistema nervioso central, según la medición del tiempo de reacción. Según Craik y Salthouse (2000) citado por Papalia (2005) afirman que las habilidades usadas para los procesos de aprendizaje y la adquisición de nuevas habilidades tienden a disminuir considerablemente en los ancianos. Pero ciertas capacidades como el razonamiento, las capacidades espaciales, y la memoria no declinan con tanta rapidez como otros procesos (Verhaeghen y Salthouse, 1997, citado por Papalia, 2005).
La evidencia a favor del papel de la velocidad del procesamiento en el desempeño cognoscitivo al igual que la evidencia de la declinación cognoscitiva proviene de estudios transversales, los cuales pueden llegar a confundir la cohorte con la edad. Es probable que los adultos más jóvenes hayan tenido estilos de vida diferentes y un desempeño mejor que los ancianos porque gozaban de buena salud, más información de los medios, tenían empleos que requerían más de procesos mentales que físicos y además porque poseían más y mayor experiencia en presentación de las pruebas realizadas (Papalia, 2005).
En contraste y según Papalia (2005), los estudios longitudinales no tienden a mostrar las declinaciones marcadas en el desempeño cognoscitivo que se reportan en los estudios transversales sin embargo los estudios longitudinales favorecen a una muestra de ancianos en base a los efectos de desgaste y la práctica.
Para resolver las discrepancias entre los hallazgos de los dos estudios se diseñó un estudio que midió las relaciones entre edad, velocidad de procesamiento y cognición. La velocidad del procesamiento explicaba la mayoría de las diferencias transversales de edad en las capacidades cognoscitivas, pero esos efectos fueron reducidos o eliminados al controlar las diferencias individuales en la declinación longitudinal. Por lo tanto según Sliwinski y Buschke (1999) citado por Papalia (2005) afirman que “los cambios en la velocidad relacionados con la edad no son un determinante tan fuerte de la declinación intrapersona como sugieren los análisis transversales”
Según Salthouse, Fristoe, Mcguthry y Hambrick (1998) citado por Papalia (2005), una de las capacidades que se hace más lenta con la edad es la facilidad para cambiar de una tarea o función a otra.
El propósito de la inteligencia no es presentar pruebas sino enfrentar los desafíos de la vida diaria (Papalia, 2005). La investigación ha encontrado mostrado una relación entre inteligencia fluida y algunas habilidades prácticas que tienden a declinar con la edad, como la habilidad para leer un mapa o para realizar tareas cotidianas (Diehl, Willis y Schaie, 1994; Schaie, 1996ª; Willis y Schaie, 1986ª, Citado por Papalia, 2005).
Al paso que el adulto envejece, una de las pruebas más importantes de la competencia cognoscitiva es la habilidad para vivir de manera independiente, según la medición de siete actividades instrumentales de la vida diaria (AIVD), las cuales son: Manejo de finanzas, compras para necesidades, usar el teléfono, obtener transporte, preparar comidas, tomar medicamentos y realizar las tareas domésticas (Papalia, 2005).
La inteligencia fluida y en menor caso explicaron más de la mitad de la varianza en el desempeño obtenido en pruebas realizadas por Schaie y los antecedentes educativos influyeron en los resultados a través de sus efectos en la capacidad cognoscitiva (Papalia, 2005).
Aunque las AIVD, que dependen en gran medida de las habilidades de procesamiento de la información, por lo general declinan con la edad, eso no es necesariamente cierto en el caso de la habilidad para resolver problemas interpersonales, los cuales tienden a tener un fuerte trasfondo emocional y soluciones que son menos predeterminadas (Papalia, 2005)
La plasticidad es un rasgo clave del enfoque del desarrollo del ciclo vital de Baltes, y él y sus colegas han estado a la vanguardia de la investigación sobre los efectos del entrenamiento. En un estudio basado en el ADEPT (AdultDevelopment and EnrichmentProyect) los adultos con una edad promedio de 70 años que recibieron entrenamiento en identificación de figuras una medida de inteligencia fluida, mejoraron más que un grupo de control que no recibió entrenamiento. U tercer grupo que trabajo con los mismos materiales y problemas de entrenamiento sin instrucción formal también se desempeñó mejor que el grupo de control y este grupo de auto enseñanza mantuvo mejor sus ganancias después de un mes (Blackburn, Papalia-Finlay, Foye y Serlin, 1988).
Estudios realizados por Schaie (1994,1996b) citado por Papalia (2005) demuestran que el deterioro cognoscitivo a menudo se relaciona con el desuso.
En la mayoría de los casos la memoria es considerada una señal de envejecimiento.
La memoria a corto plazo, es un tipo de memoria y una de sus modalidades es la memoria sensorial y la memoria de trabajo, estas presentan algunos cambios en la adultez tardía. En esta edad la memoria sensorial mantiene su eficiencia, incluso a lo largo de toda la vida, por otra parte la memoria de trabajo disminuye su capacidad paulatinamente después de los 45 años de edad (Swanson, 1999, Citado por Papalia, 2005).
Por su parte, en la memoria de trabajo le es más difícil la realización simultánea de tareas, teniendo en cuenta la complejidad de dicha tarea se evidencia poco declive cuando se requiere de repetición o repaso, en cambio aquellas que requieren de una reorganización o elaboración muestran una mayor declinación (Craik y Jennings, 1992, Citado por Papalia, 2005).
Haciendo referencia a la memoria a largo plazo, se describen 3 componentes principales: la memoria episódica,
...