El estabelecimiento de familias estadunidenses en la región de Texas comienza con el tratado de Adams- Onís

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Muchos colonizadores estadunidenses en Texas no estaban de acuerdo con las acciones del gobierno mexicano dado que había mucha corrupción y crimen en Texas, y dado que ocurrían muchas levantas por parte de estados en todo México, los colonizadores se levantaron en armas en contra del gobierno mexicano. El levantamiento del 1832 como resulta hizo que el gobierno de México permita el ingreso de más estadunidenses a Texas, el uso del inglés como idioma oficial del gobierno de Texas, y se les da más representación en el congreso del estado. Aunque las demandas de los colonos texanos se cumplieron, Austin siguió estando descontentó ya que Texas y Coahuila seguían siendo una entidad estatal. Austin aspiraba que Texas fuera una entidad autónoma para poder administrar mejor los asuntos locales y adquirir más control. Eventualmente los colonos Texas se revelaron en contra de México, solo que esta vez no estaban buscando conseguir más derechos o representación, esta vez buscan su independencia, la cual la adquirieron con la condición de que no se prestaran a ser anexados a Estados Unidos. Sin embargo, después de menos de diez años de vida independiente, la republica de Texas fue anexada por los Estados Unidos. consecuentemente la cuestión de la frontera entre México y Estados Unidos fue la determinante de la guerra entre México y Estados Unidos, en la que México acabo perdiendo más de la mitad de su territorio.

La pérdida de Texas era inevitable. Texas era un territorio remoto con pocos habitantes mexicanos que se encontraba en el camino de la expansión de Estados Unidos. Al permitirle la entrada a los estadunidenses, es cuando realmente México le regalo a Texas a los Estados Unidos, dado que en Estados Unidos se tiene otra concepción sobre la tierra. En Estados Unidos la tierra se ve como un objeto, algo que se puede comprar con mucha facilidad, y por eso mismo la expansión americana se dio atreves de la compra de territorios como la Florida, Luisiana, Alaska y muchos más. A contraste aquí en México se tiene otra concepción sobre la tierra, se ve como un patrimonio, algo heredado que no está a la venta y por eso mismo México no acepto el primer intento de la compra de Texas. La crítica más grande acerca de Texas como territorio mexicano, es que como se permitió que haya diez estadunidenses por cada mexicano, en ese tiempo el gobierno de la ciudad de México debió implementar políticas para hacer que mexicanos migren a Texas. Sin embargo, las condiciones en Texas no eran muy favorables ni atractivas. No obstante, ajora que las condiciones en Texas si son atractivas, Texas está poblada por mexicanos e irónicamente, no es de México.