“El poder es la capacidad de dirigir o impedir las acciones actuales o futuras de otros grupos e individuos”
Enviado por Christopher • 9 de Noviembre de 2017 • 3.137 Palabras (13 Páginas) • 600 Visitas
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Esto nos lleva a la segunda revolución que es la de la movilidad con la expansión del aumento en esas masas es por la que se da este segunda revolución. La tercera que refleja los cambios en la mentalidad, con estas revoluciones las grandes barreras que protegían a los poderosos ya no los protegen tanto como antes y están barreras ya son más fáciles de atacar.
“las revoluciones del más, de la movilidad y de la mentalidad están atacando el modelo de organización que de manera tan convincente habían propugnado Max Weber y sus seguidores en sociología, economía y dentro de otros campos, y los están atacando precisamente en los puntos de los que derivaba su fuerza. Las grandes organizaciones eran más eficientes porque funcionaban con costes menores, gracias a las economías de escala; hoy, sin embargo, recursos como las materias primas, la información, el talento humano y los clientes son más fáciles de obtener, y la distancia y la geografía ya no son factores de tanto peso como lo eran antes”.
Estas grandes organizaciones ahora se benefician de la autoridad, modernidad y sofisticación, los titulares los ocupan los pequeños recién llegados que se enfrentan a los grandes poderosos. A medida que estos disminuyen las ventajas del modelo de organización a gran escala, racional, coordinado y centralizado, aumentan las oportunidades para los micropoderes de abrirse camino empleando un modelo de éxito muy distinto.
El fin del monopolio supremo del uso de la Fuerza
Cuanto más han crecido actores pequeños en importancia y eficacia en la guerra moderna, más han ido erosionando uno de los principios fundamentales que regía la política y el poder durante los últimos siglos. Max Weber describe al Estado como una asociación que reivindica el monopolio del uso legítimo de la violencia.
En la actualidad ese monopolio del uso de la fuerza se ha desintegrado a múltiples niveles. Muchos gobiernos desde México y Venezuela hasta Pakistán y Filipinas han perdido el control de grandes aéreas de su territorio, que grupos armados utilizan como bases para actividades que apoyan y defienden lucrativas empresas criminales transfronterizas.
Incluso los grupos guerrilleros han cambiado antes el grupo buscaba expulsar a los invasores o a los colonizadores y ganar y restablecer su soberanía. Según los teóricos de la guerrilla, el apoyo popular era fundamental para su legitimidad en sus territorios de actuación. El Che Guevara escribió alguna vez “El guerrillero necesita toda la ayuda de la gente de la zona. Esta es una condición indispensable”. En los días de hoy la guerrilla traspasa cada vez más las fronteras: ya no depende del apoyo popular, por la sencilla razón de que ya no está vinculada a un territorio físico.
La convergencia entre el Estado moderno y el ejército moderno no fue solo una cuestión ideológica o filosofía política. También fue un asunto profundamente práctico, un reflejo de los costes y la tecnología de la guerra. Durante siglos, los instrumentos de violencia fueron intensificándose, desde el auge de las armas de fuego hasta los sistemas informáticos, pasando por la artillería pesada, los tanques y los aviones de combate, y todo ello aumento el coste y las necesidades logísticas indispensables para la eficacia militar.
Con la creación o evolución del Estado Moderno surge también la Globalización, la oleada de desapariciones de empresas conocidas y de marcas que una vez fueron muy apreciadas por los consumidores no significa que en muchos sectores industriales la concentración no sea tan elevada como siempre y, en algunos casos, mayor que nunca. Un ejemplo seria donde un estudio revelo que una sola empresa controlaba ciento cincuenta tipos distintos de productos de comida para animales, pero a través de diferentes marcas. Dos compañías controlan el 80 por ciento del mercado estadounidense de cerveza, otras dos dominan el 70 por ciento del sector de la pasta de dientes, y asi sucesivamente. La empresa italiana Luxottica, que posee no solo varias grandes cadenas de ópticas en Estados Unidos sino también muchas marcas de gafas que venden, tienen un virtual monopolio en ese sector. Esta es una de las empresas más ricas del mundo y ocupa el puesto número 74 en la lista de multimillonarios de Forbes, su dueño Leonardo del Vecchio.
El poder y el peligro de las grandes marcas
Muchas empresas y productos cuya fuerza y permanencia se daban por descontadas han desparecido de repente. Prestigiosas marcas del comercio, la banca, las aerolíneas e incluso la tecnología se convierten en recuerdos. Por otra parte algunas marcas mas no existían hasta hace apenas algunos años como Twitter fundada en 2006.
Cuando los consumidores nos acostumbramos a estos tipos de cambio que sufren las marcas, es más los consumidores han sido el factor decisivo e involuntario de este recambio, debido en parte al incremento del número y el impacto de los desastres de marca, incidentes que hacen que se tambaleen sus reputaciones y sus productos de tal forma que los precios de sus acciones llegan a desplomarse y sus consumidores se alejan.
Existen varias barreras de entrada al mundo empresarial son muy conocidas. El tamaño es un ejemplo, hace más difícil que las empresas pequeñas se enfrenten con éxito a las grandes. Las economías de escala permiten a las empresas grandes producir a un menor coste por unidad que a los rivales que producen en menor cantidad. Y al producir a menor coste, las más grandes pueden vender a menor precio y a mayor cantidad que las competidoras más pequeñas.
El papel de los gobiernos
Dentro de la historia muchos gobiernos limitaban la competencia con el fin de proteger a las empresas locales. Fijaban altos impuestos a las importaciones para así encarecerlas y hacer que los consumidores compraran los productos hechos en el país. También inhibían la competencia cuando daban ventajas especiales a algunas empresas, con el fin de canalizar sus inversiones hacia regiones o actividades específicas que en teoría promovían el desarrollo social. Pero todas están políticas cambiaron en la manera de concebir la promoción del desarrollo y el papel de la competencia entre empresas. En casi todo el mundo los gobiernos han vendido las empresas de propiedad estatal, han deshecho monopolios, han liberado sus regímenes comerciales y de inversión y han mejorado el entorno para los emprendedores. La evolución verdaderamente global hacia economías relativamente libres y abiertas, con amplios mercados de capitales y limites en la propiedad estatal, es una de los temas más debatibles
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