Ensayo sobre la discriminación laboral hacia la mujer

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El tercer factor es explicado con las siguientes palabras en el libro: “La aparente renuncia de los amerindios para participar en el mundo del hombre blanco a fines del silo XIX y la incapacidad de los negros de competir con los inmigrantes blancos en algunas regiones, aún en pleno empleo rural, llevó a la élite a revisar la premisa de que era factible desarrollarse con tal fuerza de trabajo.” Este pensamiento conllevó a la élite a pensar que la apatía, irresponsabilidad e insensibilidad de este estrato subordinado se debían a sus características innatas y congénitas. Así, la élite continuó la herencia colonial de discriminación racial, pero ahora sostenida por la ideología del capitalismo e imperialismo, junto a etapas de evolución, mezcladas con el Darwinismo Social propuesto por el ya mencionado Spencer para explicar la supervivencia del más blanco.

Estos tres factores siguen vigentes hoy en día en nuestra sociedad peruana, por ejemplo: un amigo se va de viaje a Miami, regresa y empieza a contar su experiencia: completo orden, limpieza y una sociedad completamente civilizada; terminando su historia con un “pero ya regresé a mi realidad” con un tono burlón o despectivo. Ahí está presente la brecha entre dos realidades diferentes y se recalca la predominancia de la modernización en ese país y su superioridad con respecto a la nuestra. En esto mismo relato, el amigo cuenta que besó a una “gringa”, quién es una persona de tez blanca, en respuesta al comentario su amigo le pregunta: “¿Para mejorar la raza?”, este es un clarísimo ejemplo de cómo sigue en nuestras mentes esa idea arraigada de jerarquía de razas y una concesión de ver a la raza blanca como superior. Esto no sólo es reflejado en el ejemplo que he mencionado, vean los diferentes programas de televisión nacional que consumimos: “La Paisana Jacinta”, “El Especial del Humor”, “Al Fondo Hay Sitio” o “Mi Amor, el Wachimán”, entre otras. Asimismo las películas peruanas tienden a hacer uso de denominaciones raciales como “cholo”, “pituco”, “negro”, “indio”, etc. Esto se ve demostrado en “Django”, “Asu Mare”, “La Gran Sangre: La película”, “El buen Pedro” y muchas más.

Este racismo que sigue existiendo en el Perú, es una de las causas que no nos deja forjar una identidad nacional. Se necesita unidad y compromiso para obtener a un pueblo con un mismo objetivo, de otra manera no podremos progresar como sociedad si seguimos con la misma mentalidad. Todos debemos compartir un sentimiento de nación, pero es simplemente imposible si seguimos consumiendo estas sutiles formas de racismo y continuamos empleando los arraigados términos que existen desde hace más de 200 años.

Referencias Bibliográficas

-La Herencia Colonial de América Latina, Stanley J. y Barbara H. (1970)

- http://red.pucp.edu.pe/wp-content/uploads/biblioteca/110301.pdf

- https://apreciacioness.blogspot.pe/2014/09/las-clases-sociales-en-el-peru.html

- https://sociohistoria.lamula.pe/2014/11/30/la-herencia-colonial/eddy/