“La ciudad de los fotógrafos”

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En este sentido, también es importante resaltar que los fotógrafos, de cierta forma, estimularon a los manifestantes y potenciaron su accionar. Como uno de ellos menciona, muchas veces las personas se ponían frente a la cámara para ser fotografiados, porque también querían formar parte de la historia y congelar ese momento para después recordarlo con nitidez. [pic 7]

Otro punto importante que se menciona en la película es la cámara como un arma. Muchos de los fotógrafos la llamaban así, ya que era la única forma en la que podían desempeñar un rol, contribuir en algo. Además, a través de una foto real, tomada desde dentro, donde “las papas queman”, como se menciona, era la única forma de crear cierta conciencia en las personas, en los que no estaban ahí y eso solo se podía lograr de esta forma, estando donde se tenía que estar.

Como se muestra en el documental, uno de los fotógrafos, comienza a crear un álbum con retratos de todos los detenidos desaparecidos y se da cuenta de que no se posee registro fotográfico de más de la mitad de ellos. A raíz de esta situación dice: “no podía ser que estuvieran doblemente desaparecidos”. Y así es como se dedica a la tarea de reunir las fotos de cada una de estas personas, para así darles un lugar en la historia, para que así no sean olvidadas ni desaparecidas una vez más.

También es interesante mencionar el breve período en que la fotografía fue censurada dentro de los medios de comunicación. Lo que más me llamó la atención es que se dejaba el espacio para la foto, con su correspondiente pie de foto, sin embargo, ésta no aparecía y, en su defecto, aparecía un mensaje que decía: “censurada”, lo que de cierta forma permitía imaginarse una fotografía. A pesar de este hecho, los periodistas fotográficos siguieron ejerciendo su trabajo, asistiendo a las protestas y haciendo fotografías, lo sentían como una necesidad y un deber para con la sociedad. Es por esto, que al ser censurada la fotografía, los fotógrafos comenzaron a organizar exposiciones dentro de las marchas con el fin de dar a conocer su trabajo y seguir creando conciencia e informando a la sociedad.

Un tema muy importante que se menciona casi al final del documental son los valores de los fotógrafos y el límite que existe también, dentro de cada uno de ellos. Uno de los entrevistados señala varios puntos importantes para descifrar esto como: la adrenalina, la necesidad de violencia, la pérdida de la capacidad de asombro y el hecho de fotografiar el dolor ajeno. Inevitablemente, el estar expuesto a este tipo de violencia hace que los fotógrafos se acostumbren y naturalicen este tipo de acontecimientos, lo que como consecuencia hace que pierdan su capacidad de asombro y la necesidad de violencia se vuelva algo central a la hora de tomar una buena foto.[pic 8]

En este sentido, cada uno se va dando cuenta de sus límites a la hora de hacer una buena fotografía, y sin duda es una difícil decisión. Algunos han llegado a cuestionarse su trabajo y hasta se han retirado de éste porque no han sido capaces de llevar esto a buen término.

En conclusión, este documental nos muestra la importancia y la dificultad de ser fotógrafo, sobre todo en tiempos difíciles, como lo fue la dictadura en Chile.