Artículo: ¿Qué es una buena escuela?

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Una buena escuela es una escuela que enseña

Este aspecto fundamental de la escuela hace referencia a la capacidad que debe tener de dar a los alumnos instrumentos básicos para la cultura y formación integral. Donde sus objetivos no sean solo combatir el analfabetismo, sino darle al niño las herramientas necesarias para lograr su realización. Una escuela que abra posibilidades hacia el futuro, transmitiendo con herramientas e instrumentos adecuados que permitan explorar, inventar, descubrir y dar espacio a la creatividad y a la libertad.

El rol del docente, en este sentido, es el de brindar herramientas útiles que le sirvan al alumno para explorar, descubrir y construir su propio conocimiento, un docente motivador, comprometido con su labor, capaz de ver y explotar el potencial de los alumnos, aprovechando su curiosidad, capacidades e intereses.

El rol de alumno en este aspecto, es un alumno activo, abierto al aprendizaje, curioso, responsable.

Una buena escuela es una comunidad donde todos tienen “su” lugar, y donde hay valores o principios compartidos.

Cuando hablamos de una comunidad donde todos tienen su lugar, donde hay valores y principios compartidos, hablamos de una institución que permita reconocerse, valorar el propio lugar, la propia voz, hablamos también de sentidos de pertenencia, de identidad, de colectivos de trabajo vinculados con la idea de democracia. Una escuela que defienda los derechos de los docentes y alumnos pero que a su vez medie para que ambos cumplan con sus obligaciones. Otro de los aspectos destacables en este punto, es que una buena escuela es aquella en la que el dialogo entre los distintos actores institucionales es fluido, donde las cuestiones problemáticas son discutidas por todos los actores involucrados.

Rol del docente es el de fomentar, promover, crear buenos climas de trabajo entre los distintos actores institucionales, abierto a la modificación de roles y modificaciones culturales; un docente que defienda los derechos sin dejar de lado las obligaciones, que ayude a construir el orden institucional siendo participe activo del debate público.

Rol del alumno es el de cooperar con pares y docentes para mantener un buen clima de trabajo, un alumno que haga valer sus derechos pero también al igual que el docente, tenga presente sus obligaciones.

- Concepto de “buena escuela”

A partir de la realización del presente trabajo coincidimos en que una buena escuela debe ser una escuela democrática, inclusiva, que enseñe, que transmita valores y conocimientos, que no solo informe, sino que forme ciudadanos pensantes, con voz propia, que fomente el debate y la libertad de expresión, siempre desde el respeto, y la aceptación por la opinión del otro. Una escuela que brinde herramientas útiles a los alumnos que le permitan resolver problemas de la vida real y no solo dentro del aula. Que enseñe de derechos pero también de obligaciones. Una escuela donde se fomenten el respeto, el reconocimiento y valoración del otro; donde cada uno tenga su lugar y cumpla el rol que le corresponde con compromiso y dedicación.

Otro punto importante a destacar es que una buena escuela es aquella que atiende a la diversidad (social, emocional, cultural, intelectual, física y psicológica.), y a las necesidades educativas especiales, teniendo en cuenta que ésta, es inherente a la sociedad diversidad.

Asimismo consideramos que una buena escuela debe ser una institución en la cual todos los actores institucionales y familias de los alumnos estén comprometidos y sean parte de la educación. Es decir, docentes comprometidos que se formen y capaciten continuamente para poder brindar una enseñanza de calidad, y a su vez un compromiso por parte de los padres y alumnos; una buena escuela debe fomentar el diálogo y la cooperación entre el entorno familiar y la institución para que esta transmisión y formación sea más productiva y efectiva.