CUALES SON LA CIENCIA Y CULTURA EN LA SOCIEDAD CONTEMPORÁNEA

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¿Qué nos queda hacer a nosotros los jóvenes frente a la realidad en la que vivimos?

En primer lugar, la realidad en la vivimos, si bien no muchos están conscientes, es una realidad que nos hace cuestionar si realmente nos aguarda un futuro. Es decir, sin la necesidad de ser pesimistas, la realidad es que poco a poco estamos acabando con el planeta, sea con la sobreexplotación de recursos, la anteposición del poder económico por sobre el desarrollo social, la inequidad en la distribución de riquezas, la tendencia del consumismo masivo, etc. son unos pocos de los muchos factores que determinan el deterioro de nuestro hogar, nuestro planeta. A esto se suma uno de los factores de más riesgo que es el de una población sin criterio, personas “ovejas” del poderío que dejan en manos de los poderosos el tomar decisiones, que por su parte siempre escogerán lo que más les convenga.

Si bien es necesario recalcar que no todas las personas son así, ya que existen en realidad muchas personas muy notables, de inteligencia admirable, también es necesario ser realistas con la situación en la que muchos (aunque no todos, pero aun así la mayoría) de los jóvenes se encuentran sumidos. Abstraídos en un mundo virtual, no reconocen en realidad lo que sucede a su alrededor y si están conscientes, poco hacen por cambiarlo. Los jóvenes debemos ser los que se rebelen en contra de la opresión y la injusticia, los que alcen la voz por los que no pueden o por lo que simplemente decidieron ceder ante la corriente y la presión. Como estudiantes, aún somos libres de ese mercado capitalista que convierte a las personas en productivistas y a su vez en consumistas.

Por lo tanto, es necesario que empecemos a ser personas críticas, no conformistas, aprender del pasado para no repetirlo, actuar con criterio ante esas corrientes “sociales” que, a pesar de tener un aspecto positivo en la comunicación e interrelación social, también dominan y sosiegan el espíritu rebelde de los jóvenes, llenando sus mentes con cosas banales como la farándula o la moda. Como estudiantes debemos buscar el conocimiento y pedir que nuestros maestros nos ayuden a desarrollarlo. Pidamos educación de excelencia, pero también comportémonos como estudiantes de excelencia.

¿Cómo se evidencia que el ocio está siendo considerado un terrorismo?

Sea con las nuevas normativas para regular el consumo de alcohol, el cierre de discotecas o cualquiera de las normas de seguridad y comportamiento social, de una u otra forma es una limitación a la dispersión mental, al ocio. Si bien, estas normas son necesarias para resguardar el orden social, los casos de represión a este ocio que es un “mal” necesario son menos obvios pero masivos. Por ejemplo, las cámaras de seguridad, por una parte, son un respaldo a nuestra seguridad, pero hasta qué punto son necesarias. Existen países en los que las calles están saturados de cámaras de vigilancia, ¿en qué punto queda la privacidad y la libertad de hacer cosas sin sentirnos vigilados?, siempre viviendo con el temor de incumplir aún con la más mínima ley y limitándonos a hacer lo “establecido” y ya no lo que queramos. Aunque quizás sea un caso exagerado, es un inicio de cómo se puede manipular y controlar a las personas.