“Cambios Políticos, Sociales y Económicos en los Gobiernos Radicales de 1916 a 1930”

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El gobierno de Alvear terminó en 1928. Había un déficit que venía arrastrando de largo tiempo y que aumentó a futuro en cifras increíbles.

Alvear dejó buenas leyes, mejoró el ejército, la armada, la aviación, ferrocarriles, caminos y levanto edificios públicos. Pero el pueblo, con su fuerte sentimiento Yrigoyenista voto por la inmensa mayoría el regreso a su segunda presidencia al ya anciano Hipólito Yrigoyen.

Los dos años que duro la segunda presidencia de Yrigoyen, de 1928 a 1930 se dejó encerrar por un grupo de personas interesadas en sus propias conveniencias. Las recomendaciones de políticos influyentes se hicieron necesarias para cualquier trámite. El gasto público fueron exagerados y absurdos.

El pueblo advirtió esta situación y en las elecciones de diputados votó a los opositores socialistas e independientes que por primera vez vencieron a los radicales.

Todos los valores del país, bajaron su precio. Culpa compartida con la crisis pero también de un presidente cansado, rodeado de ministros que carecian de capacidad y libertad para decidir sobre tales asuntos. La deuda consolidada alcanzaba los tres millones y la deuda flotante, llegó a los mil ciento dos millones.

En el pueblo argentino se había creado una consciencia personalista. Yrigoyen enfermo y decaído ignoraba o fingía ignorar estos hechos.

La bandera de Yrigoyen servía a políticos deshonestos y a fanáticos serviles para cometer mil abusos. Pero en medio de ese caos había libertad absoluta de expresión.

Los diarios publicaban los mas fuertes ataques e Yrigoyen todo lo permitia, seguro de su posición.

La revolución que encabezó el general José Félix Uriburu fue simple. Contó con adhesiones personales y salio a la calle con los jóvenes cadetes del colegio militar.

El 6 de Septiembre, Uriburu triunfo en su revolución. La casa del presidente Yrigoyen fue quemada y el presidente se entregó preso en La Plata.

La Reforma Universitaria:

En el contexto de una Argentina en desarrollo, beneficiada por la primera guerra mundial, Buenos Aires era un epicentro o de modernización

En cambio, la Universidad de Córdoba, quedó rezagada en el proceso de transformación de la estructura social del momento: Levantamiento de las clases sociales bajas y la llegada de los inmigrantes

La universidad fundada en el año 1613 por los Jesuitas, ostentaba el prestigio de ser la primera Universidad en la Argentina y aunque en 1858 pasó a depender administrativamente del gobierno nacional se apartaba de los impulsos del mundo moderno

En Diciembre de 1917 los centros de estudiantes de Ingeniería y Medicina hicieron llegar a las autoridades demandas relacionadas con la organización de sus estudios. Pero estas fueron ignoradas y rechazadas, generando inconformismo en todo el claustro estudiantil.

En 1918, se constituyó el Comité Pro-Reforma hasta que se llevó a la creación de la Federación Universitaria de Córdoba que decidió convocar a huelga general y suspensión de clases hasta que las autoridades de la universidad dieran respuesta a las demandas, pero el conflicto se extendió dando paso al un programa de reforma universitaria.

La organización estudiantil exige a grandes rasgos un cambio en los contenidos, métodos de enseñanza, aceptación del ejercicio de la crítica de la experimentación científica, la autonomía de la universidad de la influencia eclesiástica, participación estudiantil en el gobierno de la universidad.

El Consejo Universitario se negó a dialogar con los estudiantes y estos empezaron a realizar asambleas en las diferentes facultades, hubo inasistencia colectiva a clases, concentraciones públicas e inclusive hubieron actos de agitación callejeras.

La decisión que marcó la explosión estudiantil fue cuando el 2 de Abril, el Consejo Universitario resolvió suspender las clases. Ante este acto autoritario, el movimiento estudiantil solicitó al Ministerio de Instrucción Pública del Gobierno presidido por Yrigoyen la intervención de la universidad que fue aceptada con el nombramiento de José Matienzo, designado como interventor el 11 de Abril.

El 22 de Abril, este representante del gobierno, presentó un proyecto de Reforma del Estatuto de la Universidad, cuya idea central era la democratización del poder académico, para ello declaró vacantes los cargos de rector y de decanos y bajo su dirección se llevaron a cabo las elecciones de los miembros del consejo de la universidad y de decanos ocurrida el 28 de Mayo.

Para el 15 de Junio se convocó a elecciones para elegir al Rector, siendo los candidatos: el Dr. Antonio Nores (anti reformista) y el Dr. Enrique Martínez Paz (apoyado por la FUA) , resultando elegido el Dr. Nores.

Ante este panorama, los estudiantes acordaron realizar una huelga general en virtud de protesta por la elección de un rector tradicionalista.

El movimiento estudiantil fue apoyado por las federaciones universitarias de todo el país, los sindicatos y personas reconocidas de letras y cultura.

En vista de la huelga general, el Rectorado dispuso la clausura indefinida de la Universidad, mientras las fuerzas conservadoras se movilizaban en contra del movimiento de reforma.

Ante esta decisión, el 9 de Septiembre el movimiento estudiantil de Córdoba tomó la medida de ocupar la Universidad y en comunicado público, los estudiantes se dieron a la tarea de invitar “al pueblo a concurrir a la inauguración de clases”.

El gobierno de Yrigoyen respaldó la lucha de los estudiantes por tratarse de una lucha anti oligárquica, actuando con prontitud, legalizó las reivindicaciones estudiantiles.

El 7 de Octubre, se emitió el Decreto Presidencial sellando de esta forma el triunfo de la lucha del movimiento estudiantil, en otras palabras, se legitimizó legalmente la Reforma Universitaria iniciada en Córdoba.

La Reforma Universitaria marcó como aspectos principales la co participación estudiantil en el Gobierno de la Universidad; La asistencia facultativa a los cursos; la renovación periódica de las cátedras y la flexibilidad en los procedimientos de exámenes

El Movimiento de la Reforma Universitaria de Córdoba, su plataforma y discurso ideológico, desencadenaron no solo un movimiento a nivel nacional sino a nivel continental porque marcó el camino