La Quijotita y su Prima.

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Don Dionisio había adquirido una herencia y regresó muy cambiado a donde vivían los demás decía que ya no cometería los mismos errores, ya había aprendido la lección. Doña Eufrosina hizo una fiesta de aquellas y Don Dionisio se enfermó hasta que lo sepultaron pero su esposa no derramó ni una lagrima, demostró que nunca lo había amado, que era una interesada. Pero Pomposa sí estaba triste por su padre y la mayoría del tiempo se la pasaba en la casa del coronel y de Prudencia. Pomposa conoció a un marqués y al poco tiempo (6 días) de haberse conocido se casaron, pues el les contó que tenia que irse a España con el virrey. Pidieron el dinero al coronel ya que Pomposa había contraído matrimonio.

Al poco tiempo aprenden al marqués, era un impostor que había escapado de la cárcel por su próxima decapitación, por sus delitos cometidos y asesinatos cometidos. Se gastó el dinero de estas en el juego. Doña Eufrosina y la Quijotita estaban muy avergonzadas, decidieron que no verían más al coronel ni a su familia. Pomposa que convirtió en una ramera después de lo sucedido. Por todas estas calumnias Don Rodrigo se enferma y muere. Todos sintieron su partida, en especial su familia quien tanto lo amaba. Pasaron cuatro años todos multiplicaban su amor hacia doña Matilde y seguían lamentándose la perdida de don Rodrigo, y deseaban saber que había pasado con doña Eufrosina y Pomposita. En eso entro un criado avisando que traían una razón, salieron a ver y diciendo que necesitaba medicamento y que estaba muy enferma supieron que se trataba de Pomposita. Al preguntar qué había pasado con la madre respondieron que había muerto. Se pusieron en camino y al llegar al verlos Pomposita se puso a llorar, pidiendo que olvidaran lo pasado y tuvieran compasión. Al ver que no la podrían sacar de ahí llamaron al médico, quien les confirmo que no debían llevarla a su casa y ahí se pasaron unos cuantos días cuidándola hasta que un día después de sacramentarse y recibir los oleos entrego su alma al creador, dejando un patético y sensible ejemplo y escarmiento a las mujeres sin juicio que siguen las mismas ideas y conducta de la infeliz Pomposa.

PERSONAJES

PRINCIPALES

- Pomposa

- Prudencia

- Don Rodrigo (el coronel)

- Don Dionisio

- Doña Eufrosina

- Doña Matilde

SECUNDARIOS

- Tulitas

- Mama de Tulitas

- Botones

- Don Modesto

- El “marqués”

VALORES ÉTICOS

- Respeto

Don Rodrigo le enseña a su hija a ser respetuosa con las demás personas, a no tratar todos por igual porque era una niña educada e inteligente, en cambio los padres de Pomposa nunca le supieron inculcar el respeto, llevándose con todos por igual sin que le importara si ofendía o no.

“¿Cómo quieres que una niña sea humilde, honesta y moderada, si su madre, por culpa de su marido es altanera con los criados, altiva con las visitas, descuidada en la casa, profanada en la calle y necia en todas partes?”

- Equidad

En la reunión que hace Doña Eufrosina, tiene un conflicto con unos de sus invitados diciendo que las mujeres son todo lo negativo de la vida, ella le pide a Don Rodrigo que la ayude y el explica que en realidad debe existir la equidad ya que el cree que las mujeres son igual de capaces que los hombres pero la única diferencia es que los hombres seguirían con los valores que les habían inculcado en sus familias, en cambio la esposa tenía que acatar lo que su esposo le dijera. “La inferioridad de la mujer respecto al hombre, respondió el coronel, no consiste en otra cosa que en la debilidad de su constitución física, es decir, en cuanto al cuerpo: pero en cuanto al espíritu, en nada son inferiores, pues no siendo el alma hombre ni mujer, se sigue que en la porción espiritual son en todo iguales a nosotros…”

- Integridad

Podemos ver como es que las primas son totalmente diferentes ya que a una sus padres le han enseñado a ser recatada para que en hombre adecuado se fije en ella y no tenga problemas de chismes o con alguna otra persona, Pomposa en cambio no tiene una propia integridad, es más, ni sabe lo que significa porque sus padres nunca le dieron la atención, la llamaron incluso ramera, sus pretendientes poco a poco se fueron yendo al saber que ella no tenía integridad.