La producción escrita como vehículo para la legitimación de la violencia

...

los actores involucrados en conflictos armados y políticos dirigen sus discursos hacia la construcción de una imagen positiva y victimizante de sí mismos (Sabucedo, Fernández y Rodríguez 2002), 58

Para ello, cada actor construye un discurso mediante el cual intenta evidenciar que su accionar es válido porque está fundamentado en ciertos ideales socialmente aprobados; mientras que, por el contrario, la manera de operar de su adversario es inaceptable. 61

Uno de los objetivos que las FARC-EP persiguen con su discurso es la consolidación de una imagen positiva y la adhesión de distintos sectores a su causa y, a partir de esto, extender el grado de impacto de su accionar sobre la sociedad70

Dentro del llamado a apoyar o a unirse directamente a la lucha revolucionaria encabezada por las FARC-EP se incluyen a estudiantes, trabajadores, mujeres, organizaciones sociales, mandatarios internacionales, personalidades políticas nacionales e, incluso, artistas internacionales; quienes son percibidos como actores que, además de reconocer el carácter político de este grupo guerrillero, actúan desde principios morales afines a los promulgados por ellos.70

Esto no significa que la guerrilla abandone su carácter rural y campesino, sino que comienza a dar cuenta de la importancia de la inclusión y la actuación conjunta con otros sectores sociales y políticos desligados de las causas campesinas para el desarrollo de su lucha armada y, especialmente, para la consecución de una salida negociada al conflicto.71

Por otra parte, llama la atención que en la constitución de un nosotros no sólo se incluyan a actores civiles y políticos, sino que también se convoque a los soldados del Ejército colombiano con quienes las FARC-EP pretenden formar alianzas72

La definición sobre quiénes conforman el ellos es un aspecto que poco se ha transformado en el desarrollo histórico de las FARC-EP debido a que desde sus inicios su lucha ha estado dirigida contra quienes detentan el poder (representados en el Estado y los sectores nacionales e internacionales económicamente poderosos).72

Términos como “fascista”, “dictador” y “títere” son empleados por el grupo guerrillero en sus comunicados para construir una imagen negativa del gobierno de turno, imagen que fundamentan en la rectitud moral y política que se promulga en su discurso72

En este sentido, la doble funcionalidad de la deslegitimación del oponente (por una parte, la creación de la representación un ellos y por otra la reafirmación de un nosotros a partir de ésta) evidencia la existencia una exterioridad constitutiva, lo que implica que la construcción de un nosotros depende siempre del tipo de ellos desde el cual se plantea la diferenciación entre las partes. Diferencia que establecerá si el oponente es definido como un enemigo o como un adversario72373