México en la búsqueda de una educación con aprendizaje verdadero

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Durante décadas se ha pensado que el objetivo es que el educando “aprenda” aunque en verdad el resultado es que generalmente no aprende si no que memoriza, repite, y luego olvida, no asimila, porque no hay asimilación sin participación, sin elaboración personal. Inculcar las nuevas actitudes sin pasar por la reflexión, por el análisis, sin pasar por la conciencia sin someterlas a una libre elección. La conciencia, la libertad, molestan, fastidia, hacen perder el tiempo. El pensar que lograr un resultado es el objetivo provoca , no que la persona piense, discuta la cuestión, y tome una decisión libre y autónoma porque eso lleva tiempo y hay serio peligro de que al final termine rechazando la propuesta, si no persuadirla, condicionarla, ofrecerle al cabo de una recompensa. Y no es que esté mal pensar en obtener una recompensa, o un premio de reforzamiento por el esfuerzo realizado durante los estudios, es más que nada, pensar, que es lo que más importa que el aprendizaje mismo, es debido a eso que el educando memoriza para obtener una buena calificación sin procesar la información y no tiene un aprendizaje significativo.

¿Es el modelo educativo el que se necesita cambiar? Es decir ¿cambiar la motivación para aprender se debe hace en la escuela? O ¿en casa?

El contexto sociocultural en México, el paradigma sobre la educación, y la mediocridad de pensamiento han provocado que desde siempre el padre piense que es en la escuela donde se obtiene el aprendizaje más significativo, y no es así.

Entre algunos grupos étnicos los estilos de crianza infantil quizá sean menos importantes que la influencia de los pares sobre la motivación. En un estudio, los adolescentes estadounidenses de origen latino y africano, incluso aquellos con padres autoritativos tuvieron menos éxito en la escuela que los estudiantes de origen europeo, al parecer debido a la falta de apoyo por sus pares para el aprovechamiento académico (Steinberg Dornbusch y Brown. 1992) por otro lado, los estudiantes asiático estadounidenses, cuyos padres a veces son descritos como autoritarios, obtienen mayores calificaciones, al parecer porque tanto los padres como sus compañeros valoran el logro (C. Chen y Stevenson, 1995).

La sociedad en la que vivimos atribuye al sistema educativo cada logro académico o profesional, tal vez sea inconscientemente, o completamente convencidos de que es la educación académica la que es decisiva en el éxito de las personas, sin embargo confirmo que es la crianza en casa la que le da el plus que necesita nuestro modelo educativo mas reciente. Siguiendo la teoría de Freiré, el cambio fundamental, aquí consiste en el paso de un hombre acrítico a un hombre crítico, en este proceso de un hombre desde los condicionamientos que lo han hecho pasivo, conformista, fatalista, hasta la voluntad de asumir su destino humano; desde las tendencias individualistas y egoístas hasta la apertura a los valores solidarios y comunitarios.

Lo que importa es que el sujeto aprenda a aprender, que se haga capaz de razonar por si mismo, de superar las constataciones meramente empíricas, e inmediatas de los hechos que lo rodean (conciencia ingenua) y desarrollar su propia capacidad de deducir, de relacionar, de elaborar síntesis (conciencia crítica). Sólo participando, involucrándose, investigando, haciéndose preguntas, y buscando respuestas problematizando y problematizándose, se llega realmente al conocimiento.

Se aprende de verdad de lo que se vive, lo que se recrea, lo que se reinventa y no lo que simplemente se lee y se escucha. Solo hay un verdadero aprendizaje cuando hay un proceso; cuando hay ya autogestión de los educandos.

Teniendo la oportunidad como docente de facilitarle al educando las estrategias para procesar y obtener un aprendizaje significativo, me apego por completo a este modelo, no sin dejar de insistir, en que la motivación que necesita México para educar personas exitosas, comienza en casa.

CONSLUSIONES

La realidad es que nuestro país, estado y ciudad tiene todo lo que necesita para ser aun más exitoso, no solo económicamente, también en vida plena, feliz y satisfecha. Los recursos otorgados con esta reforma, y los avances tecnológicos, con los que se propone alcance de internet y computadoras para todos, no son indispensables para que el modelo funcione logrando una buena educación.

Aunque el proceso de evolución o modificación del método educativo ya tiene tiempo trabajándose en los profesionales al frente de los estudiantes, la resistencia al cambio, los paradigmas y la corriente social son factores que truncan el avance. La tecnología se utiliza de la misma manera que se pretende cambiar, utilizando los videos, presentaciones o textos como un depósito de conocimientos, sin procurar la participación e indagación por parte del alumno.

Pareciera entonces que el dilema del huevo y la gallina será eterno, al igual que se espera que el educador esté bien educado para poder lograr un proceso de aprendizaje, o seguir esperando que estas generaciones que se sometieron al cambio, sean el futuro y resignarnos a formar parte de la merma que necesita ser regenerada para lograr un cambio.

Mi propuesta seria enfatizar la educación en el padre de familia, combatir la pereza, de este círculo vicioso donde esperan que las escuelas primarias faciliten toda la educación convirtiéndolas en escuelas de tiempo completo, convirtiendo al maestro en alguien que cría y no que enseña. La pregunta es ¿cómo? ¿Cómo cambio la forma de pensar de una persona que ganando el mínimo solo se alcanza a preocupar por que sus hijos coman y vistan? Si pudiera lograr que el salario cambiara, las condiciones de trabajo mejoraran para los obreros, y pudieran ser menos infelices, probablemente tengan la esperanza de que una carrera o el estudio abran más oportunidades de una vida próspera. Puede sonar romántico, utópico o idealista, pero pareciera que sólo así podría ser posible cortar el mal de raíz y cosechar prosperidad.

Me atrevo a terminar aclarando que no se trata de una doble moral, en la que una persona idealista sugiere cambios sin empezar en la vida propia, pues cada palabra plasmada es un intento del día a día por aprender, y ser un instrumento para que todos mis alumnos logren un aprendizaje verdadero.

BIBLIOGRAFIA

Kaplún, Mario (1998) “Periodismo cultural. La gestión cultural ante los nuevos desafíos”. Revista Latinoamericana de Comunicación

http://definicion.mx/modelo-educativo/

Freire,