Perdón y reconciliación: una perspectiva psicosocial desde la noviolencia

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Matiza el autor que el perdón como un proceso personal de transformación de emociones y sentimientos negativos de ira, rabia, odio, rencor y deseo de venganza, en un sentimiento donde se recupera la esperanza y se renuncia a dichas emociones negativas. Igualmente el autor deja claro que se debe superar la impunidad, porque esta no permite que se repare o se restablezca el daño que se ha efectuado, plantea sobre este tema el tratadista que en nuestro sistema judicial dentro del proceso de paz con la justicia transicional, la sanción al victimario puede ser penal o restaurativa lo cual favorece la reconciliación y elimina la impunidad.

Soporta su artículo, fundamentado en hechos ocurridos dentro del conflicto armado en Colombia y en las narrativas de personas involucradas en el conflicto:

- Hago presente la voz de víctimas y personas afectadas directamente en el conflicto armado, cuyas voces emergen de dos procesos investigativos desarrollados en los años 2007 y 2012 en la región del Oriente Antioqueño y el sur de Córdoba.

- La experiencia similar a la trabajada por la película promesas con la dirección de Justine Shapiro, Carlos Bolado y B.Z. Golberg. En esta película se trabaja con niños israelíes y palestinos.

- En Colombia las múltiples experiencias de construcción de paz desde abajo: comunidades de paz, asambleas por la paz, movilizaciones sociales, procesos locales de reconciliación, procesos campesinos, indígenas y afros, de resistencia y autodeterminación (Hernández, 2008; Barbero Domeño, et. al. 2006);

- Asociación de Mujeres del Oriente Antioqueño (AMOR5); estas mujeres vivieron la experiencia de la violencia en sus comunidades y en sus propias familias.

- En el 2007 se desarrollaron 11 grupos focales con mujeres víctimas del conflicto armado que venían participando en un proceso de intervención psicosocial que apuntaba a su recuperación emocional, la reivindicación de su dignidad y sus derechos y la reconciliación social en el ámbito local

- Corporación para la formación ciudadana (CONCIUDADANIA) y Programa por la Paz / CINEP.

- Es importante anotar que en Colombia la cifra de víctimas directas del conflicto armado asciende a más de 7.5 millones, de las cuales, 6.5 millones han sido desplazadas violentamente de sus lugares de vivienda y han sido despojados de su tierra.

- Un primer ejemplo puede citarse en la investigación de Rajmohan Ramanathapillai (2006) quien presenta la forma como los Tigres Tamilesen Sri Lanka utilizaron las narrativas de dolor de las comunidades Tamiles, ligándolo a la rabia, el odio, el miedo y la desesperación, siendo su objetivo el de promover la incorporación de nuevos combatientes.

Preguntas que le genera el texto:

- ¿Con un presupuesto de 28.6 billones de pesos en el 2017, asignado al Ministerio de Defensa, esta cartera estará interesada en que se acabe la guerra interna en Colombia?

- ¿Con la aceptación del estado en el acuerdo de paz de permitir postular candidatos a elecciones populares a la guerrilla como grupo político y con la existencia de la pluralidad de partidos políticos y con vínculos de algunos de estos con los paramilitares y con la guerrilla, se podrá construir una paz verdadera?

- ¿Siendo los medios de comunicación del país de propiedad de la clase política, se preocuparan estos de promulgar las bondades del acuerdo de paz?

Posición, observaciones personales e interpretación: En mi concepto, el tratadista habla de violencia política, pero se quedó corto, en Colombia esa es solo una parte de la violencia, los otros aspectos generadores de violencia y que deben ser subsanados para mejor el proceso de paz, son un mal sistema de condenas para los homicidios, las masacres, las violaciones y los delitos de terrorismo, ya que al ser el estado tan pasivo, los delincuentes han aumentado en número y se han agrupado, generando nuevas guerras, igualmente, esa mala política judicial ha permitido la violencia para apropiarse de la tierra por parte de los terratenientes, lo cual genero masacres y desplazamientos, hoy, los grupos armados, bandas, clanes, pandillas, siguen creciendo y cuentan con estructuras jurídicas que le encontraron las bondades al sistema judicial y ven en los procesos de paz su norte, puedo delinquir y cuando este acorralado o haya acumulado suficiente hago un acuerdo de paz.

Ahora, otro tema que tiene que ver de manera directa en la existencia de una paz en el país, y que no fue abordado por el tratadista, son los cocaleros (productores de cocaína), porque si miramos las zonas montañosas que eran el fortín de los grupos armados, paramilitares y guerrilleros, estos grupos prestaban servicios de protección y transporte a los cocaleros quienes son un grupo distinto a ellos, pero que les representan enormes ganancias por su apoyo, estos grupos con su poder económico buscara nuevas bandas que le presten los servicios de cuidado, protección y transporte, con lo cual la violencia continuara.

Cierre: En el campo de la pedagogía, la forma de presentar el tema y sus fundamentos estadísticos, permiten tener un enfoque correcto de la problemática de la violencia y los elementos que la componen, así mismo, permite identificar el perdón y sus diferentes formas de manifestación como mecanismo de solución de conflicto y construcción de un nuevo futuro, este nuevo enfoque permite mejorar la panorámica de la violencia y de los involucrados en ella, aprender a estudiar los orígenes de la violencia para entender a los violentos y construir marcos de paz con ellos, aprender a escuchar a las víctimas para construir un marco para la reparación y la justicia transicional y sobre todo, aprender a fundamentar nuestras propuestas en estadísticas y estudios ejecutados para mejorar el enfoque personal.

Leer de primera mano este artículo y las vivencia de personas vinculadas al conflicto armado nos muestran que el pensamiento de las personas y su dolor esperan que se acabe la violencia de una forma u otra, pero que se acabe, es difícil para la suscrita, colocarme en la posición de ellos, solo puedo imaginar ese sufrimiento, porque yo vivo en una zona del país (Puerto Colombia – Atlántico), donde no hemos sufrido el flagelo del desplazamiento ni el horror de una guerra.

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