Temática: Exploración y trabajo en equipo

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Rudolf: a a mi sí (con miedo)

Narrador: Pepito corrió a donde estaba la sombra, lanzándose contra ella como si fuera un luchador profesional. Sin embargo… solo se encontró con una sábana.

Pepito: ¿una sábana? ¿¡Y el fantasma?! (Confundido)

Narrador: Catalina, quien era un poco más detallista que los demás se dieron cuenta de que la sabana estaba en un perchero, y que afuera había viento.

Catalina: ¡no es ningún fantasma! (risas) ¡era la sombra de la sabana, al moverse con el viento!

Rudolf: ¿c como estas tan segura de eso? (incrédulo)

Pepito: ¡sí! ¿Cómo sabes qué es eso?

Isabella: ¡Ya sé! ¡Hagamos un experimento!, ¡como los que hacemos con la maestra en la escuela!

Catalina: ¡sí! Un experimento nos dirá si tengo razón o no.

Narrador: los niños pusieron la sabana en donde estaba y observaron detenidamente el objeto y su contorno. Después de esperar un rato el viento soplo y la sabana se movió, tapando un poco la luz del sol y generando la sombra que habían visto.

Todos: ¡ahí está la sombra!

Pepito: ¡Catalina tenía razón! ¡Era la sabana!

Isabelle: ¡otro experimento completo!

Rudolf: ¡y yo que creí era un fantasma!

Pepito: ¡es como en las noches de lluvia con viento! En ocasiones las ramas de los árboles se mueven y la luz de las lámparas hacen sombras tenebrosas.(voz segura) ¡pero son solo las ramas de los arboles!

Isabell: ¡o como cuando hace mucho viento y los arboles hacen ruidos extraños! ¡Como gritos de las películas de terror que ven mis papas!

Pepito: ¡es como dijo la maestra! Primero debemos ver que es lo que hace que sucedan esas cosas. ¡Todo tiene una explipacion!

Todos menos Pepito (corrigen a Pepito) ¡explicación! ¡Se dice explicación!

Narrador: Catalina vio por la ventana.

Catalina: ¡shshsss! ¡Se está haciendo de noche!

Narrador: los niños vieron que tenía razón y se apresuraron a salir de la casa.

3er Acto.

Narrador: Al acercarse la noche los niños regresaron a su casa quedándose un rato a fuera, donde se pusieron a reflexionar de lo que había pasado.

Caralina: Estuvo muy padre la aventura que tuvimos hoy.

Pepito: ¡Sí! Ves Rudolf como no pasaba nada.

Rudolf: Si lo sé, pero no podemos regresar ahí, nos lo prohibieron nuestros padres.

Catalina: No te preocupes Rudolf ya vivimos esta experiencia, mañana se nos ocurrirá otra cosa que hacer.

Isabella: Si, por mientras vámonos a descansar antes de que nuestros padres se empiecen a preocupar.

Narrador: Los niños se fueron a sus casas muy contentos y ansiosos por saber que aventura harían al día siguiente.