¿Por qué en México ha caído el índice de confianza del consumidor?

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¿Por qué en México ha caído el índice de confianza del consumidor?

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Integrantes:

Chumacero Rodriguez Tania Jocelyn   219725766

Enciso Mendez Paola Alejandra           219726568

Introducción

En este ensayo vamos a hablar sobre el índice de confianza del consumidor (ICC) y de cómo influye.

El ICC nos ayuda para saber en esencia, si el consumidor tiene perspectivas positivas o negativas sobre la situación del país. Es decir, un control para saber si los consumidores están gastando en consumo, ya que esto refleja que la economía en el interior del país está siendo impulsado. Así mismo, si la confianza del consumidor, el (ICC) muestra cómo los consumidores tienden a ahorrar más y gastar menos,  lo que provoca que sea al contrario, y provoque contracciones a la economía, el cual se puede medir con el desempeño del producto interno bruto (PIB). Cuando esto sucede, nos lleva a una tendencia recesiva, (decir que la producción y el consumo caen, pero el desempleo se incrementa) que sobrecae en la disminución en la confianza del consumidor. En caso contrario, si el índice de confianza del consumidor es positiva, se puede traducir o entender cómo empleos y mejores salarios.  

La mayor parte de la factura de una recesión económica en méxico cae sobre la espalda de los trabajadores y de las empresas. Durante los últimos 50 años, los sucesivos gobiernos han asegurado su ingreso haciendo cambios fiscales para elevar la recaudación tributaria, aunque solamente se ha elevado la magnitud del freno económico.

El modelo económico mexicano vive en perenne (que es continuo) círculo vicioso que parte de un bajo crecimiento estructural (el famoso 2%) al que una desaceleración puede llevar fácilmente a una recesión.

Aunque el país se reinventa, y el cargo político cambia cada seis años, su resultado es el mismo, estancamiento económico y precarización social. El proceso de desaceleración económica sólo es el principio, cancela oportunidades de crecimiento y desarrollo porque se detiene la inversión productiva y la generación de empleos bien remunerados.

La mayor parte de la población se ve afectada rápidamente, el bajo ahorro es una parte orgánica de una sociedad empobrecida. Igualmente ocurre con las empresas, el crecimiento estructural de 2% ha dejado un escaso margen de maniobra financiera cuando la economía deja de crecer por más de un año.

Un consumidor es aquella persona o conjunto de personas que satisfacen sus necesidades mediante el uso de los bienes y servicios generados en el proceso productivo. En este sentido, el concepto de consumidor proviene de la participación de los individuos en las actividades de compra-venta en los mercados que dinamizan la actividad productiva.

Generalmente, el consumo agregado que realizan los individuos conceptualizado como consumo privado, es un fuerte componente dentro del Producto Interno Bruto, representando alrededor de las dos terceras partes del mismo.

El PIB contabiliza sólo los bienes y servicios “finales”, es decir, que no se añaden los bienes que contribuyen a la elaboración del producto definitivo. Es “interno” ya que suma los bienes y servicios producidos dentro de un país, sea por nacionales o residentes y empresas extranjeras. Nos ayuda a saber si nuestro país está creciendo o no, es decir, nos sirve para saber si se produjo más o menos que el año anterior, por eso al hablar del PIB no se menciona su valor en dólares o moneda local, sino en porcentaje, si creció o disminuyó respecto al año anterior.

La confianza del consumidor es la medida del nivel de optimismo que los consumidores tienen acerca de la actividad económica animandose a gastar. Generalmente esta confianza del consumidor es alta cuando la tasa de desempleo se reduce, lo cual inyecta seguridad sobre las condiciones laborales, y cuando la tasa del PIB crece.

Cuando el índice del consumidor es bajo las empresas se preocupan, haciendo que disminuya su producción, lo cual genera el despido de gente y disminución de ingresos, generando menos consumo, dando como resultado una recesión o una crisis. En estos momentos es en donde probablemente el mercado laboral ya da signos de debilitamiento, las familias empiezan a observar que esas expectativas estaban sobredimensionadas y que entonces se están empiezan a ajustar a la baja.

Dada la importancia de este factor, los economistas han desarrollado métodos para intentar medir esta confianza, por medio de encuestas. Las encuestas se realizan a lo largo de un mes y al mes siguiente de púbica una media de los resultados obtenidos. Por ejemplo, cuando se publica el índice de confianza de Octubre, estamos conociendo la media de confianza que expresaron los participantes encuestados a lo largo del mes de Septiembre.

¿Dónde y cuándo se calcula en México?

El índice de confianza del consumidor se calcula considerando a cinco componentes parciales: dos de estos recogen las opiniones sobre la situación económica actual y esperada del hogar de los entrevistados; otros dos evalúan las percepciones sobre la situación económica presente y futura del país, y el quinto capta la visión de los consumidores acerca de qué tan propicio es el momento actual para la compra de bienes de consumo duradero.

¿QUE GENERA QUE EL ÍNDICE DEL CONSUMIDOR VAYA A LA BAJA?

Algunos podrían decir que es por la inflación y la poca generación de empleos, otros por los cambios en las expectativas de crecimiento del país, y algunos otros mencionan el impacto que han tenido las reformas, sobre todo la fiscal. La realidad, es que sabemos que los son tiempos, algunas de ellas serían las fuertes devaluaciones que se generan, haciendo que la voluntad de comprar bienes durables en particular bienes importados (vehículos, televisores, electrodomésticos, etc.) sea una voluntad mucho menor que la que se tenía antes porque son bienes que se han encarecido mucho como  consecuencia de la devaluación.