Controla tu lengua en 30 días
Enviado por Rimma • 17 de Diciembre de 2017 • 3.190 Palabras (13 Páginas) • 387 Visitas
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Tendríamos que analizar nuestra forma de actuar y de expresarnos y determinar si somos si en algún momento tenemos tendencia de convertirnos en contenciosos
Una estrategia para responder a un contencioso, es responder gracias respeto tu opinión, pero es tu opinión y no rebatir porque para pelear se necesitan dos. Glorificamos a Dios cuando no nos enfrascamos en una discusión sin sentido, que no va a agregar valor en nuestra vida.
Hay que tener claro, que evitar enfrascarse en una discusión no quiere decir que no tengamos criterio o que no defendamos nuestro punto de vista cuando sea necesario hacerlo. Esto significa que no caeremos en el juego de un contencioso porque esto no edifica nuestra vida.
La lengua jactanciosa, esto significa que la buena fortuna es un resultado de nuestros propios esfuerzos, y no se reconoce que todo lo que tenemos: los dones, talentos y virtudes, nos los ha dado Dios. Hay que aprender a tomar con calma los elogios y engrandecernos con cualquier logro que obtengamos, porque en la vida todo es pasajero.
La lengua auto despreciativa, el auto desprecio son las etiquetas negativas que nos ponemos a sí mismos, cuando nos repetimos una y otra vez que no podemos hacer las cosas, que no tenemos las capacidades necesarias para enfrentar los problemas hasta el extremo de considerarnos un fracaso.
Cuando Moisés se rehusó a seguir el mandato de Dios para liderar la salida del pueblo hebreo de la esclavitud de Egipto, y le dijo a Dios, no puedo liderar, nunca he sido hombre de fácil habla y he sido torpe de lengua, y Dios le dijo, quien dio la boca la hombre o quien hiso al mudo, al que ve y al ciego no fui yo, pues ve y yo estaré en tu boca y te ensañaré lo que haya que hablar. Debemos rechazar el espíritu de incompetencia.
Hay que cambiar la mentalidad sobre uno mismo, Dios nos ha dado los dones y talentos para salir a delante.
La lengua calumniadora, esta palabra se deriva de la palabra griega diábolos, que significa diablos, calumniar significa hablar mal de otra persona con el fin de arruinar su reputación, la motivación que lleva a alguien ha calumniar es la inseguridad que sienten o por temor a la competencia, estas dos causas son una clara señal que el calumniador no se incluye cree ser parte de los planes de Dios para él, nada justifica poner en mal a otra persona y dañar su reputación. No hay razón para que yo apague la luz de alguien para que la mía brille.
Cuando calumniamos el que guarda su boca guarda su alma, mas el que mucho abre su boca tendrá calamidad.
La lengua chismosa, los chismes son comentarios maliciosos y negativos contra una persona, hay que tener cuidado de no caer en este tipo de práctica que por cierto es muy común y muy fácil caer en la tentación de unirse a una plática que solo daña la imagen de la persona que se trate en el chisme. El chismoso por lo general, utiliza la información negativa que posee de alguien para ganar notoriedad, lograr relacionarse con otras personas o para lograr camarería, sin embargo, de una forma poco ética y maliciosa. Hay que hacer una evaluación sobre qué haremos con la información negativa que llegue a nosotros y cuidar no convertirnos en un chismoso, también apartar de nuestra vida las personas que poseen estas prácticas.
Lengua Intrusa, diferente de los chismosos, los intrusos buscan información personal de sus interlocutores, los intrusos buscan satisfacer sus ansias de información personal, no todos los que buscan información son intrusos, podría ser alguien que este genuinamente interesado en ayudar, pero si, simplemente es un interés mezquino de inmiscuirse en los asuntos de los demás, esto ya no podemos catalogar como una lengua intrusa, que no trae beneficio a ninguna de las partes.
Lengua traidora, un traidor divulga información en la brecha de una confidencia, revela información al enemigo, traicionando así al violar la confianza depositada y causando daño a quien en algún momento lo consideró amigo.
La lengua menospreciadora, la lengua es muy rápida, si uno es de las personas que únicamente se interesa por las personas que obtienen buenos resultados, y no se interesa por sacar el potencial de las demás personas, hay que realizar un autoanálisis si estamos cayendo en el menosprecio hay que conquistar el menosprecio actuando como el animador y el entrenador de los miembros nuestra familia, empleados, compañeros de trabajo y otros en nuestro entorno.
La lengua cínica,
Una persona que es cínica desprecia los motivos de otros. El cinismo es como el veneno; envenena la atmósfera donde quiera que esté presente. Morando en él envenenará también su espíritu y el de otros.
Hay que comenzar a analizar nuestros comentarios sobre varios temas y determinar si realmente estamos siendo cínicos o desdeñosos.
Lengua sabelotodo, si no puede refrenarse cuando da su opinión, o se utilizan palabras como debe, o debería e intenta, aparentar a otras personas que conoce al cien por ciento de todos los temas, hay que tener una dosis de humildad, porque esto ocasiona malestar en el prójimo, al evidenciar altitud y afán por lograr notoriedad.
Lengua áspera, contestar de una manera poco cortes, aun cuando uno no esté conforme con el actuar de otras personas, un lenguaje cortes es más efectivo para lograr una comunicación eficaz.
Lengua indiscreta, saber cómo responder a cada una, se bebe tratar de ser diplomático en la manera de obrar, para dominar la lengua indiscreta hay que desarrollar la habilidad de tratar a otros con sensibilidad.
La lengua intimidante, muchas personas intimidan o asustan a otras con su lengua, esto puede ser contraproducente, si Dios está en control de mi vida, no tengo porque intentar el comportamiento de otras personas.
La lengua ruda, que nos hace tan rudos, puede ser los problemas, las prisas, el estrés, sin embargo, a veces portarse rudo es denigrante para otra persona, una persona ruda puede echar a perder el día de otros, para dominar esta lengua, el mejor consejo es tratar a otros como nos gustaría que nos traten a uno mismo.
La lengua que critica, no juzgues, porque en la medida que juzgues serás juzgado, en algún momento de nuestra vida, tendremos que rendir cuentas, entender que todos somos diferentes y actuamos de diferente forma y
Lengua ensimismada, Alguien que es ensimismado principalmente está interesado en sí mismo y muestra poca preocupación por los demás. Puede ser fácil caer en el hábito de concentrarse en
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