“LA GARANTÍA JURISDICCIONAL DE LA CONSTITUCIÓN” DE HANS KELSEN

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- Las garantías objetivas que tienen también un carácter represivo muy notorio, son la nulidad o anulabilidad del acto irregular; el acto nulo es aquel que le falta el carácter jurídico, de esta manera no es necesario, para retirarle su cualidad usurpada de acto jurídico, otro acto jurídico y por lo contrario, si un nuevo acto jurídico fuera necesario se estaría en presencia de la anulabilidad.

- La “anulación del acto constitucional” es la que representa la garantía principal y la mas eficaz de la constitución.

- La garantía preventiva personal (organización en forma de tribunal)esta, de antemano fuera de consideración ya que la legislación no puede ser confiada a un tribunal, en razón de que la organización del órgano legislativo esta esencialmente dominado por otro puntos de vista al de la constitucionalidad de su funcionamiento.

- En contrario a las garantías represivas (la responsabilidad constitucional y civil de los órganos que realizan actos irregulares) son perfectamente posibles, solo que en lo que toca a la legislación no se trata responsabilidad del parlamento(no es un sujeto apropiado de responsabilidad civil o penal), por lo contrario los individuos asociados a la legislación son los jefes de estado y ministros, ellos pueden estar sujetos a una responsabilidad por inconstitucionalidad de las leyes, sobre todo que la constitución nos dice que los jefes de estado y ministros asumen por la promulgación o referendo la garantía represiva “Responsabilidad de la constitucionalidad del procedimiento legislativo”.

Entonces la “responsabilidad ministerial” no es en sí mismo un medio muy eficaz, al igual que otras garantías personales son también insuficientes porque no atacan directamente el acto irregular, en particular la inconstitucional. Es difícil decir tomando en cuenta este estado de cosas, que la constitución se encuentre garantizada, no lo estará verdaderamente, sino cuando la anulación de los actos inconstitucionales es posible.

Kelsen propone básicamente la existencia de jueces especializados que no provengan del Poder Judicial y que actúen como “legisladores negativos”, capaces de expulsar del ordenamiento jurídico las normas que sean contrarias a la Constitución.

En el resultado del control constitucional, se deduce que si se quiere que la constitución sea efectivamente garantizada, es necesario, que el acto jurídico interpuesto al control del tribunal constitucional sea directamente anulado en dado caso de considerarse irregular, la sentencia debe tener fuerza en anulatoria aun en casos de normas generales.

Kelsen propone sobre la no anulación de una ley o reglamento en su totalidad, sino que puede someterse a solo alguna de sus disposiciones, ya esto corresponderá al tribunal constitucional entrar al estudio sobre anular la ley o reglamento o algunas disposiciones.