Más que amor
Enviado por Ninoka • 9 de Enero de 2019 • 1.717 Palabras (7 Páginas) • 336 Visitas
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personas. Ella no había querido a alguien tanto y en ese momento se preguntó si el haber conocido a Rana, el verla y hablar con ella durante meses ambas habían empezado a despertar un poco de sentimientos.
La incógnita siguió así durante días, la incertidumbre de saber si sus sentimientos eran verdaderos y correspondidos.
Un día le pidió a Rana que viniese a su casa y conversaran acerca de las posibilidades que habían de que ambas pudieran tener una relación. Y ella acepto.
Eran las 12 del mediodía y Azul estaba sumamente nerviosa, sabía que en este momento su vida monótona llena de depresión y banalizo cambiaria.
-Hola, A.
-Hola, Rana, pasa por favor.
Al entrar Rana se dio cuenta que la casa de A, era extraña, no por lo acabada que estaba si no porque tenía una frialdad que hasta cierto punto daba miedo, pero, también se sentía un poco de tranquilidad. Era confuso el ambiente. Aun así no perdió de vista la bonita mesa de 2 con un rica y atrayente comida, seguramente comprada en algún restaurant, claro, a Azul no le gustaba cocinar.
Durante 2 horas de degustar su comida entre platicas y risas, llego el momento que Azul debía decir el motivo que hizo preparar todo esto.
-Rana, desde hace unos meses que empezamos a hablar me ha encantado compartir contigo tantas cosas, saber que eres no igual a mí pero sí. O sea que eres la persona que desearía conocer por el resto de mis días, o sea que me gustaría tener a mi lado…–los nervios atacaron a Azul y esta quedo en shock, ya no sabía que decir, pensó que lo había estropeado todo y dejo las mano caer a hacia los lados-
Rana, al verse en un momento de incomodidad empezó a cantar… una melodía armoniosa, reconfortante. Su vos era tan bella que de pronto su temor desapareció y pudo recuperar su confianza y sí, se le declaro en medio de un grito…
-Rana, ¡te quiero! Quiero saber si quie… si quieres ser mi nov…
Rana dejo de cantar se paró de su silla y empezó a reír, sí, no era por los nervios era porque al parecer el grito de Azul fue tan fuerte que la asusto.
Azul dejo pasar unos minutos hasta que Rana dejo de reír y ella recuperaba el aliento.
D E C E P C I Ó N
-Re, ¿quieres ser mi novia?
-¡No! A, no podemos. Sabes mi situación, sabes que estoy mal y que no podría dañarte eres una niña, mereces algo mejor. No es que no lo sienta, pero no quiero perjudicarte.
Azul, quedo en blanco. Sabía que Rana tenía un hijo, muchos problemas emocionales después que el amor de su vida falleció y que su vida se tornaba siempre en diferentes direcciones, era la mujer más bella y podrida a la vez. No sabía que le había atraído de ella pero sabía que no era fácil de dejar ir.
Los días pasaron y Azul no sabía más de ella, ya no contestaba sus mensajes, la había bloqueado y cambio de número.
-Rana, ¿estás ahí? Chaparra, contesta. Por favor, por favor.
3 meses después Azul seguía devastada, no comprendía porque los últimos años de su vida todo se había vuelto horrible, en dónde había quedado todo lo bello que en su infancia había vivido. Tomo la decisión cambiarse de casa, de página y re empezar todo. No podía seguir llorando y deprimiéndose por un amor mal correspondido y dañino.
Los meses siguieron su curso, no todo siempre fue bonito y hermoso, llegaban días de depresión constante que no se iba. No sabía que hacer incluso llego a pensar en la muerte, ¿por qué en la muerte? La vida le había jugado mal, pero no podía seguir así, tenía que terminar esto de una vez y fue cuando decidió cambiar de libro comenzar una nueva historia de amor pero ahora era amor propio.
E P I L O G O
Decidir trascender esto era una etapa sumamente difícil, el tenerlo todo y después no tener nada. Que en realidad nunca tuvo nada, solo fueron ilusiones que ella misma se creó. Nadie tuvo la culpa de que ella no viera la realidad, cuando se está en un momento oscuro y llega alguien a crear una luz y piensas que todo va a cambiar es ahí donde todo se vuelve más negro.
Debemos aprender que la única luz que puede iluminar lo negro de nuestras vidas somos nosotros mismos. No hay nada que nos impida ser infelices más que nosotros mismos.
Si tu no prendes la llama de la claridad nadie lo hará por ti, así pasaran miles de Ranas en tu vida pero si no haces un cambio tu no podrás crear nuevas cosas.
No hay plantas que crezcan en la oscuridad, ellas necesitas el sol para vivir y el sol eres TÚ.
Recuerda que no es necesario cambiar de hoja, es justo y necesario cambiar de libro para empezar a crear nuevas historias: el amor, la familia, la vida como humano.
Si un libro quedó inconcluso no creas que nunca se va a terminar, esto es temporal llegará el momento en el que la vida te permita terminarlo pero por el momento sana
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