CASO DE AMERICAN EXPRESS

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Mitch Kurz, presidente de Y&R Advertising, lo describe como el más humano de todos los directores ejecutivos con los que ha trabajado. “tiene extraordinarias habilidades como escucha. Desea oir activamente tus opiniones. Un ejecutivo puede pasar 15 minutos con Ken y quedar motivado durante todo el mes siguiente sin que medie mayor contacto. Ken incentiva una clase de lealtad que el dinero no puede comprar”. Chenault, según Kurz, es uno de los pocos líderes que puede hacer que lo doloroso se convierta en algo llevadero.

Kurz explica que cuando American Express tuvo que reducir los costos de la empresa 1.4 mil millones de dólares, lo que implico despedir a 12,000 mil personas entre 1991 y 1994, Chenault, fue elegido para realizar la labor. Tuvo que hablar con los empleados y compartir su dolor, pero los convenció de que los recortes eran necesarios e inevitables. En palabras de Chenault, despedir a los empleados es un trabajo muy difícil si tienes conciencia y quienes lo conocen consideran que si la tienen.

Una debilidad de Chenault es, algunos dirían, su tendencia a ser demasiado responsable. Según David Kenny, ex empleado de American Express, “Ken comparte el reconocimiento cuando las cosas salen bien, pero cuando no, asume la responsabilidad de manera personal”. Es su esfuerzo por dar lo mejor de sí, Chenault no se conforma con lo logrado. “celebra la victoria una hora -dice Kenny- y luego, empieza a pensar como hacer las cosas mejor. Desea que todo siempre salga perfecto. Procura y se siente motivado por la excelencia”.

Al termino de una entrevista con la revista Ebony, Kenneth Chenault afirmo que todo lo que busca es marcar la diferencia. Mas allá del consejo de administración, se percibe como servidor público. Se trata de un verdadero líder transformacional que considera que su carrera le ha ofrecido una plataforma y una oportunidad para generar un cambio fundamental.

Chenault es un individuo con muchos talentos. Posee todos los rasgos de un líder y estratega transformacional.