La ética en el Neuromarketing.

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La comunidad médica ha mostrado una oposición clara al uso de estas estrategias con fines económicos; el que existan técnicas utilizadas en el neuromarketing que analicen varias áreas del cerebro puede considerarse poco ético al hacer uso de instrumentos que no se sabe a ciencia cierta si pueden llegar a perjudicar a las personas que se someten a estos estudios y de esta manera ir en contra de un valor muy importante para la rama de la mercadotecnia que es ante todo cuidar al consumidor. Sin embargo, existen argumentos a favor que pueden utilizarse para ello; el saber cómo funciona el sistema nervioso provee conocimientos muy importantes a la hora de comprender las emociones del consumidor, lo cual es una limitante en las investigaciones basadas en métodos tradicionales, como las encuestas, entrevistas a profundidad, focus groups, etc. aportando de esta manera los mejores diagnósticos para la optimización de un proyecto. De igual manera, es importante mencionar que hoy en día no se cuentan con investigaciones suficientes que demuestren que estas técnicas pueden perjudicar a corto o largo plazo la salud de las personas o afectarlas en algún sentido su persona. El neuromarketing se nutre de cada dato e información recabada a través de estos estudios y es de esta manera que crea productos que aumentan la posibilidad de ser adquiridos por una mayor parte del mercado.

Hoy en día, resulta fundamental para una empresa el tener en cuenta el componente humano durante el desarrollo de un nuevo producto o servicio; para ello existen tendencias en particular como el neuromarketing que aportan conocimientos que, correctamente aplicados pueden suponer una ventaja competitiva en el mercado.

En este ensayo se analiza desde una perspectiva ética la ciencia del neuromarketing, en donde se argumenta de diferentes maneras cómo esta práctica puede llegar a hacer un bien en la sociedad jugando a favor del consumidor sin poner en riesgo los intereses de las personas. Definitivamente el neuromarketing es una poderosa herramienta con la que las empresas pueden beneficiarse, no obstante debe ser manejada con suma cautela. La información que se obtiene de los estudios realizados a través de estas técnicas, es una de suma importancia y sumamente delicada. La misma puede ser utilizada con fines que no necesariamente vayan a la par con los cánones de ética de la profesión, es por ello que creo plenamente que el neuromarketing sea ético o no, depende 100% de su uso, la finalidad y la forma de proceder en los estudios, no depende de la disciplina como sí, sino de aquellos que la aplican.

Referencias

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Barros, R. (2006). La marca y el deseo.

Revista electrónica Mercado, Editorial Coyuntura S.A. Recuperado de http://www.mercado.com.ar/nota.php?id=368114

Ferrés, J. (2009). Las pantallas, entre la razón y la emoción.